Capítulo 26. Ricardo

3.9K 404 4
                                    

**Capítulo Narrado por Alice**

♡♡Alice en Multimedia♡♡

¿Cómo me había encontrado Ricardo? Sólo él lo sabía pero no faltaba mucho tiempo para que me enterase. La cena sería en menos de media hora y salía de camino hacia el restaurante donde me había citado. Me había negado a ir a verlo pero William insistió tanto que por no aguantarlo, decidí aceptar la invitación. William era un bendito,  tenía infinita paciencia con cualquier cosa pero si de algo me podía quejar respecto a él era de su insistencia. Mi hijo había quedado bajo su cuidado, en las noches se ponía muy nervioso y no quería que mi pequeño perforara los tímpanos de su tío y de medio bar ya de paso.

Caminaba pausadamente  pues intentaba demorar lo máximo posible aquel reencuentro. No sabía porque motivo pero estaba muy nerviosa, como nunca me había sentido en compañía de Ricardo. Algo me hacía sentirme atraída a pensar que no traía buenas noticias. Probablemente fuera fruto de mi paranoia  o de mi inclinación de los últimos meses a creer que todo era más negro de lo que realmente era. Había dejado a un lado mi optimismo, como si lo hubiesen desterrado de mi ser.

-¡Te pillé!-sentí que alguien me cogía el culo. Me giré dispuesta a darle un tortazo al alma capaz de hacer eso pero mi sorpresa fue mayúscula-. ¡Alice! ¡Cuánto me alegro de verte! No tienes ni idea de cuanto te he echado de menos.

Ricardo estaba frente a mí con su bella sonrisa intacta. Lucía tan guapo como siempre y el brillo de sus ojos me hacía saber qué su entusiasmo era sincero y su alegría por verme verdadera. Corrí hacía él y lo abracé como un koalita.

-¿Qué haces aquí?-le pregunté con la voz enpañada en emoción-. Habíamos quedado en el restaurante.

-La última vez que te invité a cenar, tardaste media hora en llegar, Ali. Esta vez he querido curarme en salud así que decidí venir a buscarte.

-¿Estás insinuando que soy una tardona, Ricardo?.

-No lo insinuo, te lo digo directamente-me guiñó un ojo-. Cuéntame como está mi sobrino. ¿Cuándo nacerá?-me tocó la barriga que apenas tenía-.

-Está en casa con William, Ricardo.

-¿En serio? ¿ Y por qué no te lo has traído? ¡Oh, Ali! Tengo muchas ganas de conocerlo.

-Es que es un poco gruñón-le dije-No he podido evitarlo. Es la copia exacta de su padre.

Ricardo se rió a carcajada limpia.  Nos dirigimos al restaurante cogidos de la mano y gracias al cielo era de comida italiana. Tantos meses en Londres me habían dejado un pelín hastiada de la comida inglesa. Estaba rica pero la italiana era la mejor sin duda alguna y lo mejor es que podía beber vino. Se me deshacía la boca pensando en un prosecco. No hablamos de Leonardo en ningún momento de la cena hasta que llegó el postre y Ricardo decidió amargar tan dulce final.

-Alice, hay cosas qué debes saber sobre Leonardo-me miraba a los ojos preocupado-. No quiere venir a buscarte porque piensa que tú y William se aman. He venido exclusivamente hasta aquí para por favor pedirte que vuelvas a Florencia a hablar con él.

-Que yo sepa, el primero en irse con otra fue él-le espeté-.

-Te equivocas, cielo. Él nunca se fue con Gemma. Fue todo una trampa que ella os tendió para separaros y ya puedes ver que con muy buen resultado.

-¿Cómo?- a punto estuve de escupir el vino en la cara de Ricardo-. ¿Leonardo no estuvo con Gemma?.

-No, ella le mostró unas fotos en las que aparecías con William. Él se fue de India para buscarte pero nuestros vuelos se cruzaron por el camino.

Tu Sarai Sempre la Mia Vita(COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora