Always Beside You (Calum Hood y tú)

Capítulo 1

Narra ____:

La semana empezaba de nuevo. Un nuevo día tocaba vivir hoy. Primera clase del día: religión. Menos mal que es una asignatura tranquila. Todavía no me despertaba del todo así que esta hora, era mi oportunidad para hacerlo.

-Hagan grupos mixtos de 4 personas.-dijo el profesor.

Las chicas y yo pusimos cara de asco, ya que normalmente en los grupos siempre íbamos juntas.

-¿Vamos juntas?-me dijo Fernanda.

-¡Vale!-dije sonriéndole.-Ahora solo nos faltan dos chicos.

-Pues sí.. Haber si se ofrece alguien para ir con nosotras

Los minutos pasaban y solo éramos dos. Por suerte, dos compañeros nuestros se acercaron.

-¿Podemos ir con vosotras?-dijo Ashton.

-No tenemos grupo.-dijo Calum poniendo una carita triste.

-¡Perfecto!-dijo Fernanda emocionada .

-¡Profe! Ya tenemos el grupo completo.-dije yo.

-¡Muy bien chicos! Tenéis que repartiros la faena. Tenéis que buscar información sobre el personaje que elijáis, decir quién es y porqué es importante.-dijo el profesor dándonos una hoja con 4 nombres.

-Veamos.-dijo Calum mostrando interés.-Anna Frank, Sigmund Freud, Woody Allen y Nelson Mandela. Me pido hacer Woody Allen.

-Son las 8 de la mañana Calum. ¿Cómo puedes estar tan trabajador? Es lunes.-dijo Ashton sorprendido.

Después de que Calum eligiera el personaje que quería hacer, elegimos nosotros. Yo elegí a Anna Frank, alguna vez escuché hablar de ella. Ashton eligió Nelson Mandela y a Fernanda, le tocó Sigmund Freud.

~

Esto nunca lo expliqué, pero a Annabelle, Fernanda, Melanie y Paula, las consideraba amigas de verdad porque ellas me aceptaban tal y como era. Desde hace un año, estudiantes de mi instituto, me hacen bullying. Se metían conmigo porque era de piel morena y ni si quiera sabían que yo era de familia chilena. Ese año fue muy difícil para mí. Mi hermana no estaba conmigo en la clase, ya que iba a la del lado y en la mía, yo no hablaba con nadie. Tenía miedo de intentarlo ya que siempre pensé que si lo hacía, se iban a meter conmigo o se reirían. Me acostumbré a estar sola, de hecho, se había convertido en algo normal para mí. Mis padres me llevaron a un psicólogo y la verdad es que me ayudó mucho. Conseguí creer en mi e intentar ser fuerte. Nunca olvidaré la frase que me dijo: "Tu eres un muro y las balas no pueden atravesarte." La frase quería decir que aunque los insultos siguieran, no debían afectarme. Debía ser fuerte. Un día Fernanda me encontró llorando y a partir de ese momento, la comunicación entre nosotras se inició. Gracias a ella y a Annabelle, ahora tengo una sonrisa y ya no veo la vida tan mala como antes.

Espero que os esté gustando la novela. Intentó escribir lo mejor que puedo.

Gracias a todos a quellos que leéis la novela. Si queréis que suba el siguiente capítulo votad y comentad.

*Si tenéis alguna idea, dejadla en un comentario o mandad un mensaje. ¡Gracias!