El caballero y el omega (Otayuri) (Omegaverse)

Capítulo 6

Se encontraba rodeado, frente al rubio se encontraban tres alfas, pero a pesar de encontrarse en ese tipo de situación no sentía miedo, ya que esos hombres podían ser alfas más eso no garantizaba que supieran luchar y el rubio estaba tan enfurecido por lo que paso con su amigo omega y Otabek, que sentía que luchar sería una buena manera de desestresarse.

-Sería mejor si vinieras por la buenas, preciosura. - Le dijo un alfa alto de cabello negro intentando sonar seductor. - No nos gustaría lastimar ese hermoso rostro que tienes.

-Es cierto, sería un desperdicio dañar esa linda cara que tienes. Como disfrutare tenerte en mis brazos. - Dijo el otro alfa relamiéndose los labios. Yuri miraba asqueado a los sujetos que le lanzaban miradas lascivas y comentarios vulgares.

-Yo no ne- pero no pudo continuar por que fue interrumpido por una estruendosa voz.

-No creo que sea de caballeros aprovecharse de una dama. - Se escucho fuerte y claro y de entre los arboles apareció un joven alto de cabello negro que miro a los hombres con una sonrisa altanera. - No se preocupe hermosa dama, yo me encargare de ellos. - Dijo viendo a Yuri y guiñándole el ojo.

Yuri al ver la sonrisa burlona y el descarado coqueteo con el que el azabache le vio, se enfureció más y al ver que los tres alfas se distrajeron, no dudo en atacarlos.

El azabache no podía creer lo que veía, la hermosa rubia que tenía en frente sabia luchar muy bien, podía ver como daba golpes certeros y utilizaba las armas de sus oponentes contra ellos, esa batalla no duro demasiado y ella salió victoriosa.

Era una fiera.

-Quien va a ayudar a quien. - Fue lo que Yuri le refuto al mayor, retándolo con la mirada. Si deseas también te puedo derrotar, dijo para blandir la espada que no desenvaino con los otros alfas.

-Yo pensé que necesitabas ayuda, hermosa dama, pero veo que me equivoque. Usted sabe pelear muy bien. - Dijo sonriéndole seductoramente. - A pesar de que... - El mayor pudo sentir mejor el aroma del rubio. - ...eres un omega. - Dijo sorprendido. - Realmente no me esperaba que-

- ¿Que un omega sepa defenderse? - Dijo con desprecio el rubio. - Pues para que sepas, no somos nada inferiores a ustedes asquerosos alfas. - Dijo con odio, mirando al azabache. - Yo puedo ser un omega pero aun así les puedo patear el trasero. - El rubio se puso en guardia, a la espera de que ese alfa azabache también lo atacara, pudo sentir su aroma, todo en él era imponente sabía que sería una buena pelea.

A pesar de los malos pensamientos del rubio y de la manera en que trato al joven, el azabache solo comenzó a reír a carcajadas.

-Yo nunca he pensado que los omegas sean débiles. - Decía sin poder contener la risa. - Conozco a una omega que sería muy buena contrincante para ti. Lucha mejor que muchos alfas. - Dijo calmándose y viendo mejor al rubio. - Eres una persona interesante señorita.

-Deja de decirme así idiota, acaso no notas que soy un hombre. - Le grito el rubio.

-Puedes ser hombre, pero eres más hermoso que muchas mujeres omegas y betas que he visto. - Dijo seductoramente agarrando su mentón con su mano y acercándolo a él.

El rubio al sentir el toque del mayor, actuó rápidamente y le dio un golpe certero en el estómago, haciendo que el mayor se arrodillara y abrazara su estómago intentando calmar el dolor.

-E-e-eso s-s-s-si me do-lio. - Dijo entrecortadamente viendo al rubio que se alejaba. - E-espera. - Se puso de pie. - No es seguro que andes solo.

El rubio solo ignoro al mayor y continuo su camino.

Yuri tenía que continuar, debía hacerlo. Debía ayudar al otro omega.

-Exactamente a dónde vas, fierecilla. - Decía el mayor que seguía al rubio de cerca.

-Eso no te importa. Y deja de seguirme idiota. - Grito el menor.

-Por el simple hecho de que te sigo es por lo que deseo saber a dónde nos dirigimos, quiero saber si tengo que protegerte. - El rubio lo miro asesinamente. - O proteger a las personas que te han hecho enojar de esa manera.

El rubio lo ignoraba olímpicamente.

Pero luego pudo distinguir una silueta a lo lejos, solo a unos cuantos metros.

-Hey idiota.

-JJ- Le dijo el mayor cantarinamente. - Es mi nombre o bueno me llamo Jean Jacques Leroy. - Le respondió al ver la duda en el rostro del rubio.

-Como sea. - Dijo restándole importancia al mayor. - ¿Qué tan bueno eres luchando?

-Depende.

- ¿De qué?

-De el motivo por el que luchare.

-Lucharemos por la libertad de un omega. - Fue la simple respuesta del rubio para desenvainar su espada.

-Entonces no lo dudes. - Dijo dirigiendo su mirada al lugar que miraba el rubio. - Ganare.  

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Lamento la demora y  que sea tan corto, es solo que realmente no se como poner toda la historia en palabra n_nUUU espero les guste.