VEINTIDÓS.
—F-fui un cobarde.—Su voz fluye con vacilación.—Pensé que si me iba, ya no me dolería, que no valía la pena vivir en el mundo si estaba tan lejos.—Harry se encuentra con los ojos de Lillian, su terapeuta.
—Sé que es malo amar a una chica que alguna vez fue tan joven como tu hija...—Harry se aclara la garganta, sintiendo que su piel pica el calor. Se ajusta a sí mismo.—Sé que es insignificante, pero sentí que ella era la única que realmente me veía, que se preocupaba por mi, y no pude evitarlo.
Los ojos de Harry se movieron distraídamente. Lillian lo ve y en un intento por realinear el foco de la sesión, pregunta—¿Te enamoraste de ella?
Su mirada vuelve hacia ella.—Con todo mi corazón.
Lillian asiente, tomando notas en taquigrafía.—Ya veo, pero ¿crees que tal vez la razón por la que te volviste tan codependiente con ella es porque sentías que no dominabas dentro de ti?—Ella pregunta con curiosidad, mirándolo por su reacción.
Se burla, negando.—No, porque superé mi impedimento del habla, estoy en control, Lillian.
Ella niega con la cabeza.—No, desarrollaste ese impedimento del habla debido a la muerte de tu difunta esposa y descubriendo la verdad de su aventura, te sentiste inferior a las mujeres porque sentías que eras culpable, que no eras lo suficientemente bueno, te llevó a tu miedo a la interacción, contacto físico, deshonor en presencia de otra mujer, has superado todo eso cuando te volviste dependiente de Brisa, que nunca te dejó a pesar de tus miedos y ansiedades.
Harry tiene los ojos bajos.—Hemos trabajado en tus problemas indiscutibles con el fallecimiento de tu esposa, lo que te llevó a estar dispuesto a librarte por completo de tu tartamudeo porque ya no vives en su sombra. Sin embargo, creo que aún sientes que todo el dominio una vez fue tuyo. Antes de la muerte de tu esposa se encuentra de alguna manera dentro de Brisa. No sientes que pueda restaurarse a menos que ella esté aquí contigo.—Lillian concluye. Levanta la vista y se sorprende de que Harry llore silenciosamente por su extenso diagnóstico.
—Oh, Harry, ¿por qué estás llorando?—Sus ojos se suavizan y la voz se llena de emoción.
Él la mira.—Porque probablemente tengas razón, porque Brisa me hizo sentir como el hombre que era antes. Ella me hizo...—Sus ojos esmeralda miraron por la ventana.
—¿Te hizo sentir qué, Harry?—Lillian pregunta con curiosidad.
Él la mira de nuevo.—Vivo, ella me hizo sentir vivo.
Lillian lo mira. Inesperadamente cierra su diario junto con el cariño repentino que viola sus ojos normalmente sin emociones.—Mira, esto tal vez no es profesional, porque normalmente se supone que debo recetarte algunas pastillas o buscar un pasatiempo inútil. Pero, como alguien en quien puedes confiar, como amigo, creo que Brisa es buena para ti.
Harry miró boquiabierto a Lillian, con los ojos muy abiertos.—¿Qué?
—La quieres, Harry. Y como alguien tan increíble como tú, ella debe amarte. Así que... encuéntrala y sé feliz con ella.—Lillian lo explica con una cálida sonrisa.
Harry se burla.—Eso es realmente poco profesional.—Finge seriedad pero no llegó a sus ojos.
Se encoge de hombros mientras se recuesta en su costosa silla de cuero.—Bueno, si eso no funciona, escuché que tejer es un pasatiempo muy divertido.—Ella bromea, viendo a Harry levantarse de su asiento, el sofá.
—Gracias de verdad... Lily.—Él dice y una sonrisa ilumina su rostro.
—Ve por ella, Harry.—Lillian guiña un ojo.
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adoro los finales felices, aveda.
bueno noc si esta historia acabará feliz o triste.
amigos, si quieren pueden decirme una historia que este en ingles y no puedan leerlo yo pueda traducirla, ahre si quieren.♡
