- ¿Como que la has cagado a que te refieres? ¡No me jodas Jess! - Le da un golpe al volante.
Yo solo me empiezo a descojonar de la risa, se lo ha tomado muy a pecho, de verdad le gusta esta chica.
-Lo siento, lo sie... - Me sigo riendo, Aiden solo enciende el motor y conduce soltando barbaridades por todo el coche.
-No tiene gracias-Me dice
-Tú sabes que conmigo no sale nada mal-Le digo y en su rostro aparece una sonrisa burlona.
- ¿A no? ¿Y esa vez en la piscina de los abuelos qué? -Me contesta divirtiéndose al ver mi expresión.
-Cállate capullo- Le doy un manotazo en la pierna.
-En poco tiempo te vendrá la chica rubia esa y te preguntará por mí, dile que soy una amiga, que no soy nada importante ¿Vale?
-Vale, pero una cosa, ¿Si la invito a casa algún día y tu estas que pasa? -Me pregunta Aiden
-Fácil, tienes que llevarla solo cuando seáis ya pareja, o si no, me lo dices y así yo no estoy en casa cuando estéis vosotros. Y eso si pasa, no te emociones hermano. -Le sonrió- Llévame a casa, que es tarde.
No me contesta, enciende el motor y nos vamos en silencio. Con la música puesta. Me pregunto si yo algún día yo tendré lo mismo que tiene mi hermano, esa ilusión por alguien. Siempre he conseguido lo que quería como Justin, por ejemplo. Nunca tuve que luchar por él, porque yo ya sabía que el vendría a por mí, así que ¿Para qué querer algo que ya sabre que tendré? Nadie nunca me ha rechazado, en el sentido de los chicos. Mi virginidad la perdí con mi primer novio. Lo quise, de verdad que lo quise, pero no era un amor excitante. Solo era un amor sencillo que a mí me servía. No os puedo decir que mi primer novio me rompió porque no lo hizo. Al final acabamos rompiendo por decision mutua. Y entonces conocí a Justin, el chico que rompía todos los estereotipos. El chico malo que rompía todo lo que tenía a su alcance y supongo que a mí me llevo con él.
Conocí a Justin justo poco después de que mi padre se suicidara y que mi novio y yo lo dejásemos. Él me enseño el mundo del alcohol y las drogas, él era mi salvación. Tiempo más tarde nos empezamos a acostar sin ningún tipo de relación, yo por aquel entonces supuse automáticamente que estábamos en una relación, hasta que lo vi al cabo de unos días con otra y así a la semana que siguiente. Me acosté con otro solo para ver qué diría Justin, pero él ni se inmuto. Le dio igual. Y fue entonces cuando ya me acabé de autodestruirme. Sabiendo que no le importaba a nadie, que a la gente le daría igual si estaba muerta o viva. Y me transforme en una zorra, porque al menos de esa forma la gente sí que me echaría de menos. Aunque quizás no me echarían de menos de la buena forma, pero al menos me recordarían como aquella zorra que les jodía la vida, supongo que pensé que era mejor que me recordasen de alguna forma-buena o mala- que no que no me recordasen. Y en este instante ya me da igual.
Lo que si tengo muy claro es que Justin no puede abandonarme, si él se va con otra y queda con otra con una relación todo por lo que he trabajado para llegar hasta donde estoy se ira al garete. Y no puedo dejar que eso pase. Así que granjera prepara las maletas porque ya no vas a estar mucho tiempo en esta escuela.
Llegamos a casa y mi hermano y yo nos separamos. Hacemos ver que no nos lo hemos pasado bien juntos por primera vez en años.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Dia 1 de echar a la granjera.
Entro a la escuela con las Minions por detrás, sonrió a todo aquel que me mira mal. Me acerco hacia Justin y lo beso. El me corresponde. Intento sentir esas mariposas que tanto dicen, pero no las siento. Solo siento lo mismo que llevo sintiendo durante mucho tiempo: la soledad.
-Buenos días- Le digo, me apoyo contra las taquillas y miro a los estudiantes pasar- Que vida más patética que tienen esos pobres chicos y chicas.
Me rio y me doy cuenta de que en verdad estoy celosos de esos estudiantes tan "patéticos", tiene una vida tan fácil es lo que yo quiero, infortunadamente no lo tendré nunca.
