Give Yourself a Try

5 Peter

Cuando Peter fue a la escuela el lunes, estaba rebosante de emoción. No había tenido noticias de Ned en toda la semana. Las únicas personas que sabían sobre la beca eran May y Tony. Peter le había explicado a su tía todo sobre la visita de Tony. Que incómodo había sido al principio. La situación del pijama. Como no podía creer que realmente Tony Stark estuviera en la misma habitación con él. Peter seguía sintiendo que todo era un sueño. Esa parte era la razón del porque no le había dicho nada a Ned hasta que Stark Industries le envió su carta de aceptación por correo. Aparentemente, el MIT también le enviaría una. Todo eso era demasiado.

Peter quería decirle a todos y demostrar que era capaz, pero sabía que no tenía que probarle nada a nadie. Sin mencionar que decirlo en voz alta le quitaría la magia. Se sentía como un secreto especial que compartía con Tony, y la única prueba que Peter tenía era la lata de Coca-Cola con la pajita de metal reutilizable. Además, estaba bastante seguro de que Tony se llevó su página de garabatos. No sabía porque, pero no era nadie para juzgar. Después de todo, todavía no había lavado la pajita que uso Tony, y la había estado usando para todas sus bebidas. Tenía 17 y se le permitía ser espeluznante. Estaba seguro de que Tony tenía una buena razón para llevarse esa hoja.

"¡Parker!" Flash sonrió cuando Peter llegó a la biblioteca. Era un lunes a las 3 de la tarde. Práctica del Decatlón. "¿Un sinónimo de ocho letras de Peter?"

Peter echo un vistazo a Ned.

"¡Perdedor!" Flash soltó una risita, haciendo sonar la campana.

"Bien," murmuró Peter rodando los ojos. Sin sentirse enojado. Tenía la beca Stark. Tony Stark lo escogió. No era un perdedor.

"¿Cuál es el nombre de la compañía que nunca le dará a Peter un centavo, incluso si viviera en las calles frente a su torre?"

"Flash," advirtió Peter. "Para."

"¡Stark Industries!" Vitoreo Flas.

Peter miro a sus compañeros. Todos lo miraban simpáticamente, pero nadie decía nada.

"No te preocupes, Pete," sonrió Michelle. "Estoy segura de que al menos te darán un billete de cinco dólares. Quizás hasta te ahorres un poco de almuerzo. Aunque las tasas de personas sin hogar en la ciudad han subido, es difícil decir si les importaría o si te mezclarían con la multitud."

Peter levanto sus cejas hacia Michelle con incredulidad. Ella era la reina de no ayudar.

Ned se cruzó de brazos, "Ellos no te dieron un centavo. Hammer fue la única compañía que te escogió, y ellos apestan."

Flash hizo una mueca. "Al menos tengo algo. Literalmente todos tienen algo de algún lado. Hasta donde sé, Penis es el único que no ha recibido nada. A menos que fuera tan tonto como para aplicar solo a Stark."

"Flash, es suficiente," corto el señor Harrington. "Dale a Abe la campana. Serás un observador hoy."

"Esto es una mierda", se quejó Peter por lo bajo. Saliendo de la biblioteca. Había intentado no dejar que Flash lo molestara, pero era difícil ignorarlo. Había soportado las burlas durante casi cuatro años. ¿Cuándo el idiota finalmente tendría una pista? Tony solo había oído hablar de él una vez y ya podía decir que era un idiota. ¿Cómo Flash no podía ver que estaba fuera de línea cuando tenía que vivir consigo mismo constantemente?

Ned siguió a Peter fuera de la biblioteca. "¿Estás bien, amigo?"

Peter negó con la cabeza. "Estoy tan harto de esto, Ned".

Ned asintió. "Lo sé. Está bien, sin embargo. No le prestes atención. Solo está celoso porque eres más inteligente que él".

Peter asintió.