Solo tú

Cap 29: Dos cafés

-Y bueno, ahora que ya lo has dejado con él, ¿vas a admitir de una vez que te gusta Alfred?.-Amaia rodó los ojos y suspiro mirando hacia el suelo, otra vez la maldita pregunta que no sabía nunca responder.
-¿Me lo preguntarás todos los días?.
-Sí, hasta que me des una respuesta.
-Pues nosé la respuesta Aitana, te lo digo siempre, és todo muy raro.-le acarició el brazo, sabía que estaba confundida, pero pensaba que después del beso algo se había aclarado.
-¿Y él que te ha dicho del beso?
-Pues que no le ha molestado, pero como no le va a gustar si lleva ya semanas intentandose liarse conmigo.
-Amaia, ha cambiado, estoy segura, y gracias a ti.-Amaia levantó la mirada del suelo, y le sonrió a Aitana.
-No sé, a veces pienso que ese no es el Alfred de verdad, y que es una persona más sensible, que le afectan las cosas.
-Exacto, pues poco a poco lo iras viendo más, pero ahora a comer que me muero de hambre.-se levantaron las dos de la cama y bajaron corriendo las escaleras.
Tubieron una comida tranquila, le contaron todo con detalle a Ricky y el flipaba con todo lo que había pasado en poco tiempo.
La tarde pasó tranquila, cogieron un buen bote de helado y enchufaron la televisión para mirarse todas las peliculas que había, y con todo el cansancio que tenian, acabaron los tres dormidos en el sofá.

-¡Chicas! Despertad o no llegais.-las dos ya se remoloneaban por el sofá, los lunes costaba levantarse más que nunca.
-Repito, ¡No llegais!.-las dos se despertaron bastante desubicadas, no se acordaban de la última pelicula que vieron, y tampoco de haberse dormido en ese pequeño sofá.
Se vistieron lo más rápido que pudieron, y  se despidieron, ya se verian por la tarde.

-Y yo que le digo ahora.-iban camino ya hacia la academia, y para variar, Amaia le volvia a dar vueltas al tema de Alfred, a veces parecía que solo hablaban de eso, y aunque era un poco verdad, no paraban de suceder cosas entorno al chico.
-De verdad, no te vas a cansar de dar vueltas a las cosas.-dijo Aitana rodando los ojos.
-Esque no se lo que hacer nunca con él, joder, me pone de los nervios.
-Más bien te pones nerviosa por verlo.-dijo Aitana dandole un codazo a Amaia.
-No he dicho eso.
-Pero lo piensas, mira yo solo te digo que este chico esta muy enamorado, así que no la cagues.-Amaia rodó los ojos y entró por la puerta del edificio.
-Si esque te lo digo siempre, de verdad, está enamorado.-y sin decir nada más Amaia empezó a subir las escaleras, Nos vemos luego, gritó Aitana desde recepción.

Volvió a bajar las escaleras, llevaba más de una hora esperando en la sala 8, ni rastro de Alfred, Amaia había intentado componer algo, y practicar su canción, pero no podía parar de darle vueltas a Alfred, así que tras enviarle dos mensjaes preguntandole porque no había venido, y sin obtener respuesta, se decidió ir a recepción.
-Hola Martí.-se apoyó en el mostrador y esperó la respuesta de Martí.
-¿Que pasa Amaia? No me vengas a pedir una sala porque no te la voy a dar.
-No, no es eso. Era por si sabías algo de Alfred, que no ha venido.
-Pues no, no se nada, preguntale si quieres a Miriam que viene hacia aquí.-Amaia se giró y la vió, se sonrieron y Miriam no tardó ni un segundo en abrazarla.
-Hola pequeña, que te trae por aquí.
-Nada, he venido a preguntar una cosa, pero ya está.-dijo dejandole sitio en el mostrador.
-Pues yo venía a pedir unas tiritas, haber si Martí tiene.
-Toma, si a demás de recepcionista, enfermero.-Miriam cogió la caja y se despidieron de Martí.
-Agoney no ha venido, así que me iba a tomar un café por aquí, te vienes y así me cuentas lo que te pasa.
-Miram no me pasa nada, solo que Alfred no ha venido y pues el trabajo...
-Ya el trabajo, venga vamos.-la llevó hacia una cafeteria cercana, Amaia se había pasado alguna vez por allí el año pasado, pero este año todavía no había entrado, y eso que le encantaban los cafés y las pastas de ese sitio en concreto.
-Haber cuentáme, que te veo agobiada.-Amaia echó la mirada hacia abajo y le contó todo el día que tubo ayer, con todo detalle.
-Madre mía, lo que te pasa en un domingo, y yo estiradita en mi sofá.-el chico de la cafeteria les interrumpió y pidieron el café, Amaia se sintió un poco incomoda, no paraba de mirarle y pues le intimidaba bastante, ya que tenia un par de años más que ellas.
-Bueno mira la parte buena, ya has cerrado lo de Marcos.
-Si, está bien.-Miriam se fijó en que Amaia no le estaba prestando mucha atención, miraba de reojo hacia el mostrador de vez en cuando.
-Y el chico del mostrador también está bien ¿no?.-Amaia asintió con la cabeza.-¡Amaia por dios! que te estoy hablando.
-Perdona Miriam, esque no para de mirar hacia aquí.-dijo señalando al chico.
-Pues chica le habrás gustado.
-Yo no, le habrás gustado tú, yo solo estaba vigilando.
-Bueno en fin, voy al baño, pide la cuenta mientrastanto.-Amaia asintió con la cabeza y levantó la mano, la cuenta porfavor gritó desde la mesa, a lo que el chico le sonrió y se acercó hacia la mesa.
-Són 4,90€.-Amaia sacó un billete de 5€ de la cartera.-voy a buscar el cambio y ahora vengo.
-Ten aquí tienes, 10 céntimos y esto de regalo.-el chico le entregó el dinero y un cupachups, Amaia le dedicó una sonrisa y le dió las gracias, justo cuando Miriam ya salía del baño.
-Anda que bien, mira que tiene una notita y todo, que majo el chico.-no se había dado cuenta del papelito que llevaba pegado, y en él estaba escrito Alex que se suponía que era su nombre, detrás parecía que llevaba algo más escrito, pero la vibración de su móbil la distrajo, un mensaje había llegado y esperaba que fuera de él.
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Holaaa, bueno estoy de vuelta, la verdad es que es de los peores que he escrito, pero siempre tiene que haber un capitulo intermedio mdonde no pase nada.
Bueno que creeis que pasará con Alfred y bueno con Alex, que haber si al final va atener un papel importante.
Contadme que os ha parecido y si teneis ideas pra la novela, que me las guardo todas para proximos capitulos.
Gracias por la espera de verdad. Os leoo
Alee chauuu
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