Llegan los demás del grupo y se chocan los puños con Justin.
-Tío, estas raro, ¿Qué te pasa? -Le pregunta Theo a Justin. Todas las miradas recaen sobre él. Justin le quita importancia, pero sé que algo le pasa. Veo que está mirando algo con la mirada y justo cuando ve a alguien entrar se le alumbran los ojos. Nunca he entendido a que se refiere la gente por eso de que a la gente se le alumbran los ojos al ver a algo que le gusta. Pero ahora sí que lo veo y no me está gustando nada.
-Adiós- Es lo último que dice Justin antes de irse detrás de la puta granjera. Ella lo esquiva y se va corriendo.
Nadie del grupo se da cuenta de lo que acaba de pasar. Vuelvo a fijar la atención a mis amigos y veo que Theo me está observando. Le sonrió, pero el sigue penetrándome con la mirada.
Suena el timbre y todos nos vamos a nuestra respectiva aula. Antes de entrar alguien me coge por atrás. Me empujan contra la pared. Cierro los ojos y al abrirlos me encuentro con Theo. Me sigue mirando con esa mirada tan intensa.
- ¿Qué quieres? -Le susurro, no sé porque lo hago. Pero está demasiado cerca y me está poniendo nerviosa.
- ¿Porque él? -Me pregunta esta vez Theo, da un golpe a la pared, haciendo que pegue un salto-Solo te figas en él, no lo entiendo. Nunca te va a querer, y lo sabes. Prefieres vivir en la ignorancia ¿Verdad?
- ¿Que dices? Theo, suéltame-Le intento decir, pero él no me suelta. Se me acerca peligrosamente hacia mi cuerpo. Esta tan cerca que noto su respiración, los latidos del corazón se me aceleran cuando pone un brazo a la derecha mi cabeza y el otro al lado contrario. Se me acercar aún más y puedo llegar a ver todas sus pequeñas pecas incluso podría contarlas.
-Odio que solo tengas ojos para él-Susurra por encima de mis labios. Paro de respirar por unos segundos. Me está costando demasiado. Theo también está respirando lentamente. Ya no lo asunto más. Lo cojo de la camisa y estampo mis labios contra los suyos de forma agresiva. Noto una sensación rara en el vientre. El estúpido al que estoy besando sonríe y aprofundiza el beso. Me mete la lengua y exploto, nunca había sentido nada de esto con nadie más y no me está gustando nada no tener el control. Le muerdo el labio y gruñe. Lo cojo de los hombros y empiezo caminar con el hacia los baños.
De repente me frena y me mira directamente a los ojos. Odio cuando hace eso, es como si estuviera esperando algo mejor de mí.
-No, no voy a ser un polvo que tienes de vez en cuando, no voy a ser un Justin.
Me cruzo de brazos y lo miro. Me muerdo el labio y le sonrió.
-No, Jess. Voy a ser el hombre que rompa tus muros. Esos muros que has construido tan altos que todo el mundo se cree la falsa Jess que les demuestras. Veo en tus ojos la tristeza que cargas cada día.
-No me conoces-Le contesto con frialdad-Ni me vas a conocer, porque no hay más que conocer más de mí.
-Ahí te equivocas. Quizás no te has dado cuenta, pero te llevo observando durante bastante tiempo. Veo cómo te decepcionaste esta mañana al besar a Justin y no sentir lo que acabas de sentir conmigo. Aparte te conozco de antes, cuando eras la Jess simpática,también me he dado cuenta de que estas celosas de todos los otros estudiantes, por eso los insultas, para sentirte mejor. No sé porque quieres ser como ellos, pero lo voy a descubrir. Y también he descubierto que tienes una vida privada que no explicas a nadie, ni siquiera cuando yo me abrí a ti, tienes miedo a la soledad, pero también tienes miedo a que te quieran.
-Tu no vas a descubrir nada-doy un paso hacia él-Porque si lo haces te destruiré
Me vuelvo a acercar hacia él, y me paso la lengua por los labios. Theo enfoca sus ojos en mis labios. Antes de que pueda volver a besarme me aparto. Lo empujo contra la pared, su cara esta ligeramente aplastada contra las baldosas del baño y me sonríe.
-No te acerques a mi- Le susurro en la oreja- Todo lo que toco acaba destruido.