Capítulo 4: Caídos, monjas y masacres

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Ya ha pasado el año que teníamos antes de que los eventos de la historia comenzasen, aún no han comenzado, pero empiezan esta mañana, por lo que tendremos que ponernos serios a partir de ahora.

Mad logró aprender la magia de Hielo, además de mejorar un poco su magia de fuego, la cual, al combinarla con las explosiones de su Sacred Gear, éstas aumentaban bastante su potencia, por lo que Mad se volvía extremadamente poderoso en el combate a larga distancia.

Issei aumentó aún más su tiempo en Balance  Breaker, podía estar incluso horas, y con horas me refiero a unas 12 horas fácilmente, gracias a entrenar en las salas gemelas casi todos los fines de semana.

Irina había mejorado bastante con Mimic, y le enseñamos a utilizar distintas armas para que tiviese varias opciones a la hora de enfrentarse a otras armas. Mad y yo le enseñamos a manejar guadañas, ya que a Mad le gustan y yo, tengo una, y es de mis armas favoritas, por lo que sería ilogico si no supiese utilizarla. También le enseñé los principios básicos del tiro con arco, pero las flehas se las doy yo con mi magia de luz.

Y en cuanto a mí, reducí los tiempos del Kamui, entrené control de chakra, gracias a lo cual puedo utilizar mejor mis técnicas y aprendí a utilizar el Amaterasu.

Tiamat también ha entrenado con nosotros, y ha logrado acercarse un poco al nivel de Dragón Celestial, aunque apenas acaba de pasar del nivel de Reina Dragona.

Actualmente nos dirigimos hacia la academia de Khuo, a la cual por cierto Tiamat ha empezado a asistir poco después de que Mad entrase.

Las clases transcurrieron con normalidad, y ya en el recreo fuimos hasta un árbol a descansar. Issei se recuesta contra él, Mad sólo saca su móvil y se pone a leer en él, apollando la espalda en el tronco del árbol y con las piernas cruzadas. Irina se sienta al lado de Issei, yo solo medito un poco para mejorar mi control de chackra, ya que últimamente se ha estado sintiendo un poco raro, señal de que el Rinnegan aparecerá pronto, y Tiamat no hace nada. De pronto, nos sentimos observados, volteo a ver y me encuentro con Rias mirándonos, por lo que hago una seña y el resto se voltea a mirarla.

-Issei: Hola, Rias Gremory- esto lo dijo en poco más que un susurro, lo suficiente para que sólo nosotros lo oyésemos.

Rias volteó y se fue, supongo que a decirle a Koneko que nos vigile.

-Yo: Issei, te recuerdo que hoy conocerás a la caída que te mata en la otra línea temporal

-Mad: Jejeje, Issei, asegurate de "caerle" bien.

-Issei: Je, esa es buena

-Irina: Si, pero no te olvides de mi.

-Issei: Nunca

-Yo: Parad ya, par de tortolos- Ante mi comentario, ellos se sonrojan

En eso toca el timbre y volvemos a nuestras respectivas clases, en donde las clases transcurrieron normalmente, es decir, eternizándose de lo aburridas que son.

Más tarde, cuando salimos, le dije a Issei que pasase por el puente solo, suprimiendo además su aura porque de otra forma la caído no se mostraría. Nosotros nos escondimos y vimos a Issei pasar por el puente, cuando una pelinegra se acercó, se le declaró y le invitó a una cita el domingo, la cual Issei aceptó.

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Hoy es domingo, y es el día de la cita, por lo que nos prepararnos para seguirlos en su "cita".

Issei  fue hasta el parque donde había quedado con Raynere, y nosotros sólo nos escondimos: Yo entre unos arbustos, Mad en un árbol e Irina en otro árbol.

Reencarnación en Highschool DxDDonde viven las historias. Descúbrelo ahora