Casada con Finn Harries [EDITANDO 2021]

#07. Estúpida regla.

Sé que cuesta comprender lo ocurrido hace unos momentos, eso de que los británicos se vuelvan locos y comiencen a incendiar cosas, definitivamente no es muy común. Pero la situación de ahora es mucho más sencilla, y mas aburrida también.

Déjenme plantearlo de una manera que se entienda. El living, Finn y yo sentados en el sillón, Finn haciendo interminables ejercicios de matemática que le explique previamente (y déjenme aclararles que enseñarle matemáticas es como enseñarle a la pared, es más, creo que la pared lo entendería antes) y mientras el hace eso, yo miro la pared... en la pared hay un reloj.. los relojes marcan la hora.. si bueno, por lo general eso hacen, ¡mierda! se me esta pegando lo de idiota.

En fin, el punto es que el tiempo pasa y Finn no termina y me quiero ir a la fiesta.

— Jul, ¿estas bien?.- Preguntó el castaño a mi lado. Todo estaba en silencio, solo se escuchaba el tick tack del reloj.

No pedazo de idiota, estoy como la misma mierda.

— Si claro, ¿porque estaría mal?.- Pregunté.

— Es que estas moviendo la pierna como nerviosa... pareces un perro.

¡Un perro tu puta madre!,lo dice el maldito psicópata que casi incendia la casa.

— No, para nada, estoy perfecta...

Estaría mejor si estuviera en al fiesta ¡daah!.

— Ah, okay..- Respondió y volvió a posicionar sus ojos en los ejercicios. ¡Que termine de una puta vez!.— ¿Segura que no quieres ir sin mi?.

Claro que me quiero ir, ¿qué clase de estúpida pregunta es esa?.

— No no, te espero.- Respondí.

— Bueno, creo que ya terminé.

¡Aleluya dios en las alturas!.

— ¡Genial!.- Dije alegre al cielo.— ¿Vas a ir a cambiarte no?.- Pregunté con una sonrisa.

— Claro, ahora vuelvo.- El se paró rápidamente y caminó hacia su habitación.

Yo también me paré, pero para bailar la macarena de felicidad, ¡al fin había terminado! ¿saben que hora es? las tres de la mañana.. ¡las tres de la mañana! ya era hora de que fuera a esa puta fiesta.

Mi celular vibraba pero ya no le prestaba atención, tengo al rededor de unos 157 mensajes de voz de Pam preguntándome si voy a ir y que donde estoy y rogándome que vaya, ya me cancé de leerlos.

— Estoy listo, ¿vamos?.- mi mandíbula cayó al suelo

¡¿Qué carajos?!

— ¿Qué es eso?.- pregunté intentando mantener la calma

— Un traje.- contestó muy tranquilo. No pude contener la risa y estallé.

— Jajajajaj Dime que es una puta broma..

— ¿Qué? ¿esta mal?.

— ¿Nunca fuiste a una fiesta?.- Pregunté.

— Si, a las de la empresa, con los socios de papá... buenas fiestas, habían buenos cócteles.

— ¡¿Buenos cócteles?!.- Volví a estallar en risa.— Jajajajaj ¿es en serio?.- Pregunté sin poder creerlo.

— Si..- Dijo sin entender.— ¿Qué? ¿qué esta mal?.- Preguntó.

— Bueno, si eso para ti es una fiesta bien...- Dije mientras me acercaba a él.— Digamos que no vamos a una fiesta, iremos a una reunión con amigos..