Capítulo 14.

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(Narra Zoey)

Roow se quedó a dormir en mi casa ayer y tuvimos nuestra primera noche de chicas. Vimos pelis, criticamos a gente, nos probamos mil y un modelos diferentes… Lo normal.

-Por cierto, tu jefe es muy majo, eh.

-¿Quién? ¿John? –Le pregunté.

-El mismo. –Asintió.

-Huy, para. ¿Qué pasó el viernes? –Le pregunté. –Porque te fuiste solita a tu casa con él. Vale que ibas como ibas pero eso no ha sido impedimento para ti nunca, que yo sepa. –Reí.

-Vale sí, me lo tiré. –Admitió.

-¡Lo sabía! –Me reí aún más.

-Es que está muy bueno. –Rió. –No sé, estaba borracha y se portó muy bien conmigo ayudándome a salir del coche y acompañándome al portal que, el alcohol actuó por mí y me lancé. Y él no se quitó así que..

-No pierdes el tiempo, ¿eh?

-Es que el tiempo no está para perderlo, si no para aprovecharlo. –Aseguró.

-Pues ahí tienes tooooooda la razón del mundo.

Y esa fue la conversación que destacaría de toda la noche que nos pasamos hablando. Además, me acaba de llamar Zayn y me ha dicho que ya ha llegado a Londres y que mañana me va a presentar a sus amigos. ¡Por fin! Sigo sin entender por qué los esconde tanto… Él me ha dicho que cuando me cuente lo que me tiene que contar, lo entenderé y claro, mi curiosidad crece por momentos.

(Narra Zayn)

-¿Entonces estás seguro, no? –Me preguntó por vigésima vez Liam.

-Joder, primero me dais el coñazo para que le cuente quién soy, y ahora que me decido a hacerlo, me dais el coñazo con que si estoy seguro… Aclaraos, coño. –Contesté.

-No es eso, si a nosotros nos parece muy bien que te hayas decidido a decírselo, ¿pero estás seguro que quieres decírselo con nosotros delante? ¿No será mejor que estéis solos? –Inquirió Niall.

-No, a ti ya te conoce Niall, y así os conoce al resto. Además, si me trabo y no sé cómo decírselo, que me pasará, me podréis ayudar. ¿Y a vosotros no os importa, no?

-No, no, para nada. –Contestó Harry contento.

-¿Entonces mañana a las 2 en tu casa? –Asentí. -¿Vas a cocinar tú? –Negué.

-Menos mal. –Soltó Louis.

Le fulminé con la mirada.

-Entiéndelo, la cocina no es lo tuyo, Zayn. –Rió.

-Lo sé, pero disimula tu entusiasmo, hombre. –Reí.

Nos despedimos y cada uno se fue a su casa. Llegué a mi habitación y me tiré en plancha sobre la cama, estaba demasiado cansado. Espero que mañana todo salga bien.

(Narra Roow)

Lunes otra vez y yo tengo que ir a trabajar… ¿Por qué le pasan cosas malas a la gente buena? Nunca lo entenderé. Es cosa del karma fijo.

-¿Roow? –Oí a través del teléfono.

-Ay, sí, perdona, que aún no he despertado del todo. –Reí. -¿Qué me decías?

-Que hoy Zayn me va a presentar a sus amigos y me va a contar eso tan importante que me dijo ayer.

-¿Nerviosa?

-Intrigada. Y mucho. No sé qué cojones será pero tengo ganas de saberlo ya.

-¿Y si es multimillonario y no te lo ha dicho? –Fantaseé.

-Sí, claro, y en realidad tiene una mansión y el piso al que me llevó es la casa del servicio, no te jode.

-Oye, no lo descartes eh. –Reímos. –Sería un braguetazo en toda regla.

-Claro, y en realidad es actor, o mejor, ¡cantante! –Rió

-Ríete, pero no estaría nada mal enrollarse con algún cantante tipo Justin Bieber o así… Y lo sabes.

-Anda, anda, te cuelgo que voy a llegar tarde al trabajo y solo faltaba que John me hiciese quedarme más tiempo, que he quedado justo cuando salgo. Por cierto, le daré recuerdos a John de tu parte. –Rió a carcajada limpia.

-Mira que eres mala… -Colgué.

Recuerdos míos no sé, pero no estaría mal que le dijese que se dejó la chaqueta en mi casa…

(Narra Zoey)

1:30 del mediodía y ya está Zayn esperándome con el coche en la puerta del centro comercial. Tan puntual como siempre.

-Hola. –Le saludé con un beso.

-Hola, guapa. –Contestó sonriente.

-Por fin me vas a presentar a tus amigos. –Le dije. –Ya era hora de que dejases de esconderlos. –Le piqué.

-No los escondo. –Contestó mirando a la carretera fijamente. –Ya te dije que cuando te lo cuente todo, lo entenderás. O eso espero.

-Cada vez estoy más intrigada, ¿qué es lo que tienes que contarme? –Curioseé.

-Cada cosa a su tiempo, Zo.

-La paciencia nunca ha sido mi fuerte. –Me resigné echándome para atrás en el asiento.

Quince minutos después ya estábamos en su casa y su compañero Niall estaba en la cocina.

-¡Hola! –Saludó contento. Le devolví el saludo.

-Zoey, ¿te acuerdas de Niall, no? –Me preguntó Zayn.

-Claro que sí. –Sonreí.

-Vale, pues ya conoces a uno de mis amigos. –Dijo como si nada.

-Eso creo que ya se daba por hecho. –Comentó el rubio. Reímos.

Estuvimos unos cinco minutos hablando en el salón y cuando Niall terminó de hacer la comida, se unió a nosotros.

-¿A qué hora habías quedado con estos? –Preguntó Niall.

-A las 2, deben estar al caer. –Contestó Zayn.

-Voy a por un vaso de agua, que me muero de sed. –Dije mientras caminaba hacia la cocina.

Mientras llenaba el vaso, oí el sonido de la puerta. Supuse que ya habían llegado los amigos de Zayn.

-Bueno, ¿qué? ¿Nos vas a presentar a tu famosa nueva novia ya? –Esa voz… No podía ser.

-Zoey, ven anda, que…

-¿Harry? –Balbuceé al verle de espaldas.

Se giró y la confusión se leía en su rostro. Estaba tan impresionado como yo. O más. No, más no, eso es imposible.

-¿Zoey?

El vaso de cristal se rompió contra el suelo haciéndose añicos y derramando el agua que había en su interior.

Past always comes backDonde viven las historias. Descúbrelo ahora