Irás perdiendo la memoria... Tú no recordaras nada.
¿Puedes hacer que te recuerde a ti?
♡; namseok ꒰ knj + jhs꒱
♡; leves menciones de yoonjin y kooktae
♡; no copies- no adaptes
—Muchas gracias por la cena, estuvo deliciosa — Dijo Namjoon fuera de la casa.
—Soy un gran chef, ¿verdad?— Bromeo Seokjin.
—El mejor amor, ahora entren a casa, iré a dejar a Namjoon, volveré pronto.—Yoongi depositando un beso en la mejilla de su novio.
—Adiós Joon hyung, nos veremos pronto.— Sonreía emocionado Jungkook.
Namjoon solo asintió sonriendo y entro al auto.
—Entonces, ¿pensaras en lo que dije, verdad?
—Sí Yoongi, sé que está mal.
—No digo que este mal, pero no es ético que te relaciones de esa forma con tus pacientes.
Namjoon solo suspiro, sabía que su amigo tenía razón y también sabía que no lo podría entender.
• ♡ •
—Gracias por invitarme, y por traerme, dale mis gracias de nuevo a Jin. — Dijo el más alto ya fuera del auto.
—Te veo mañana.— Dijo Yoongi arrancando y sonriendo.
Namjoon se quedó afuera un rato hasta que no vio más el auto de Yoongi, suspiro y se sentó en la pequeña banca de su patio delantero. Era una noche fría pero con el cielo despejado, las estrellas se veían tan cercanas.
Hoseok recupérate pronto para que puedas ver lo hermosas que son las estrellas.
Suspiro entrando a sus casa, él vivía solo así que nadie lo recibía, no le importaba la soledad, nadie lo molestaba y podía concentrase en estudiar y la mayor parte de su tiempo estaba en el hospital.
Su padre era un doctor ya retirado, su madre había dedicado toda su vida a criarlo, ellos habían decidido mudarse al campo, amaban a su hijo.
Se acomodó en su escritorio de nuevo estudiando, analizando lo más posible el caso del pelirrojo, le frustraba no entender algunas cosas simplemente no había visto algo igual antes.
A mitad de la madrugada suspiro, en poco menos de 4 horas tenía que ir a trabajar, arrastro sus pies hasta un sofá cama que estaba en la sala y se arrojó tapándose cubriéndose con su manta de su personaje favorito el osito Ryan, Namjoon rara vez dormía de forma correcta en su cuarto, toco la almohada y en menos de 5 minutos estaba profundamente dormido.
Sálvame...
Hoseok corría por un gran bosque lleno de neblina, su vestimenta era de seda pulcramente blanca.
—Doctor Kim, alcánzame.
La amplia sonrisa del pelirrojo era adictiva de ver, Namjoon podría perderse para siempre en esa hermosa curva entre dos hoyuelos.
—Hoseok no corras tan lejos...
Namjoon corría tras Hoseok que iba riendo y cantando, rumbo a una colina donde se podía ver el inicio de las nubes y la neblina no existía.
—Doctor Kim, tú me salvaras, ¿verdad?
La sonrisa del pelirrojo era hechizante.
—Te salvaré.
—Hoseok será muy feliz si el doctor Kim lo salva, Hoseok está asustado— Susurraba.
Namjoon analizaba al tierno chico de blancas ropas.
—Hasta que tú no estés mejor yo no voy a rendirme.
Hoseok vio al doctor, sintió sus ojos con pequeñas lágrimas y lo abrazo por el cuello dejando escapar sus lágrimas.
Namjoon se separó un poco tomando el rostro del chico limpiando las lágrimas de este.
—Yo estoy aquí, tranquilo.
Pego su frente a la de él, ambos sonreían, no podían dejar de mirarse, el pelirrojo se acercó levemente besando la mejilla del más alto lentamente, era tan cálido, Hoseok tomó su rostro, estaba por tocar sus labios...
La alarma comenzó a sonar, marcaban las 7:00 a.m.
Namjoon despertó en shock, ¿todo fue un sueño? Quería llorar y aventar lejos ese pequeño reloj molesto, tapo su cara con la almohada y ahogo un grito de frustración.
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