Capitulo XVIII Las cartas de Rin...

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"...Sinceridad..., es lo único que nos distancia...nuestra única barrera..."


Pov Sesshomaru

Allí esta, durmiendo a tan lejos de mi como fuera posible, no le hace falta, no puedo acercarme a ella, aunque quisiera, como desearía que esa estúpida barrera que tiene a su alrededor, aun no entiendo como hacer para que desaparezca y tenerla conmigo para siempre...

Fin pov Sesshomaru


El Dai youkai, le ordeno al pequeño ser detenerse, para salir del carruaje a rumbo desconocido, dejando a la joven dormir plácidamente envuelta sobre su estola, no muy lejos, había llegado un pequeño claro, la luz de la luna llena iluminaba su presencia con un tenue resplandor, cerro sus ojos para serenarse y hallar la manera en que la doncella pueda estar cerca de él, al menos tener un tenue contacto en su piel

-amo bonito-lo llamo Jaken algo inseguro, sabia que no estaba bien, y que su prioridad era cuidar de la joven azabache, pero aquella escena de Sesshomaru, lo confundía, una parte de él, estaba de acuerdo con el viaje pero..., ambos sabían como iba a terminar y no era nada bueno para la princesa, enterarse de ciertas cosas que no comprendería tan fácilmente

-¿Qué quieres?-le respondió secamente, haciendo que un frio escalofrió recorriera su columna vertebral

-existe una manera de que la princesa Rin, elimine su barrera, señor-confeso, los ojos del demonio se abrieron en un instante, volteo indiferente esperando mas de aquella información valiosa, sin embargo, jamás demostraría algo que se negaba sentir, que deseaba a la joven mas de lo que había imaginado

-habla

-escuche una vez, en historias pasadas que las descendientes del Sol, como en el caso de la princesa Rin, tienen un don especial, que muy pocos de la familia tienen

-¿Qué tiene que ver?

-la barrera no es por su nivel demoniaco señor, es por su honestidad

-hmp! ¿Qué dices?

-debe decirle la verdad señor, solo así la barrera desaparecerá, con o sin el perdón de ella-camino hacia él, reverenciando varias veces en el suelo suplicando que no lo golpeara por su osadía, pero, solo lo ignoro dirigiéndose nuevamente al carruaje, entrando en el, cerrando la puerta dejando a pequeño sapo en completo silencio y confuso

Una vez adentro, contemplo a la princesa envuelta en la estola, de vez en cuando aparecía en su rostro angelical una bella sonrisa, dándose cuenta que en sus pies había un pequeño papel, recogiéndolo con sus garras leyendo su contenido


Mi querido príncipe, nunca me entenderías mis verdaderos motivos de por que hago esto, pero ten en cuenta que es porque te amo demasiado, si, te amo y jamás dejare de tener este sentimiento por ti...


No leyó mas que eso, ya que lo exprimió con sus garras, llenas de furia y celos, sus ojos se volvieron rojos como la sangre que recorría su piel de sus puños conteniendo sus ira y una aura demoniaca oscura hacia vibrar todo el lugar

-¿Qué sucede?-se pregunto ella después de tener un sueño extraño, cuando se dio cuenta estaba siendo jalada con brusquedad, hacia el peli plateado sintiendo el filo de sus garras sobre su piel, a pesar de que estaba envuelta sobre la suave pero fuerte estola

Presa del destino... Donde viven las historias. Descúbrelo ahora