Chocolate freckles [Changlix]

XXV

Jeongin se sentía, de alguna forma, un poco vacío. Un poco dolido. Un poco asustado. Y por supuesto, un poco roto.

Hablar de su dolor y de todo aquello que le estaba afectando era difícil, sobretodo cuando la persona que lo causaba todo; se atrevía a preguntarle sí estaba bien o sí podía hacer algo para hacerle sentir mejor.

Jeongin supo, desde el primer momento, que enamorarse traería dolor pero no sabía que sería tan intenso o tan doloroso para no dejarlo respirar sin sentir aquel punzón en el corazón.

Te amo, te amo. Te amo desde hace tanto. Chris, eres todo lo que quiero y necesito y por favor, no me rechaces. No vayas con Woojin. Simplemente no me dejes solo.

Las palabras estaban en su garganta, recorrían su mente y cada vez que estaba por decirlo, se detenía.

Sabía que era egoísta intentar quedarse con Chris causándole lastima, sabía que el alfa sería tan lindo y sacrificado que podría dejar su felicidad para hacerlo sentir bien, sabía que Chris era esa clase de persona que sacrificaría todo para el bien de uno de sus seres queridos. Y justo por eso lo amaba. Justo por eso había decidido que quería pasar su vida a su lado, por eso y más; Chris era un alfa tan bello y especial, que no se comparaba con todos aquellos que había conocido en algún momento de su vida.

"¿Y bien?" Chris parecía esperar una respuesta de su parte, la sonrisa que se formaba en su rostro era la más hermosa y la que más necesitaba ver Jeongin para sentir su corazón llenarse de un cálido sentimiento.

"¿Eh?" Se hizo el desentendido y quiso que la campana sonará. Quería salir huyendo del lugar y esconderse en su escritorio hasta que pudiera irse a su casa y dormirse para calmar la sensación de incomodidad en su interior.

"No me dejaste verte cuando fuí a tu casa, y tampoco contestaste mis mensajes o mis llamadas, ¿Estás bien? Estuve preocupado toda la semana y-"

"Estoy bien, sólo quería tiempo para mí, ¿Sí" Jeongin quiso tomar su mano para sentir su calor, quería hacerlo pero se abstuvo de hacerlo.

"¿Estás seguro? Me preocupa que te esté pasando algo, sabes qué cuentas conmigo"

Jeongin cerró los ojos y mordió sus labios, dirigió su vista al suelo y quiso ponerse a llorar. Quiso rogarle por amor. Quiso pedirle tanto y su corazón también, pero simplemente; no podía. Se negó a llorar enfrente de él, se negó a romperse y mostrarle lo mucho que lo amaba y lo necesitaba incluso ahora.

"Tengo que ir a clases, hablamos luego"

Estuvo cerca de irse, hasta que sintió el agarre del alfa en su brazo. Subió su mirada hacía su rostro, y se encontró con los ojos más dolidos que pudo apreciar desde que lo conocía. El aire se le fue de los pulmones, y desvío la mirada hacía cualquiera que pasaba por ahí, en busca de alguien que conociera y pudiera utilizar para sacarse de la incómoda situación.

"Chan-" se detuvo a sí mismo de decirle que lo dejará.

"No estás bien, ¿Hice algo?"

"¡No toda mi vida gira entorno a ti! ¡Déjame!"

El rostro de Chan parecía descompuesto. Sorprendido. También dolido y agotado. Se sentía mal de hacerlo de esa forma, pero simplemente no estaba de buen humor.

Jeongin fue soltado en cuestión de segundos y no se dió a dudar cuando sucedió para salir corriendo lejos de él y en dirección contraria a todos aquellos.

Sentía como el cuerpo le pesaba. Y el corazón se le partía de forma tan rápida e intensa que él no podía detenerse a sí mismo de todo lo que estaba sucediendo en su interior.