Capitulo 28

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Cuando Camila verificó que Lucy se había creído su excusa barata. Pensó en meterse en el baño con su novia, pero luego desistió con la idea de inmediato. Pensó que era mejor darle su espacio, así que como no quería utilizar los baños de las otras habitaciones donde las chicas se estaban hospedando. Se volvió a poner el bóxer junto a sus pantalones y bajó a la planta inferior para usar el baño del gimnasio.

Cuando salió tenía puesto su traje de baño y una camisa de manga larga que le ayudaba a cubrir sus cicatrices. No quería que por un error las chicas las descubrieran y empezaran las preguntas y las preocupaciones, mientras menos personas lo sepan mejor, aunque Camila prefiriera que nadie lo supiera. Pero era aliviánate que Lauren ya estuviera al tanto y no tuviera que preocuparse en esconderlas de ella en ningún momento, ni siquiera en su intimidad.

—Hola bebe—Camila voltio a la voz que le hablaba. Lauren tenía un vestido corto que cubría su traje de baño. Camila suspiro aliviada.

—Hola—Lauren se acercó inspeccionando a su chica.

—Porque esto—le señaló la camisa.

—Por esto—se levantó una manga dejando a la vista algunas de sus cicatrices—pero ya están sanando no te preocupes.

—No son tan profundas ¿verdad?

—No, por eso creo que no dejarán marca—hizo una mueca cuando delineo sus heridas—por excepción de esta—señaló la que había sido más reciente, la vez que se salió de las clases y recordó lo qué pasó con sus padres biológicos—creo que está si dejará marca.

Lauren llevó la muñeca de su novia a sus labios plantando un beso en esta.—Eres hermosa—Camila no dijo nada. Si no bromeaba simplemente se quedaba quieta sin decir nada. Lauren no se cansaría de decírselo hasta que Camila se lo creyese y ella misma lo piense.

Camila negó con la cabeza—Tu eres perfecta, ángel—Lauren sonrió por el apodo.

—Me gusta cuando me llamas así.

—Es que eso eres, era un hermoso ángel.

Ally interrumpió su interacción entrando a la casa—Oh, lo siento ¿interrumpí algo?—Camila se bajó rápidamente la manga.

—¿No, solo estábamos hablando verdad Lolo?—la chica asintió.

—¿Porque la camisa?—que curiosa nos saliste Ally.

—Ya sabes, mis heridas del accidente—bueno en parte era verdad.

Ally asintió—¿Puedo ir a la cocina?

La morena frunció el ceño—Claro que puedes, no me tienen que pedir permiso cada vez que quieran ir algún lado de la casa—soltó una risita—luego terminarán pidiéndome ir al baño—Lauren se unió a su risa.

Ally se encaminó a la cocina sin decir nada. Tomó un vaso y abrió la nevera, agradeció a dios por que había té helado y limonada.

—¿Vamos con las chicas?—preguntó Lauren y Camila lo que hizo fue tomar su mano entre la de ella y asentir.

—Vamos—dijo mientras Lauren empezaba a caminar.

Camila respiró hondo mientras se recostaba en una tumbona (silla para la piscina). Una sonrisa en su rostro aprecio al instante en el que vio que Normani tenía todas las intenciones de tumbar a Dinah de uno de los inflables donde estaba recostada disfrutando de la piscina. Normani volteó a ver si alguien estaba al tanto de sus movimientos y notó que la única persona que lo estaba era la morena, así que le hizo una seña para que se quedara callada. Camila asintió con una sonrisa de pura maldad y gozo en su rostro, Normani se sumergió en el agua y empezó a nadar por debajo para llegar a lado de Dinah sin que esta se haya dado cuenta.

Hasta el final (Camren G!P)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora