Eran las 9:08 a.m. y el teléfono de casa no dejaba de sonar.
- ¿Sí, dígame?
- Hola Dona, soy Lindsay, quería saber la hora de la ceremonia de Alex.
- Hola cariño, pues será sobre las 10:00 a.m. en el cementerio del norte. Alex quería que fuera al aire libre. - decía Dona mientras sonreía con tristeza.
- Sí - reía Lindsay - Así será más bonito.Dona era la madre de Alex, se le notaba en la voz que lo estaba pasando mal.
Ella lo cuidaba sola desde que Alex tenía 4 años, su padre tuvo un accidente de coche y falleció. Alex tenía una hermana mayor, que se llamaba Jessica, pero ella estudiaba en la universidad de New York y aparecía poco por casa.
Después de enterarse de la muerte de su hermano vino para ir al funeral y estar un tiempo con su madre. Necesitaba estar con ella y apoyarse en alguien. Era su hermano pequeño. Su único hermano. Ella también lo estaba pasando bastante mal.Mientras, Sally, la compañera de clase de Biología de Alex, se vestía para asistir a su funeral.
- Cielo, ¿dónde vas vestida de negro y esos ojos hinchados?
- Voy al funeral de Alex mamá, era mi compañero de Biología y nos llevábamos muy bien
- Lo siento Sally, llámame después para recogerteSally era una chica de estatura media. Era un poco tímida, pero muy inteligente. Tenía bastantes dudas con su orientación sexual. Nunca había probado con un chico, pero tampoco con una chica.
La hacía dudar esa atracción física que sentía por Lindsay cuando la veía.
Tenía el pelo naranja. Natural. También tenía bastantes pecas en la cara y los ojos verdes. Como el césped del instituto cuando era invierno.Salió de casa y cogió el coche con el que se dirigió al cementerio del norte.
Cuando llegó se encendió un cigarrillo y se apoyó en el primer árbol que encontró.
Le daba apuro acercarse a esa reunión donde había tanta gente que no conocía, pero sí a Alex.Chelsea estaba allí con Brittany y Brian, apoyados en el capó del coche esperando a Lindsay.
- Esa chica de allí, ¿no es Sally?
- Sí, menuda friki - dijo Brian riéndoseChelsea ignoró el comentario de Brian y se acercó a Sally.
- ¡Hey Sally! ¿Estás bien?
- Hola Chelsea - dijo apartándose las lágrimas de la cara - Era una de las pocas personas que me conocía y me permitió entrar en su vida. Nunca he tenido una persona que se preocupara por mí que no fuera parte de mi familia, todos me repudian por "friki".
- Lo siento Sally, Alex era un buen tío, yo también lo echo de menos.Chelsea se dio la vuelta para volver con sus amigos, pero no podía dejar así a Sally.
- ¡Sally! Luego vamos a casa de Brian a beber y a olvidar un poco, pásate ¿vale?
Volvió con los chicos y se sentaron en la primera fila. Una vez sentados Brian miró el móvil. Eran las 10:05 a.m.
- Eh, ¿dónde está Nick? - preguntó Brian.
- No sé, le he dejado un mensaje y no me ha contestado - respondió Chelsea.Chelsea observó el móvil pensativa. Nick no le había contestado todavía, y era el funeral de su mejor amigo. Estaba preocupada.
Al poco tiempo llegó Lindsay, y el párroco dio comienzo a la ceremonia. Todos lloraban la pena de Alex y le daban el pésame tanto a la madre como a la hermana.
En medio de la ceremonia, Lindsay se levantó, interrumpiendo al sacerdote.
- Padre - dijo con las lágrimas en las mejillas. - Me gustaría decir unas palabras.
- Claro hija, acércate.Lindsay se acercó mientras se quitaba las lágrimas con las manos.
Miró a la madre de Alex, vio que estaba destrozada. No paraba de llorar.- Alex - comenzó - Era una persona maravillosa. Era mi mejor amigo. - hacía pausas para aguantar las lágrimas - Siempre me apoyó y me ayudó en lo que pudo. Muchos lo repudiaban por su orientación sexual. A veces, incluso se sentía atacado o incómodo. A veces las personas somos monstruos, y no dejamos ser feliz al de al lado. - volvía a limpiarse las lágrimas - Aunque a Alex esa mierda no le importaba. - suspiraba. - Llevo desde anoche dándole vueltas al tema. Creo que esto no es todo. Alex no tuvo un accidente, hay algo que no nos han contado. Que nadie sabe. Ni siquiera yo. - la gente se quedó paralizada mirándola, la madre se levantó de la silla alterada - Señora Jean, te prometo que si supiera algo que tú no, hubieses sido la primera persona en enterarse. Este pueblo se ha llenado hasta las cejas de mierda - empezó a gritar Lindsay mientras caían las gotas de sus ojos - ¡Están jugando con nosotros y nadie nos dice nada! - sacó una botella de ginebra que llevaba en la gabardina negra y le metió un trago - Al que me mandó el puto mensaje anoche que no me dejó dormir sólo quiero decirle algo. ¡Que te jodan! ¡Que te jodan! - bebió otro trago de ginebra, la gente la miraba paralizada. Hizo gestos burlones hacia todos.
- Señorita Hellsworth, relájese por dios. - decía el cura mientras le atendía su mano. - Estás pasándolo mal, y es normal que tu mente crea cosas que no has visto. Estás en estado de shock Lindsay, por favor, toma asiento. - aclaró amablemente.Lindsay lo miró pensativa, cabreada. Se limpió los labios del sabor a ginebra.
- Padre, ¿me está diciendo que estoy mintiendo? - preguntó muy alterada - ¡No tengo ningunas alucinaciones! ¡No estoy loca! ¡Que te jodan, padre!
Lanzó la botella al árbol más próximo reventándola. Y se puso a gritar como loca. Las chicas se levantaron, Brian fue a por ella.
- Linds, ven - le dijo con calma - Tranquila, volvamos a casa y hablemos de esto.
Lindsay se echó a los brazos de Brian llorando y la llevó al coche.
Llegaron a los aparcamientos y Brian metió a Lindsay en el coche.- ¿Se sabe algo de Nick? - volvió a preguntar Brian.
- No, nada. Lo volveré a llamar más tarde - respondió Chelsea.Brittany, con la mirada perdida y un poco aturdida, se encendió un cigarro de marihuana.
- ¿Fumas? - preguntó Brittany a Sally.
- Sí, dame.Seguidamente, cogieron los coches y se dirigieron a casa de Brian.
Era una casa bastante grande, con piscina y luces de neón, sus padres estaban de viaje, así que podía permitirse una fiesta con sus amigos sin que nadie los molestara. Tampoco tenía vecinos, era una gran casa en el lateral de una de las montañas del pueblo.11:24 p.m.
Todos estaban en la piscina bebiendo y algo colocados. Lindsay estaba sentada en el porche fumándose un cigarro de maria y mirando las estrellas. Estaba más relajada, se había tirado toda la tarde y la noche sola. Necesitaba pensar.
Sally la vio desde el salón. No le gustaba verla así, se acercó sigilosamente, y le habló en voz baja y calmada.- Eh, Linds, ¿estás bien?
- Hola Sally - decía mientras suspiraba - estaba pensando.
- ¿Qué piensas?
Lindsay le pasó el cigarro a Sally.
- ¿Puedo confiar en ti?
- Sí, claro, no me sirve de nada tenerte como enemiga.Lindsay se rió y eso hizo poner roja a Sally.
- Anoche me llegó un mensaje de un desconocido un poco extraño. - continuaba Lindsay.
- ¿Qué decía?
Le vuelve a pasar el cigarro a Lindsay.
- Que todavía no se ha contado toda la verdad.
- ¿Crees que se refería al accidente de Alex?
- Estoy segura que sí, hay algo que no nos han contado. ¿Tú me crees, no?Sally acercó la mano al muslo de Lindsay y la apoyó.
- Claro que te creo. - decía mientras sonreía - Y voy a ayudarte a saber qué pasa.
11:57 a.m.
Después de la octava copa, Chelsea fue al baño a vomitar. También se fumo cuatro cigarros de maria y había probado otras sustancias en las copas, como el M.
Se miró en el espejo y vio que no tenía la cara demasiado bien. Intentó peinarse un poco. Se lavó la cara para quitarse el maquillaje. Se sentó en el váter y volvió a mirar el móvil. Nick seguía sin dar señales de vida. Así que decidió llamarle y saltó el contestador.
- Nick, ¿dónde mierda estás? Llevas todo el día desaparecido, llámame cuando escuches el mensaje por favor. Tenemos que hablar.A los pocos minutos le llegó un mensaje a Chelsea de un desconocido, que decía, "si queréis seguir con vida devolved lo que encontrasteis".
Volvió a llamar a Nick, y saltó de nuevo el contestador.- Nick, espero que este mensaje sea una broma tuya. - suspiraba cabreada - Ven a casa de Brian, estamos aquí.
Salió del baño, cuando le llegó otro mensaje: "No te atrevas a comentarle a nadie lo del mensaje. Nick está conmigo, si te portas mal no lo volverás a ver. Haz tu trabajo zorra." Se quedó paralizada frente a la piscina. El móvil se le cayó de las manos. Su mirada se perdió mientras sus ojos se mojaban y el alcohol se movía por su cuerpo.
- ¿Chels? ¿Te encuentras bien? - preguntó Brittany asustada - Estás pálida - se llevó las manos a la boca.Chelsea empezó a avanzar, haciendo zig zag. Parecía un pato mareado. No controlaba sus ojos.
- ¡Chels! ¡No te muevas! Voy q por ti - dijo Brian gritando y bastante asustado.
Brian salió de la piscina y segundos antes de que pudiera alcanzarla, Chelsea cayó al suelo redondo mientras convulsionaba.
- ¡Llama a la ambulancia! - gritó Brittany mientras cerraba los ojos y le caían las lágrimas sin parar.

ESTÁS LEYENDO
Alex Jean: Falso Suicidio
Teen FictionAlex era un chico de 17 años que vivía en Carolina del Norte. Su meta era ser famoso mundialmente, algo que le costaría la vida. Planea un "suicidio" que hace que todo empeore y la historia del pueblo cambie por completo. Su muerte lo lleva a la loc...