“Querido John:
Lamento la demora,pero últimamente por problemas de salud no he podido responder tus cartas. Ahora, gracias a Dios, me siento mejor, por lo tanto pude recobrar las fuerzas para agarrar una pluma y papel para contestarte después de estos dos meses.
Ha pasado mucho desde la última vez que me escribiste; por ejemplo mi pequeño Charles ya ha aprendido a caminar. Ahora no para de enloquecer a mi marido quién lo persigue a todas partes para asegurarse de que no se lastime o tropiece, debido a que ha demostrado tener mucha energía, similar a como me cuentas que son tus hijos.
Ojalá que algún día mi pequeño tenga la oportunidad de conocerlos, seguramente formarían una muy estrecha amistad.
También quisiera saber como se encuentra tu familia, ¿Philip sigue rayando las paredes? ¿cuánto creció Eleanor? ¿Eliza sigue siendo un ángel con todos como siempre? ¿cómo te va en el congreso? Sé que son tantas preguntas pero sabes muy bien cuánto te adoro a ti y a tu familia, aún si solo he visto una vez en persona a tu esposa y sabido de tus hijos mediante estas cartas.Estaré esperando tu respuesta.
Atentamente, tu niña; Martha Manning Church.”
[...]
—Buenas noches Eleanor. —le decía John a su hija menor mientras le daba un dulce beso en la frente, quién ya se encontraba dormida.
Después el pecoso se giró hacía donde dormía su maravilloso hijo de cinco años y posteriormente también le dio un beso en la sien con mucho cariño. De verdad adoraba a sus dos pequeños retoños.
Entonces se dirigió a la oficina, sabía que le había prometido a su esposa que se dormiría temprano, pero tenía que contestarle a su amiga, Martha, la carta que le había enviado. La verdad sintió un gran alivio tan pronto la leyó, pues había pasado mucho tiempo sin haber obtenido una respuesta de la última carta que le había enviado, más el mensaje que el marido de ella le envió hace poco notificando que lo que le impedía escribir era una enfermedad que había contraído, hicieron que se preocupara bastante. Y ahora que sabía que se encontraba mejor moría por contarle todo lo que había pasado alrededor suyo últimamente.
Se sentó en su escritorio para ponerse a escribir la respuesta cuando notó que su esposa había entrado y pensó en que seguramente quería mandarlo a dormir.
—¡Eliza! Perdona si te hice esperar en la cama, pero prometo que solo escribiré algo rápido y después me iré a dormir. —explicó.
Sin embargo la cara que ponía su mujer no cambiaba.
—John...te llegó una carta de Inglaterra. —le contó en lo que tenía la mirada baja.
—Oh, ¿es otra de Martha Church? —preguntó algo confundido, pues sabía que ella era de esas personas que no mandaban tantos mensajes.
—No, de su marido.
Y al escuchar eso, el castaño tuvo un mal presentimiento.
—¿Qué dice? —preguntó ya temiendo lo peor.
—“El 10 de octumbre, mi amada Martha no pudo luchar más contra su enfermedad y terminó cayendo en un sueño eterno que la llevó hacía el otro lado.” —narró el primer párrafo con tristeza.— “Te agradezco sinceramente la amistad que tuviste con ella, pues sé que desde hace años eres una de las luces que iluminaban la buena vida que tuvo.” —hizo una pausa antes de seguir leyendo.— "Posiblemente ya la habremos enterrado en nuestro cementerio familiar para cuando te haya llegado esta carta, y quiero que sepas que igual sigues siendo bienvenido a visitarla y ser acogido en nuestra casa cuando quieras. Gracias por haber sido su mejor amigo. Atentamente, John Baker Church." —finalizó conteniendo sus lágrimas y después levantó la vista hacía su marido, quién estaba en un completo shock.
John no podía creerlo... o más bien, no quería. ¿Cómo era posible? Si recientemente recibió una carta de ella diciéndole que estaba bien, ¿acaso la enfermedad había atacado nuevamente? ¿le había mentido? O quizás solo era una broma cruel, esperaba que fuera eso.
Se encontraba profundamente atrapado en la etapa de la rotunda negación.
—John, ¿estás bien? —le preguntó Eliza con preocupación.
—Pero en su mensaje comentó que se encontraba mejor. —murmuró.—Y le iba a escribir sobre cómo estábamos, y que me encantaría que ella y su marido trajeran a Charles para acá...
La pelinegra inmediatamente lo abrazó, dejando que él se pusiera a llorar sobre sus hombros. Y en eso él escuchó vagamente un susurro;
“No te preocupes, tu niña desde aquí te seguirá apoyando en todo”.
Aunque pensó que solo había sido su imaginación, pues los muertos no podían hablarle.
[...]
¿Pensaban que este fic no tendría un "interludio"? Jajaja...
Nunca se confíen del todo(?)Lamento que haya sido corto,sin embargo he vuelto a clases y apenas he tenido tiempo de escribir este capítulo *cries in spanish*(?) Aún así prometo que el siguiente será más largo^^ También que por fin aparecerá la diva favorita de todos~
Y como dato curioso;Eleanor era el nombre de la madre de Laurens,así que sí, aquí le puso a su hija ese nombre en su honor❤
¡Nos leemos pronto!
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Unsatisfied [HIATUS]
RomanceHamilton AU. Todos conocemos la historia,en especial el hecho de que cierta persona terminó no estando satisfecha, sin embargo,¿que pasaría si el insatisfecho hubiera sido otro? ¿y si las parejas que se formaron fueran otras? Casi lo mismo, pero con...