SE APAGA UNA ESTRELLA V.III "Mi camino hacia ti".

Capítulo I "Después de la muerte".

Ha pasado algún tiempo desde aquel terrible día talvez días, meses o años ya no soy consciente del día en el que vivo ¿Les pasara a los demás también?, o es solo que yo me niego a aceptar una vida sin ti.
Aun lo recuerdo aquel momento como si hubiera sido hace apenas unas horas, mi cuerpo tiembla con la misma sensación de aquel día.
Vuelvo a sentir esa frustración dentro de mí por no poder haber hecho nada al respecto, y es que no lo hice…
Ya he vivido esto antes… el dolor que sentí con la perdida de mi hija
hoy crece más con tu partida, yo hubiera preferido que terminaran con migo también en aquella ocasión y estar ahora con ustedes… con ustedes.
¡No se merecían esto!- Serena enterró sus uñas poco a poco en su
mano y una delgada línea de sangre fluyo de su muñeca- Mi estúpida
vida no valía su sacrificio, esta vida que sin ustedes no tiene sentido.
Una vez me preguntaron cuál era mi sueño en esta vida y recuerdo
exactamente las palabras que mencione…

“Yo tengo mi gran sueño dorado, sueño con encontrar un muchacho
maravilloso que sea capaz de hacer todo por mi sin importar que,
cuando ni donde”

Lo encontré… lo encontré y lo deje ir. ¿Realmente soy merecedora de
tanto amor? Diste tu vida por mí, te sacrificaste por mí en más de una
ocasión mientras yo solamente era egoísta, nunca supe reconocer mis
sentimientos por ti y cuando lo hice ya era muy tarde… ya es muy tarde.
Ahora mírame llorándote cada noche, volviendo a vivir tu muerte… tu
entrega de amor hacia mí, día a día como si fuera una película de terror
así como aquella en la que alguna vez fuiste participe ¿Recuerdas?.
No es fácil continuar después de ti… No es fácil vivir en mundo donde
no estás tú, ser la espectadora de una vida que abandonaste por mí.
Aun te siento aquí, percibo tu olor de la nada, escucho tus pasos a mi
alrededor, tu voz melodiosa aun en mi mente cantándome al oído
aquella dulce canción de amor, acaricias mi cuerpo antes de dormir
pero… Lloro al ver que nada de eso ocurre, imploro a quien sea que
escuche mis suplicas que regreses conmigo de cualquier modo. Salgo
a distraer mi mente por las calles de aquel parque de diversiones, en
que un día sin saber fui tan feliz o probablemente ahí fue cuando lo supe pero mi miedo bloqueo todo sentimiento que pudiera estar generándose en mi corazón. Observo a las palomas volar felices y a las parejas hundiéndose en su amor y de pronto te veo sonriente en alguna esquina cruzado de brazos con aquella enorme sonrisa fanfarrona que tanto te caracterizaba, luego regreso y veo que tu cuerpo esta inerte en aquel lugar donde te han colocado… Las lágrimas corren por mi mejilla como río buscando su caudal, creo que me estoy volviendo loca pero sé que no te has ido, que no me has dejado abandonada en medio de todo este caos. Sé que estas aquí conmigo incluso en estos momentos cuando
mi cuerpo se encuentra sedado tras la preocupación de mis seres
queridos, sé que estas a mi lado acariciando mi cabello, dedicándome aquella mirada celestial que solo en tus ojos puedo encontrar.