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La visión que tenía justo al frente mío me daba mucha risa y no es por el hecho de que Jasper este jugando con Adam y unos caballitos y que estén vestidos iguales sino que Adam no le prestaba atención además a su edad solo babeaba todo.

Pague mi helado y me senté en la banca donde estaban las cosas de Adam y su cochecito. Una señora mayor que pasaba con su esposo me miró sonriendo encantada.

-Su familia es hermosa mi niña –le sonreí a la mujer quien me dió una pequeña flor que tenía en su mano derecha -. No importa las tormentas mientras tengas amor a tu lado.

Me quedé mirándola sin saber que decir por lo que solo le sonreí tímidamente, ella siguió andando mirando al señor a su lado con amor. Suspiré. Llevábamos media hora en el parque y Adam seguía sin querer ver o hacer nada ¡Ni tan siquiera alzaba sus manitas!

-Adam no quiere estar aquí –dijo Jasper dejando a él pequeño en su cochecito.

-Me eh dado cuenta –sonreí divertida llevando el cochecito y Jazz las cosas de Adam.

-¿Quieres ver una película? –pregunto, asentí encogiendo mis hombros.

-¡Oigan chicos! –grito un chico con una cámara en manos -Soy Pedro Mendoza y tengo un trabajo de universidad ¿Les puedo tomar una foto a los tres?

Fruncí el ceño cuando la mano de Jasper se puso en mi cintura acercándome a él y solo pude sonreír cuando el flash me dejó ciega por unos segundos.

-Muchas gracias chicos, adiós pequeño Asgardiano –el chico corrió hacia dos chicos y nos señaló sonríendo.

-Es enserio, ¿un universitario o un secuestrador busca órganos? –pregunte confundida siguiendo mi camino al auto.

-Es un estudiante de fotografía, en la universidad de Boston y creo que su amigo te reconoció porque camina hacia acá –me susurró al oído todavía con su mano en mi cintura.

-¡Hey Alissia! –voltie a mirar a uno de los amigos de mi hermano y por ende uno de mis violadores.

Miré asustada a Jazz quien me apretó más fuerte y tomo el cochecito de Adam y comenzamos a caminar más rápido, yo mantenía mi vista en el suelo.

-Ese Imbécil no dañará nuestro lindo día –dijo montando a Adam a su asiento. Ayude guardando las cosas del pequeño y me monto de copiloto a esperarlo. Él me había obligado ir en su auto ya que así no me escaparía.

Ya en el cine vimos Hotel Transinvania 3  entre risas de parte de los tres. Miré por la ventana del restaurante donde me había llevado era uno muy acogedor y lindo.

-Querida come un poco –dijo sacándome de mis pensamientos.

Él le daba el biberón a Adam y comía de vez en cuando de mis papas fritas. En todo el día Jasper literalmente no sé a separado de Adam para nada y si intento ayudarle se queja diciendo que yo lo tuve mucho tiempo para mí que era su turno. Comí mi hamburguesa bajo su atenta mirada que me sonrojaba a cada rato.

-Te amo –sus palabras me dejaron en shock, había esperado tanto por escuchar esas dos palabras que nunca antes había escuchado de sus carnosos labios.

-Jazz... –intentaba contener las lágrimas parpadeando varias veces, él tomo mi mano derecha que descansaba encima de la mesa. 

-Te amo y amo a Adam –apreté cariñosamente su mano asiendo que sonriera -. Ustedes son mi familia ahora y siempre, nunca los volveré a dejar.

-Eso espero Jasper porque no habrá otra oportunidad –dije sería soltando su mano bruscamente para comer -, por más que te ame no dejaré que me lastimes no de nuevo.

Mi pequeña chicaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora