Aparentemente los momentos inesperados estarían siempre presentes en la vida de YoungJae y Jaebum. Como ahora.
Después de una semana de revelar su orientación y además su relación con el menor, los padres de Jaebum no habían dejado de pedirle que lo lleve a cenar. Y es que parecía que incluso ellos se habían enamorado de YoungJae, y como no, si el mayor había dicho sólo maravillas acerca de él.
Así que ahí estaban ambos. Jaebum terminado de cocinar junto a su padre y YoungJae sentado en el sofá hablando con la madre del mayor, aunque esta última era la que más le dirigía la palabra, pues YoungJae estaba demasiado nervioso y, para que mentir, asustado.
Tenía las típicas dudas de una persona primeriza en cuanto a las relaciones: ¿y si no le agrada a los padres de su novio?, ¿y si le pedían alejarse de él por su condición?
—Hey YoungJae, tranquilízate — habló la mujer — veo que estás muy nervioso, pero tranquilo, no tienes porqué — YoungJae se sonrojó al ser descubierto y la mujer soltó una risita — ¿Quieres chocolate caliente? Hace un poco de frío hoy — el rubio asintió despacio.
Mientras esperaba a la señora Im regresar de la cocina se dedicó a escuchar la voz de Jaebum proveniente del mismo lugar. Al parecer se estaba quejando porque su arroz se había quemado ya dos veces.
—Déjame hacerlo Jaebum, se volverá a quemar.
—Claro que no, quiero que YoungJae pruebe algo hecho por mí.
—YoungJae no comería algo quemado aunque te quiera mucho — el nombrado soltó una risita y negó. La verdad él comería cualquier cosa mientras estuviera hecha por Jaebum.
Luego de un par de minutos la mujer regresó entregándole una taza que comenzó a expeler un delicioso aroma.
—La taza no está caliente, pero el chocolate sí, ten cuidado.
—G-gracias — bebió un pequeño sorbo, sonriendo al sentir el delicioso sabor a chocolate pasearse por sus papilas gustativas.
—Veo que te gusta — la mujer lo miraba atentamente, totalmente encantada con cada uno de sus gestos. YoungJae asintió con una sonrisa en el rostro y bebió otro poco.
—¡La cena está lista! Jaebum ya no quemó el arroz.
—Moría de hambre — el señor Im soltó una carcajada al ver la mirada fulminante de su hijo al dejar en evidencia su poca experiencia en cuanto a la cocina.
YoungJae caminó hacia su novio jalando levemente la manga de su camiseta.
—¿P-puedo sentarme a tu lado? Me siento más seguro así... — le preguntó bajito para que sólo él oyera. Jaebum sintió como si una horda de mariposas hubiera comenzado a revolotear en su estómago y sus mejillas se tiñeron de rojo sólo por la emoción.
—Por supuesto que sí bonito, tu puesto está justo a mi lado — YoungJae sonrió y caminó cerca del mayor para sentarse a su lado.
La carne que el padre de Jaebum había preparado estaba increíblemente deliciosa, lamentablemente no se podía decir lo mismo del arroz que el azabache había preparado.
—Jaebum hijo, te quiero mucho, pero esto no es comestible...
—L-lo sé, lo siento.
—No está malo — soltó de repente YoungJae — a Jaebumie, d-digo Jaebum, le salió bastante bien... S-solo falta un poco de sal... — el azabache se levantó de su silla con la intención de ir a buscar algo de sal. Volvió con esta en sus manos y sazonó nuevamente el arroz. YoungJae volvió a probarlo y sonrió al notar que efectivamente había mejorado su sabor.
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Show Me [2Jae]
Short StoryJaebum sólo había conocido a gente superficial, y esa misma gente acababa "enamorada" de él. Afortunadamente la vida - o cupido - le tenía preparado un precioso regalo llamado Choi YoungJae. 🐣 No se aceptan copias ni adaptaciones 🐣