Treinta y tres.| Girls In Magcon.

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— La cantante, Madison Martinez y su mejor amiga, Karina Moreno sacaron una canción colaborativa que está rompiendo el internet —mencionó la mujer rubia del popular programa de chismes.

— Así es Kai, y es que la canción narra la historia de dos chicas que se enteran de que su novio es también novio de la otra, por lo que ambas, llenas de enojo, deciden tenderle trampas durante un rato, para luego ambas decirle en la cara que ya no les interesa estar con él —espetó el pelinegro al lado de la chica, mirándola con ambas cejas alzadas.

— El novio mentiroso del vídeo clip es interpretado por el guapísimo Cameron Dallas, quién habló sobre la canción y el vídeo en un directo de Instagram ayer por la noche —volvió a hablar la chica—. ¡Veamos lo que dijo!

, uhm, estoy muy contento con el resultado. Ambas son unas chicas muy talentosas, y la idea de la canción y el vídeo son muy originales. Me encantó trabajar con ellas, y lo volvería a hacer —habló Cameron, sonriendo levemente—. , yo conocí a Madison hace unas semanas gracias a un evento de modelaje; es una chica encantadoramencionó en otra pare del directo, sonriendo al finalizar y comenzando a contestar otra pregunta hecha por algún fan.

— Interesante —murmuró Camila, mirando fijamente la pantalla de la televisión—. ¿Tú sabías que mi novia conoció a Cameron Dallas? Porque yo no —Verónica la miró sin decir nada, completamente seria—. Te hablé a ti.

— Oh, uhm, sí

— ¡¿Porqué siempre soy la ultima en enterame de todo?! —chilló dando un golpe en la mesa.

— ¿Porqué te molesta tanto, Camila? Solo conoció a un modelo más.

— Claro, un modelo más. Ese "modelo más" —hizo comillas con sus dedos—, es uno de sus más grandes crush. Lo ama desde hace años, y siempre soñó con conocerlo, además de que era su ídolo antes de ganar la competencia.

— ¿No confías en ella?

— ¿Tú cómo reaccionarías si la situación fuese entre Karina y Shawn?

Verónica guardó silencio—. Es distinto

— ¡No lo es!

— ¡Sí lo es!, tú eres novia de Madison, y las relaciones se basan en confianza, Karina y yo no somos más que amigas. Yo soy sólo una lesbiana en el closet enamorada de una heterosexual.

— ¡Hola! —Karina apareció por la puerta con una sonrisa, siendo seguida por Madison—. ¿De qué hablan? —preguntó dejando sus llaves en la mesa junto a la puerta.

Madison sólo les sonrió a las otras dos chicas, para caminar hasta la cocina en silencio.

— Sobre tu video con Mad —respondió luego de unos segundos Verónica.

— Sí —pronunció Camila—, exactamente, sobre el video que las está volviendo virales. Eso incluye a Cameron Dallas —miró hacia la cocina al mencionar el nombre del chico, dando la indirecta a Madison, a pesar de que ella no estaba viéndola.

La pelinegra salió de la cocina con un vaso con algún refresco dentro, en silencio. Se sentó junto a su novia, siendo seguida por la mirada de las otras tres chicas. Tomó un poco de su bebida y miró a Karina mientras lo hacía, para luego ver a Camila, confundida—. ¿Qué?

— ¿Porqué no sabía que el protagonista masculino de tu video iba a ser Cameron Dallas?, o ¿Porqué nunca supe que lo habías conocido en persona? —atacó la novia de Mad seria.

— Te lo dije, pero nunca me prestaste atención —respondió Mad.

La sala de estar se quedó en completo silencio. Karina fue hacia la cocina, y Verónica se removió en su lugar incómoda.

— ¡¿Como que no te presté atención?! ¡Siempre te pongo atención! ¡Tienes todos los días a todas horas todo mi amor y atención!

— No, Camila. Tú tienes todos los días y a todas horas mi atención, mi amor, mi comprensión y mi apoyo. Todos los días tienes un problema tonto con el cual abrumarme, todas las noches me dices lo estresada que estás, me cuentas todos tus problemas y yo siempre estoy ahí para apoyarte, para decirte que todo estará bien y para abrazarte cada vez que lo necesitas, mientras que cuando soy yo la que te necesita tú no estás. Tú estás todo el tiempo preocupándote solo de ti, y cuando yo te digo algo sobre mí, algo que me molesta, me entristece o me alegra, tú no me prestas atención. Me ignoras o sólo dices "sí, está bien". ¿Qué es lo que pretendes? ¿Que esté todo el maldito día a tu lado, escuchando tus mierdas para no recibir nada más que tu estúpida sed de besos y sexo? Estoy todos los días apoyándote incondicionalmente, sin importarme si mis problemas te valen una mierda como para que tú vengas a decirme que no te dije nada. Te lo dije, y me ignoraste, así que no vengas a decirme que no te dije nada.

Madison y Camila estaban de pie, una frente a la otra, viéndose con miradas retadoras la una a la otra. 

— Hasta te invitó a acpañarnos a grabar —pronunció Karina con el semblante serio. Camila la miró, y fue hasta la rubia pasando por el lado de Madison, y golpeando su hombro con el contrario de manera grosera.

— Tú no te metas.

— Me voy a meter lo que me dé la maldita gana. Voy a defender a Madison sin importarme una mierda tu opinión o tus estúpido celos sin razón.

— Cállate.

— No. No voy a hacerlo, porque tú no te mereces a Mad. De ninguna maldita manera te la mereces. Ella me habla todos los días de lo mucho que te quiere y me dice que le que preocupan demasiado tus problemas. La única que debe callarse aquí, eres tú

— Karina, callate —le ordenó Madison—. No es tu problema.

— ¡Sí lo es! ¡Es mí problema si es el tuyo! ¡Me preocupo si tú te preocupas, Mad! ¡Llevamos más de diez años de conocernos, sé todo sobre ti como tú lo sabes de mí, y me duele que ella te reclame cuando tú podrías hacerlo por mil cosas que sí tienen sentido!

— ¡Te dije que te calles! —gritó—. No es tu problema, y cuando quiera escuchar tu opinión, me la darás, y ahora mismo no te la pedí. Yo sé qué hago y qué dejo de hacer más que nadie, y que me conozcas desde hace más de diez años no significa que tengas voz o voto en mí relación. Por que la que está saliendo con Camila soy yo, no tú. Así que dejala en paz.

Los ojos de Karina se cristalizaron. La boca de Verónica estaba abierta formando una O, ya que estaba sorprendida, su entrecejo también estaba fruncido. El pecho de Karina se elevaba y bajaba rápidamente gracias a la euforia que tenía dentro de sí misma. La rubia tragó saliva, caminó hacia la puerta chocando su hombro con el de su amiga, para luego tomar las llaves que había dejado junto a la puerta y sin decir nada más, salió de la casa dando un portazo.
Verónica pasó sus manos por su cara y soltó un suspiro, para luego salir también de la casa.

Girls In Magcon ➳ Old MagconDonde viven las historias. Descúbrelo ahora