Comida y plática

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Rápidamente Teddy y los demás entraron al comedor directamente a su mesa.

— Bien, ahora que ya estamos todos, podemos empezar la comida — dijo Dumbledore levantando los brazos haciendo que apareciera un gran banquete.

En la mesa de Gryffindor estaban platicando sobre todo lo sucedido y las presentaciones.

— ¡Vaya! Todo esto es muy raro — dijo Harry.

— No puedo creer que esté pasando — dijo Hermione.

— No puedo creer que hayamos sobrevivido — dijo Ron.

— Bueno, según entendí hubo una guerra, Harry, tú y yo sobrevivimos, Remus y Tonks fallecieron, tus hermanos tienen hijos o son padrinos, pero hay una cosa que me preocupa y es que todavía no sabemos nada de Fred — dijo Hermione sin saber como terminar.

— ¡No Hermione! ¡No lo digas! ¡No! ¡Eso no puede pasar! — gritaba Ron desesperado provocando que todos voltearan a verlos.

— Ron, Ron, Ron, Ron — llamaba Hermione sin lograr que le hiciera caso —¡Ronald Bilius Weasley! — gritó finalmente obteniendo su atención.

— Siéntate amigo — dijo Harry.

— ¿Qué les pasa? — preguntó Remus algo preocupado.

— Ni lo intentes, siempre son así, no lo podrás averiguar, nunca podrás averiguar de qué es lo que hablan cuando están los tres juntos — dijo George.

— Ron, no estamos seguros de que eso sea lo que está pasando, pero si llega a serlo hay que pensar cómo van a reaccionar tú papá y tu mamá — dijo Harry.

— Piénsalo Harry, Hermione jamás se equivoca — dijo Ron siendo bastante pesimista.

— Bueno, dejemos de hablar de eso y hablemos de otra cosa, ¿Si? — dijo Hermione.

— Vale, si — dijo Ron sin darle importancia.


— No, ya te dije que no — dijo Lily L.

— ¿Por qué? — pregunto Scorpius.

— No me siento lista — dijo Lily L. sin mirarlo a la cara.

— ¿Por qué? — volvió a preguntar.

— No en esta época.

— ¿Por qué?

— Este no es nuestro tiempo, no sé cómo se lo tomaran mis hermanos y no quiero que pase lo que paso con tu abuelo — dijo Lily L. algo triste.

— Lo de mi abuelo no se va a repetir.

— Bueno, les diremos.

— ¿Si?

— Si — dijo Lily L. sonriéndole.

— ¿De qué tanto hablan? — dijo James S. llegando de repente.

— Nada que te interese — dijo Lily L. mirándolo mal.

— Pero a mí todo me interesa — dijo empujándolos y sentándose en medio de los dos.

— No James, largo — dijo Lily L. de mal humor.

— ¿Es cierto lo que veo? La señorita enojona se encuentra por aquí — dijo James S. burlándose.

— ¿Lo que mis bellos oídos escuchan es cierto? — dijo Fred II llegando de repente — ¿La señorita enojona está de vuelta?

— ¡No! Mejor guarden silencio, si no quieren que de verdad me enoje — dijo Lily L. provocando que todos voltearan a verlos — y quítate.

— ¿Segura que aún no te enojas? — preguntó Teddy desde la otra punta de la mesa.

— ¡No estoy enojada! Ahora a comer — gritó Lily L.

— Sí, mamá — respondió Teddy riéndose pero empezando a comer mientras James S. y Fred II regresaban a su lugar.

— ¿Cómo puede ser que le hagas caso a alguien menor? — preguntó alguien desde la mesa de Hufflepuff.

— Porque tú no la conoces, es muy buena con los hechizos y más cuando está enojada.

— Y yo que pensé que ya estaba enojada.

—Les dije que no, ahora silencio y póngase a comer — dijo Lily L. sin gritar pero aun sonando amenazadora, provocando que no solo ellos pero prácticamente todos en el comedor se pusieran a comer — así me gusta — dijo para luego sentarse a comer.

— Amor das miedo — susurro Scorpius.

— Lo sé — contesto guiñándole un ojo.


— ¿Teddy, estas bien? — pregunto Tonks, luego de verlo tan callado.

— Sí, claro — contestó rápidamente — es solo que esto es muy raro para mí, siempre soñé con estar con ustedes, con conocerlos y ahora la verdad es que no sé qué pensar, estoy feliz pero también estoy preocupado.

— Veremos qué podemos hacer, mientras podremos pasar tiempo juntos — dijo Remus.

Teddy solo asintió y continúo comiendo.


Los chicos del pasado se encontraban observando todo, sin saber que decir o hacer.

— Estoy preocupada — dijo Lily, bajando su cuchara.

— ¿Qué? ¿Por qué? — preguntó Canuto con la boca llena de comida.

— Es bastante obvio que algo malo ha sucedido — respondió Alice — quitando el hecho de que todos estamos en una época en la que no deberíamos.

— ¿Insinúas que hay algo más aparte de esta encantadora confusión?

— Si Canuto, yo también lo noto — apunto Lunático.

— Están todos paranoicos — dijo Canuto renegando.

— Harry y Neville lloraron al vernos, parece que todos estuvieran viendo fantasmas y los únicos adultos son Remus y Sirius — dijo Lily.

— Y sin ofender pero lucen bastante mal — agregó James.

— Averiguaremos que está pasando aquí — dijo Canuto.

— Olvidas que no podemos preguntar — apunto Frank.

— No olvides que somos los merodeadores — dijo James con una sonrisa mientras sacaba algo de su bolsillo.

— La cap...

— Shhh, que nadie se entere.

— Esta noche sabremos la verdad — dijo Canuto confiado — y tal vez podríamos hacer alguna broma.

— No Black, una broma nos trajo aquí, así que agradecería que se concentraran en escuchar algo útil y listo — dijo Lily mirándolo mal.

— Bueno, bueno, pero solo por esta vez.

—Es hora de continuar — dijo el profesor Dumbledore poniéndose de pie y haciendo que la comida desapareciera.

Los chicos a los que aún les faltaba presentarse fueron saliendo, dejando solo a uno que se puso de pie frente a todos.

Una travesura, un viaje al pasadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora