Conquistando a mi Luna [TERMINADA]

XXI

Estaba en el baño y las manos me temblaban, habían pasado cinco meses desde mi boda y aquí estaba yo en el baño encerrada haciéndo un test de embarazo.

Esperé a que el tiempo pasara y la vi nerviosa.

Positivo.

Lágrimas calleron por mis mejilla.

Estoy embarazada.

Ahora la cosa es... ¿Como carajos se lo digo a Caleb? Sé que el se pondrá feliz, pero quiero decirselo de una manera especial.

Hoy Caleb llegaría de una reunión de Alfas, y cuando el regresa de ese tipos de eventos yo le suelo recibir con la cena.

Pero esta será una cena muy especial.

Tomo la prueba y la pongo en una cajita bonita que casualmente está ahí, tomo un listón que quedó de Navidad y se lo coloqué.

Quedó bastante bien debo decir.

Fuí hacia el comedor y puse la mesa colocando velas rojas con olor a canela.

Puse manos a la obra y empecé a preparar su cena preferida.

Sin darme cuenta Caleb ya estaba entrando.

Dejé la cena lista y fuí a recibirlo con múltiples besos.

Lo llevé al comedor y le dí la cajita, el con curiosidad y sorpresa al notar todo abrió la cajita poniéndome nerviosa.

El abrió los ojos como platos al darse cuenta y me miró con los ojos criztalisados.

-Amor mío.- dijo sin aliento.-¿Estás...?

Sin dejarle terminar yo asentí con la cabeza dándole una gran sonrisa.

El sonrió ampliamente, me tomó en sus brazos y me alzó dándome vueltas.

Los dos comimos celebrando la noticia.

Al terminar el empezó a llamar al doctor de la manada para hacer cita, así podríamos saber si todo está bien.

Me fuí a dormir y Caleb me pegó más a el con una mano en mi vientre acariciando a nuestro cachorro que se desarrolla ahí.

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Me desperté aprisionada por los brazos de Caleb como a mi me gusta.

-Hola preciosa.- dijo dándome besos.

Nos levantamos de la cama para ir al hospital y saber cuanto tiempo tenía de embarazo, ya que unas semanas atrás ya ya había notado cambios en mi cuerpo, y sabiendo que llevo un Alfa dentro estos suelen ser más grandes, y mi vientre ya está un poco más grande de lo normal.

Entramos al hospital y me empezaron a revisar.

-Muy bien Luna.- dijo una enfermera dándome los resultados.- Tiene un mes de embarazo, y todo está en los niveles correctos.

Caleb me apretó más la mano y ambos nos sonreimos.

Salimos del hospital y decidí hablar.

-¿Como le piensas llamar?- le pregunté mientras el sonrió.

-Eros.- dijo firme.

¿Eros? Que ese no es el Dios de sexo...

-¡Eros!- dije un poco sorprendida, pero solo un poco.

El asintió con la cabeza y me dio una sonrisa traviesa.

Bueno... el nombre me agrada, creo que puedo obviar un poco el significado.

Si es lo que Caleb quiere, a mi no me molestaría regañar a un crio con ese nombre.

Jajajaja, se que te encantará que criemos juntos a nuestro cachorro.

Sonrio ante eso, de hecho me encantaría.

Eros, pienso, me gusta, debo empezar a tejer cosas con ese nombre para él.

Llegamos a casa y me topo con una muy emocionada Olive y Sky.

-¡¿Es cierto?!- pregunta Olive emocionada.

Yo asiento con la cabeza y ella se tira a mis brazos.

-Ya somos dos.- dice chillando de emoción.

Yo frunzo el seño al escuchar la noticoa, ambas estamos embarazadas casi al mismo tiempo.

-¡Ya era hora!- digo riendo.

Ella entiende mi indirecta y se sonroja mienteas Sky sonrie travieso.

Caleb me abraza y acaricia mi vientre tiernamente, Olive y Sky se van a casa que está al lado y nosotros quedamos soloa.

-No puedo esperar a verlo.- dice emociomado.- Desde que te ví quise que fueras la madre de mis cachorros.- dijo acariciando mi mejilla.- Y lo logré.- a los dos se nos cristalizaron los ojos.- Mi semillo llegó hasta tí y dejé un cachorro ahí.

Yo rio por lo bajo sonrojada y le doy un tierno beso.

Ambos estamos felices con la llegada de Eros.