Capitulo 13

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En la línea de puntos




"¿Vamos a tener esta discusión en serio?" Pregunta Ana.

"Me gustaría, sí. No nos ocultamos cosas. Nada. Si te pintas las uñas de naranja neón, quiero saberlo".

Ana se sienta en el sofá mientras mira a Mimi caminar de un lado a otro. El tema de Cepeda y Clara definitivamente no necesita ser agregado a la lista de cosas de las que necesitan hablar. Ana sabe que Mimi está aquí solo por un tiempo limitado y su tiempo para tomar una decisión, para tomar medidas, está disminuyendo rápidamente. Parece que será una larga noche. La idea de que Clara estuviera en la habitación del hotel de Mimi estaba molestando a la morena y le cuesta mucho pensar en cómo explicarle lo de Cepeda y por qué nunca se lo conto. No es que no quisiera. Solo se sentía nerviosa por compartir eso con Mimi, y cuanto más lo posponía, más irrelevante se volvía.

"En primer lugar, nunca usaría esmalte de uñas de neón naranja". Ana sonríe al ver el ceño fruncido en su dirección.

Mimi se cruza de brazos arqueando una ceja hacia su futura novia y pone los ojos en blanco. "Es solo un ejemplo. Entonces, ¿por qué no dijiste nada?"

"Tú primero."

"Yo primero nada porque no pasa nada entre Clara y yo. Vino anoche incluso antes de que llamaras y te metieras sigilosamente hasta aquí. De verdad necesito cambiar mi hotel si la gente puede conseguir una llave tan fácilmente"

"Uh, perdón, después de esta semana es mejor que no te quedes en más hoteles. Viviremos juntas".

"No, gracias, no tengo ganas de ser la tercera en discordia "

La boca de Ana se abre en estado de shock y Mimi solo levanta sus hombros con los brazos extendidos.

"Eso estuvo fuera de lugar." Dice Ana.

"Es un detalle que necesitaba destacar".

"Mimi, voy a dejarlo".

"Entonces hazlo Ana, no me importan los sentimientos de él. Sé que debería amor, lo sé, pero me preocupo por ti. Me preocupo por nosotras. Tú y yo somos más importantes que sus sentimientos".

Ana mira a Mimi con una sonrisa, deleitándose con su nuevo mote. Le hace sentir mucho más cálida que Pingüino. La fotógrafa frunce el ceño confundida mientras la morena continúa mirándola de una manera suave.

"¿Qué?" Pregunta Mimi.

"Me llamaste amor".

Mimi esboza una sonrisita, pero al momento vuelve a ponerse seria "Ana, estoy tratando de hablar en serio".

Finalmente deja de caminar y se une a Ana en el sofá.

"Ana, necesitamos dejar de prolongar esto. Sabes que eso de idas y vueltas solo puede durar un tiempo antes de volvernos locas".

Ana se muerde el labio inferior y piensa por un momento. Asintiendo segundos después, las cejas de Mimi se levantan de emoción.

"¿Si?"

"Sí." Ana responde con una sonrisa. "Lo haré y luego me quedo el resto de la semana contigo para que pueda tener algo de espacio".

Mimi mira hacia abajo por un momento, sus emociones cambian rápidamente, pero la mano en su mejilla la hace volver su mirada a Ana.

Sinceramente tuya (Warmi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora