Capítulo Diecisiete

1.8K 162 78
                                    

Dos meses fueron los que pasaron.

Fred y Gold intentaban apoyar y apaciguar un poco el dolor de sus hermanos y de su hijo, Gold Jr.

Freddy y Golden habían decidido probar teniendo otro hijo, más que nada por la soledad que sentían en la casa sin la alegría de Física al estar allí, sus cosas seguían allí, intactas, su cabello que había sido cortado antes de irse, ambos padres los tenían en un lugar seguro, era lo único que tenían de su hijo.

Bon y Bonnie debían luchar por no perder la cabeza ante el corazón roto que tenía Bhonnel por saber que la chica que le gustaba de hace tiempo iba a terminar casándose con uno de sus mejores amigos. Belinda aunque fría, intentaba dar lo mejor que podía su comprensión y cariño hacía sus padres, hermano e incluso hacía Gold Jr, quien...

Bueno, hace dos días la había besado diciéndole que quería olvidarse de Física y que para eso, necesitaba la ayuda de ella, porque era la única con la que podía llegar a hacer esas cosas. Y ella aceptó, no quería ver peor a Jr.

Llevaban recién un día como pareja, y aunque sabían que era mentira, Gold Jr estaba ilusionándose y Belinda... simplemente se estaba dejando llevar, no es como si pudiera hacer alguna cosa mejor.

Toddy pasaba el tiempo intentando convencer a Freddy de decirle de una buena vez la verdad a todos, ocultando el hecho de que ella misma ya se lo había dicho a Bon y Bonnie cuando fueron a su casa. Pero Freddy no quería ni podía hacerlo, tenía miedo de la reacción que pudiera llegar a tener Golden si le decía aquella verdad.

Gloria se sentía extraña cada vez que iba a la mansión con su prometido, cada vez veía al rubio menor más frío, más serio, y lo que más le preocupaba era el que sus ojos azules, siempre brillosos que la miraban de manera cálida...

Ese no era el chico que ella conocía, no era el mismo... Tenía una actitud soberbia, se mostraba como si fuese un hombre de 29 años en vez del adolescente de 18 que era. Bebía vino, hablaba más educado y frío, además de negarse a jugar o hacer cosas que normalmente, le habrían encantado.  Como salir a jugar como dos niños pequeños, o ver una maratón de aquel programa de unicornios que amaba ver.

—Henrick Jr, ven aquí—Llamó el rubio mayor, quien había cortado una llamada de Frank, estaba enojado.

Física, quien ahora era llamado por su segundo nombre, Henrick, estaba sentado en el sofá de la oficina de su abuelo, estudiando y adelantando contenido, sobre todo lo que tuviese que ver con leyes, luego seguiría lo que tuviese que ver con el dinero y su manejo.

—¿Sucede algo señor?—Le preguntó con voz seria y fría, con las manos detrás de su espalda, estando frente al escritorio del rubio mayor.

—Tu boda con Gloria será mañana...—Comentó él, mirando unos papeles y luego mirando a su sobrino, levantándose para rodear el escritorio, tomando la barbilla del menor, haciéndolo alzar la mirada.

—¿Debo hacer algo, señor?—Le preguntó, mientras sus ojos azules perdían el brillo, el escaso brillo que tenían, a medida que Henrick mayor se acercaba a él.

—Cubre tus heridas—Ordenó, rozando sus narices con una sonrisa—Y quedate hoy en mi cuarto, aún te faltan clases.

Susurró antes de besarle, el menor correspondió de manera monótona y simple, cuando el adulto se separó, le acarició suavemente su mejilla.

—Entendido...—Susurró firme Física, dando una leve reverencia antes de irse, tomando sus libros de la pequeña mesa y yendo a su cuarto.

Henrick se volvió a sentar, suspirando y aflojando la corbata. Sonriendo, puede que hayan pasado dos meses, pero sus hijos no habían hecho nada, y las llamadas de Frank aunque le hacían dudar, no causaban mayor problema. No volvería a caer ante el azabache de ojos azules.

Frank del otro lado de la linea estaba en el cuarto que Fred y Gold le habían prestado para quedarse, suspirando y mirando el celular. Se despeinó otro poco, estaba desesperado, quería ayudar a sus hijos, a su nieto...

Salió de sus pensamientos cuando sintió que un mensaje le había llegado a su celular. Era Henrick, diciéndole que fuese a casa de Golden y Freddy, acompañado de Gold, Fred y Gold Jr. Que era algo importante...

Con una pequeña esperanza en haber logrado cambiar algo, llamó a su hijo y a los albinos, yendo los cuatro rápidamente a casa de los otros dos osos, quienes ya habían comenzado a preparar un cuarto para el nuevo bebé, de todos modos, ellos sabían que Física siempre quiso tener una hermana, una compañía...

Cuando llegaron, agitados golpearon la puerta, cuando la abrieron, vieron a Golden limpiándose las mejillas, dejándoles pasar.

—¿Q-Que es lo que pasó...?—Preguntó Fred algo confundido, su hermano temblaba, sentado en el sofá con una carta entre sus manos.

—Es... la invitación para... la boda de Física... y Gloria...—Respondió Freddy, sollozando, mordiéndose los labios.

—¿Gloria...?—Susurró Gold Jr, sorprendiéndose por aquella noticia.

Sintió... Odio y rabia, temblaba apretando sus puños con fuerza, cerrando fuertemente sus ojos. Se sentía traicionado por aquella morena que juró no amar al rubio, que juró jamás entrometerse en su camino,  jamás... Intentar estar con Física.

Salió de la casa de sus tíos cuando se calmó, y las cosas allí se pusieron mal cuando Henrick llamó a su abuelo Frank, quien lo puso en alta voz. No quería, no quería escuchar aquella segura discusión.

Llegó a casa de Bon y Bonnie, donde estos estaban consolando a Bhonnel, quien ya había recibido la invitación a la boda, igual que sus padres. Pidió permiso y subió al cuarto de Belinda.

Sabía que ella no era sencilla del todo, y mucho menos, alguien fácil de tratar. De cualquier forma, quería... hablarle.








||Dibujito de Gloria hecho por Aylu que olvidé mostrar capítulos atrás, ahh 💕💕💕💕

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

||Dibujito de Gloria hecho por Aylu que olvidé mostrar capítulos atrás, ahh 💕💕💕💕

Lazos de SangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora