En medio de besos y jadeos jeff aparecía fugazmente,con su mirada dura y sobretodo con aquella locura que simplemente lo caracteriza,me aferro a la espalda del sujeto que está sobre mí intentando alejar aquellos pensamientos tan enfermos,intentando borrar cada rastro de él y su psicopatía.
Al borde de las emociones,el placer me invade y mi cuerpo se tensa en respuesta,la sensación tan liberadora me hace dejar salir un suspiro largo,me quedó tendida con los ojos en el techo y con el sueño lentamente abordándome.
Unos brazos me rodean y me acurruco buscando protección,buscando la compañía que ya no tengo mas,los momentos mas oscuros salen a relucir,cada sufrimiento por causa de jeff me consume,cada tortura,cada sentimiento de miedo,de angustia,de odio,de dolor,todo se arremolina con intensidad dentro de mi que aún con expresión sería una lágrima escapa en silencio y resbale sobre mi mentón para caer al colchón.
Después de aquel intento de asalto me di cuenta que todo este tiempo metida en tantos líos servía de algo y que definitivamente mi vida no podría ser normal,que oficialmente no obtendría ningún trabajo por qué nadie contrataría a una criminal y que mi única opción era sobrevivir.
Una miserable caza recompensas,que vive de trabajos sucios y es que eso era lo que había y era más de lo que podría obtener.
-¿Has soñado con viajar por todo el mundo? -Ernesto.Aun seguía aquí bebiendo de mi café barato y charlando.
Me quedo pensativa,imaginándome en distintos lugares del mundo fuera de este lío y luego no parece tan mala idea como suena,una verdadera vida nueva,podría incluso cambiar mi identidad.
-Claro.-Tomo una galleta del empaque partiéndola a la mitad para meter un trozo en mi boca y seguir imaginándome en otro lugar que no fuera este.
-Podríamos hacerlo juntos.-asevera con cautela y sin despreocupación alguna,suelto una risa por qué suena absurdo,por que acabamos de tener sexo y nunca lo había visto en mi vida.
-No te conozco.-Suelto en un leve susurro que no suene tan duro como lo pretendo.
-¡Por favor!-Suelta dramatizando.-Acabamos de tener sexo,acabo de verte desnuda y tú a mi.
-No signi...
-¿Que quieres saber de mi?-Me interrumpe y yo simplemente hablo y cierro la boca sin saber exactamente qué es lo que quiero preguntar,qué es lo que quiero saber de él y más aún si quiero saberlo.
Si quiero conocerlo,por qué es una decisión muy difícil por que todo lo que me rodea muere o sale lastimado que aunque jeff ya no se encuentre aquí,el miedo sigue,niego mirando la barra y tamboreo con mis dedos.
-No me interesa conocerte.-Levanto la mirada solo para encontrarlo mirarme con un destello de dolor,un horrible golpe en el ego.-Luces como alguien increíblemente interesante con muchas cosas buenas pero yo...-Niego un par de veces convenciéndome de que hago lo correcto.-...en realidad no quieres conocerme y es mejor así.-Se queda en silencio mirándome sombrío.
-¿Eres tan hija de puta?-Escupe molesto,doy un suspiro largo por que se que esto no saldrá bien,por qué nunca sale bien.-¿Me traes aquí,te acuesta conmigo y me botas?
Pasó una mano por las hebras de mi cabello y lo miro directamente con recelo.-Yo no te obligue a nada.
-¡Una mierda!-Se pone de pie y toma su chaqueta.
-Pareces una chica Ernesto.
Me ignora y comienza a ponerse la chaqueta con rapidez,aprieto los puños intentando calmar mis humos y camino hacia la entrada solo para pasarle el seguro,para impedirle la salida.
