Nos vemos fuertes, pero somos débiles. Mostramos una cara alegre y optimista a las personas para protegerlas del sufrimiento de ver las cosas tal cual son porque sabemos lo que se siente.
Nos han clavado cuchillos de frente, de espaldas o lateralmente. Moralmente somos destruidos, pero escondemos las heridas solo para no mostrar nuestra debilidad y no recibir las condolencias o pesar de los demás, no lo necesitamos, nunca lo hemos necesitado.
Escondemos nuestras dolencias con el fin de protegernos y proteger a quienes amamos de todo aquello que pueda lastimarlos.
Todo este dolor lo guardamos para nosotros mismos sin saber que puede causarnos muchísimo más daño del ya ha causado si no lo soltamos y lo dejamos ir.
Hemos sido fuertes toda la vida, pero todo cambia en una segundo. Un día llega una persona, situación, duda u objeto que nos hace dudar sobre todo aquello por lo que hemos sido fuertes, entonces nos redescubrimos, para ser aún más fuertes que antes.
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Ocurrencias de un adolescente
RandomDescubre todos los sentimientos que podemos llegar a sentir en nuestra vida. Observa todo el panorama de caos, destrucción, amor, sensualidad, diversión y todas aquellas emociones que nos hacen sentir vivos. Sientete libre de expresar que sientes a...
