Capítulo 6: MIS DÍAS A TU LADO

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Un rayo de luz toco su cara, lo que le hizo abrir los ojos, era cerca del medio día y el apenas despertaba.
Lo primero que vio fue que la rubia no estaba ahí, inmediatamente se levantó.
Sus ojos buscaron una señal de ella y no estaba, pero en la pequeña mesa había un plato con arroz y pescado asado, una taza de té y un tomate. Cuando se disponía a comer vio una pequeña nota que decía que no era necesario esperarla.
Comía muy despacio y pensaba como es que había podido dormito tanto.
Su respuesta llegó cuando la puerta fue habierta y la rubia entró, solo con el/ella podía sentirse seguro.
—Eso no está muy frío ya?—
—Algo—
—mmm—
—Cuánto tiempo tienes viviendo aquí?—
—Poco— respondió antes de salir de la casa.
Sasuke se sentía extraño, no era común que el que llevara las platicas fuera él.
Cuando ella volvió él le pregunto —Cómo te enteraste que esto pasaría?—
—Me lo dijeron mis padres cuando interactue con el Chakra de ellos que estaba sellado en mi, después después el anciano me lo confirmo—
—Y sabiendo eso... Peleaste conmigo?—
—Tenía la esperanza de que me matarás y así no se descubriría mi secreto—
La sincera respuesta lo dejo helado... —Alguien a parte de los sannin lo sabe—
Ella comenzó a picar las verduras y Sasuke la veía tan concentrada que pensó que no respondería
—Gaara lo sabía, se lo conté cuando fue a visitarme en el hospital—
—Se lo dijiste a él y no a mi?— preguntó con algo de resentimiento
—No quería tu incredulidad y burlas—
—Qué te hizo pensar que él no se burlaria de ti—
—Él y yo hemos pasado por lo mismo. No se hubiera burlado—

Ya no dijeron nada ninguno, ella continuó cocinando.
—Cuando te iras?—
—Te molesta mi presencia?—
—No entiendo que quieres aquí?—
—Te buscaba—
—Para que? —
—Quien era la el falso Naruto?
—Un experimento de Orochimaru—
—Qué?—
—Era un hombre que estaba destinado a morir de cualquier manera—
—Tu permitiste que alguien fingiera ser tú... —
—Qué más da eso?, solo vete y piensa que de verdad estoy muerto...—
—No me iré, dejame ayudarte—
—Ayudarme?, No necesito ayuda y si algún día la necesito puedo pedirle ayuda a Gaara y... —
—Por qué...?— Sasuke no la entendia —Siempre dijiste que era tu mejor amigo. Dejame ayudarte—
—Ahora no necesito ayuda...— dijo desviando la mirada
—Por qué sellaste a Kurama—
—Él plan era que nadie me encontrará—
—Pues te encontré—
Ella lo vio a los ojos —Quien te dijo de mi?—
—Karin—
—Así que era ella... Sentí su presencia pero fue unos instantes antes de que el sello se rompiera. Después me olvidé...— le dijo y luego más para ella que para el agrego —debí sellar su lengua—
—De igual manera te hubiera buscado—
—Para qué?— su mirada parecía muerta otra vez viendo a la nada.
—Sakura me envió un mensaje para decirme que estabas mal, el día que todos lloraban tu muerte llegue y descubrí que no eras tu...—
—Volviste por un mensaje de Sakura?, debió estar feliz de que regresaras—
—Ella lloraba tu muerte...—
—Pero si le hubieras ofrecido empezar a revivir tu clan, ella se hubiera olvidado de mi muerte—.

Los días pasaban y poco a poco la rubia se. Acostumbro a la presencian de Sasuke...

Sasuke la veía ayudar a los vecinos que eran un par de ancianos, como tenía sellado a Kurama su fuerza era la de una mujer normal.
El no podía ayudar mucho puesto que no tenía un brazo y se mal decía por no haber aceptado el brazo que Tsunade le ofreció.

