Fue un Mal Entendido.

7.Cita - Conclusión.

En pleno centro de la ciudad se podía observar a nuestro amigo Alex correr desesperadamente para llegar a su cita.

Alex: Maldita sea! Debo darme prisa! Con permiso! A un lado por favor! Ups, lo siento señora!

Corrió y corrió hasta llegar al café y se llevó una sorpresa cuando vio a Diana parada en la puerta.

Alex: Dianaa!!
Diana: Alex! Que bueno que llegaste.
Alex: Lo... Lo siento... Diana... Tuve... Algunos percances... Uff... Corrí demasiado.
Diana: ¿Estás bien? Debes recuperar el aire.
Alex: Estoy bien... Fuuuu... Lamento haberte hecho esperar tanto.
Diana: Descuida, sabía que vendrías... Por eso decidí esperarte en la puerta.
Alex: Gracias por esperar, ¿entramos?
Diana: ¿Qué te parece si damos un paseo? Es un día muy bonito como para estar encerrados en un café.
Alex: Lo que usted desee señorita, hoy voy a estar a su disposición para compensar mi tardanza.
Diana: Okey entonces déme su brazo señor escolta y comencemos a caminar.

Y así, ambos jóvenes caminaron del brazo todo el día, visitando varios lugares como la plaza, una juguetería, un shopping, la costa del río... Los dos se veían muy felices, acompañados sólo de la presencia del otro, conociéndose mutuamente, riendo y disfrutando del atardecer...

Diana: Bueno, aquí es donde vivo, muchas gracias por la bella tarde Alex Willer. Hacía mucho tiempo que no me divertía tanto con un chico.
Alex: Gracias a ti Diana Valentine por acceder a mi propuesta. Para mi también fue un hermoso día.
Diana: Si... Supongo que nos veremos luego en la Universidad.
Alex: Si... Entonces... Adiós.
Diana: Sí... Adiós.

Y poco a poco acercaron sus rostros y, con un bello atardecer frente a ellos, cerraron su primera cita con un dulce y tierno beso.

¿Cómo continuarán sus vidas después de hoy? Entérense en el próximo capítulo 😉