Sinceramente tuya (Warmi)

Capitulo 22 (Parte 3)

La morena se frota los ojos. Su boca se abre mientras bosteza ruidosamente. Agarra el cuello de su uniforme y lentamente lo levanta sobre su cabeza. Pasó las últimas dos noches en el hospital sin encontrar una razón para regresar pronto a una habitación de hotel vacía. Miro la hora y vio que eran las diez de la noche. No ha hablado con Mimi hace dos días, ella ocupada con sus operaciones y la rubia había estado ocupada con su sesión. Solo un día más sin la rubia y ya está. Todo lo que tiene que hacer es ignorar el tiempo.

"Te ves como un desastre caliente". Clara comenta mientras entra al vestuario.

"No me he ido a casa todavía". Ana dice a través de otro bostezo, agarrando su camisa de la taquilla.

Clara se ríe mientras se quita los zapatos. "Estoy segura de que te animarás en cuanto salgas del hospital. Ya sabes ... aire fresco".

La pelirroja intenta cubrir su minúsculo deslizamiento. Ana está demasiado cansada para juntar dos y dos de todas formas. La morena solo gruñe y cierra su taquilla. Empieza a andar y tropieza un poco borracha por el agotamiento. Clara se ríe y le da a su mejor amiga un apretón de apoyo en el hombro. Ana saluda a su colega con un gesto débil mientras se dirige a la puerta.

Entra en el ascensor y se obliga a despertarse sabiendo muy bien que, si no se anima pronto, no podrá volver a casa en moto. Podría dormir en el hospital. Hay una sala de guardia, pero con el nuevo turno entrando y saliendo, las posibilidades de que duerma algo son muy escasas.

El ascensor suena cuando se abre y los ojos de Ana se abren a la vez. Sale del ascensor y camina rápidamente hacia la puerta principal.

"Te ves cansada."

Ana asiente mientras sonríe suavemente. "Lo estoy." Ana dice sobre su hombro al pasar de largo.

Mimi se ríe tan pronto como Ana se detiene en seco. Rápidamente se gira y señala a su novia sin decir nada. Su boca está abierta pero no sale sonido.

"Cogí un vuelo nocturno". Responde Mimi mientras se acerca a la morena. "Te extrañaba demasiado como para esperar otro día más. Iba ir al hotel y luego me di cuenta de que probablemente no estarías allí".

Ana todavía estaba aturdida por la llegada de su novia, solo podía mirar hacia abajo con una leve vergüenza. Mimi la conoce muy bien. La fotógrafa se acerca y coloca las palmas de sus manos en las mejillas de Ana. La cirujana inhala bruscamente, es como volver a respirar después de estar bajo el agua durante mucho tiempo. Ni siquiera sabía que estaba llorando hasta que Mimi le limpió una lagrima.

"Hola." Dice Mimi.

Sus labios se juntan en un beso acalorado cuando Ana cierra la distancia entre ellas. La rubia no tarda en devolverle el beso. Mimi echa su cabeza hacia atrás aún en los brazos de Ana.

"Y pensar que pasaste justo a mi lado".

Ana se ríe sacudiendo la cabeza. "Cállate, estoy cansada". Murmura contra los labios de Mimi. Se besan apasionadamente, olvidando que estaban en medio de la salida del hospital.

"Debería llevarte al hotel" Dice Mimi, Ana apoya su cabeza en el hombro de la fotógrafa.

Con un último beso, Mimi rompe el abrazo y une su mano con la de la morena. Agitan las manos caminando distraídamente en silencio, ambas están demasiado cansadas ​​para hablar.

"Esta sorpresa parece decepcionante". Mimi comenta, bostezando y riendo al mismo tiempo.

"Es mi culpa que no haya asimilado todavía tu presencia. Ni siquiera estoy segura de sí estoy despierta en este momento".