—Naru-Chan?— La llamo su anciana vecina.
—Listo abuela todo esta en orden —
—Gracias, eres tan amable— decía la mujer sonriendo —Pasa, te daré algo para que coman tú y tu amigo—
—Gracias abuela pero no es necesario—
—Anda entra— dijo sin hacer caso a la chica.
Una vez dentro, le pregunto
—Naru-chan, ese chico que vive contigo es algún familiar cercano?. Tu marido? —
La rubia empezó a ahogarse con su propia saliva —No. Abuela que cosas dice—
—Es un chico bastante guapo. Es algún primo—
—No, solo es mi mejor amigo. Aunque pensandolo bien, creo que es el único—
—Bueno, yo creo que él te ve como algo más que su mejor amiga. Ya tienen un mes viviendo juntos... Tu y él alguna vez han intimado...? —
La cara de la rubia estaba muy roja —Claro que no!— grito —ya le dije es solo porque somos buenos amigos—
—Mi hermana mayor se caso con un amigo y vivieron muy felices, tu y él en un futuro pueden... —
—No lo creo..., gracias por la comida — dijo antes de salir de la casa.
Cuando caminaba de regreso pensó en las palabras que la abuela le había dicho, antes ya había descubierto que ella estaba enamorada de Sasuke y que eso la  había llevado a buscarlo siendo hombre por muchos años. Pero y que sentía Sasuke, era lo que la atormentaba...

—Iré a pescar— le dijo una tarde a Sasuke
—Puedo acompañarte—contestó poniéndose de pie.
Caminaron varios kilómetros a una parte del río donde el agua estaba más limpia.
Tenían un rato esperando pescar algo pero nada pasaba Naru vio que Sasuke se había quedado dormido.

—Sasuke!—los gritos de rubia lo habían despertado. La vio jalando su caña, parecía que pofin había pescado algo.
—Si ya despertaste puedes venir a ayudarme— grito nuevamente.
El chico reaccionó al verla a la orilla del río a punto de caer. Pudo rescatar el pez pero ella había caído.

Había caído de rodillas, pero se sentó al ver a Sasuke con el pez en su brazo.
—Pudiste haber llegado antes!— protesto lanzando agua con su mano hacia el chico.
El volvió a sonreír al verla hacer una rabieta.
—Lo siento—
Ella se acostó en el agua, el frío la hacía sentir bien.
Sasuke había regresado a su lado después de dejar el pez y le tendió su mano para ayudarla a ponerse de pie.
Ella observó su mano un par de minutos antes de aceptar la ayuda.
Cuando sus manos se tocaron sintieron una extraña sensación.
Una vez de pie soltó su mano pero no calculo que tan pesada estaría su ropa mojada y estuvo apunto de volver a caer.

Sasuke la observaba, esa sensación al tomarle la mano sabía que era por sentimientos que estaba surgiendo hacía ella.
Soltó su mano pero la vio a punto de volver a caer y sin pensarlo la sujeto por la cintura.
La vio sonrojarse y desviar su mirada, sonrío y ella se dio cuenta —De qué te ríes Teme?— la escucho preguntarle y la vio morderse el labio.
Eso provocó que el quisiera besarla y sin pensarlo mucho lo hizo.

Cuando pudo reaccionar Sasuke ya la tenía acorralada entre un árbol y él. Apenas habían dejado de besarse para tomar un poco de aire.
—Quieres que pare?— le preguntó, ella negó con un ligero movimiento de cabeza —Bien, porque no quería hacerlo—
Siguieron besándose, la ropa fue desapareciendo de ambos.
—Quieres que continue?— preguntó él, ya estaba acomodado entre sus piernas y listo para penetrarla.
Ella lo beso como respuesta y ambos gimieron cuando él la penetro.
Los movimientos fueron tamando fuerza y rapidez.
Escucharla gemir en su oído no hacía más que hacerlo ir más rápido, ambos llegaron al clímax gritando el nombre del otro.
Se recostó sobre su capa y la tenía sobre él, jalo su camisa y la coloco  sobre ella.

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