La batalla final

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El reloj de una torre cercana sonó ya era dos de noviembre medianoche:

De las sombras surgieron siluetas aladas y entonces del volcán bajaron unas sombras y los ahuizontles llegaron rápidos y fuertes, la batalla sería una de las más sangrientas en la historia de los caza-fantasmas, una batalla que no sería olvidada nunca, una batalla histórica, sangrienta que definiría el destino de no solo México sino del mundo.

Martina llega volando y se para frente al ejercito de caza-fantasmas, atrás de ella, todos los ahuizontles.

Martina: Finalmente morirán y todo esto será nuestro, incluido su bunker y todas las ciudades

Leo: Te aconsejo que lleves todo tu ejercito a casa y no vuelvan nunca, vete a casa.

Martina: ¡¡Jaja!!, esta es mi casa, todo el mundo lo es, el mundo será mío. ¡¡¡Ataquen!!

Todos los ahuizontles van hacia el frente riendo y mostrando su verdadera forma, Leo por su parte le dice a su ejercito -¡¡al ataque!!

La batalla empieza, los ahuizontles, son menos pero no mueren por la lanza solo los hace lentos, los ahuizontles, atacan con sus garras y aunque los caza-fantasmas son fuertes van retrocediendo, mientras el Xitle empieza a humear, el ambiente se torna rojo por la sangre, Leo siente que un ahuizontle lo ataca, se lo quita de encima clavándole la daga y matándolo al instante, mientras tanto ve a varias sombras que se acercan a él, usa su antorcha y luego un ahuizontle, lo quiere matar, pero Nando llega y le entierra una lanza, la cual lo empieza a  alentar el tiempo suficiente para que Leo escape, Leo se sube a una gran roca desde ahí ve toda la batalla, después las sombras empiezan a atacar, ya no hay vuelta atrás, pero cuando se vuelve a la la batalla y mata varios ahuizontles, ve que a lo lejos, Samuel llega con varios monstruos, Leo se preocupa, la batalla va tomando fulgor, los ahuizontles sangran pero no desisten.

Juan se encuentra atacando a una sombra con la antorcha sagrada, cuando ve a los monstruos que llegan con Samuel

Juan: Diablos, vienen más.

Entonces Neultroulth ataca a Juan:

Neultroulth: Vaya, vaya, Juan, dime ¿ y tu amigo Leo?

Juan: ¡Neultroulth!!, no nos vencerán, y rescataremos a nuestros amigos

Neultroulth comienza a reírse malignamente para luego aventarse encima de un soldado caza-fantasmas, al cual le saca los ojos, y luego lo mata, hachas, espadas, garras y muerte se ven por todas partes, para acabar con todos los ahuizontles, tienen que matar a su líder y entonces, Samuel alcanza a ver a Leo.

(Narra Samuel)

Ahí está ese maldito, lo voy a matar, finalmente va a pagar por todo lo que hizo, por matar a mi hermano, por humillarme y por hacerme perder la cordura, sí ¡¡estoy loco!!!, pero lo único que me hace sonreír y me mantiene cuerdo es un lindo sueño en donde mató a Leo, sí, puedo sentir sus huesos crujir, su piel ceder ante mi cuchillo, sus gritos, esa deliciosa sinfonía, me mantiene cuerdo y me hace sonreír y hoy finalmente la cumpliré, cumpliré mi deseo, además si él muere, su hermanito quedará tan loco como yo y mi venganza estará completo, ¿como lo mataré?, oh ya sé tengo una idea, voy a torturarlo, voy a encajarle mi cuchillo en la panza, en los brazos, en las piernas, luego voy a empezar a despellejarlo lentamente y cuando me suplique morir, yo voy a abrirlo como si estuviera haciendo una autopsia y quitarle todos sus órganos lentamente a ver cuanto resiste y cuando muera, voy a quitar un hueso suyo y lo voy a colgar en mi cuello y su cabeza (la única parte que no abriré) la colgaré en un muro de trofeos, mi venganza será realizada y luego podré estar en paz.

El curioso caso de Leo San JuanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora