«Entre Letras»

Para el chico que me amó

26/08/2018

Dudo que vuelvas a pasar por estos lugares, que vuelvas a leer estas hojas que hoy parecen blancas.
Aún así me animo y vuelco todo lo que siento, nuevamente, pero hoy siento soledad, tristeza y mucho dolor.
Para el chico que me amó, para el que me animó a tanto, al que tanto me acunó entre sus brazos blancos, suaves y grandes; te escribo nuevamente hoy.
Mi espíritu esta decaído, se siente triste e inútil, mi alma corrió fuera de mi para dejarme morir en soledad, y mi corazón está entre tus manos, por favor cuídalo, te devuelvo el tuyo, tan preciado tesoro que sostuve estos meses, pero no puedo tenerlo, no me pertenece, lo único que hago es lastimarlo y romperlo cinco veces.
Siempre tuvieron razón, mi amor es solo un recipiente lleno de humo y traicion, siempre lastimo, siempre nublo, siempre fui la misma chica que nadie merece por ser puro.
Al chico que me amó, gracias por cuidarme tanto, mi cintura extrañara tus brazos cuando me abrazaban, cuando me sostenías contra ti, mis manos escriben esto pero piensan en los bailes que tuvieron con las tuyas, manos grandes, suaves, y protectoras.
No puedo ser feliz con alguien, eso está bien seguro, mi destino seguramente es terminar sola por el pasado que cargo en mi espalda.
Espero que encuentres a alguien a quien amar mucho más, y que la princesa que encuentres pueda darte todo lo que yo no pude, y sobre todo, no rompa tu corazón.
Este tiempo fue un sueño vivido, recorrido entre mariposas y praderas llenas de tu perfume, tu aroma, y es el recuerdo que guardaré para siempre recordar.
Te amo, te amo, y no me cansaré de repetirlo.
Tengo un hueco en el pecho que lleva tu nombre, te perdí, te deje, te retengo, te quiero conmigo pero no puedo.
Anoche no pude dormir, mis ojos se secaron de tanto llorar sobre mi almohada, mi cama está mojada y no es más que por el mar de lágrimas que cause por mi decisión, siempre soy yo, y tienen razón.
Siempre fuiste el bueno de la historia, y nunca dejes de serlo.
Creciste tanto que no quiero que pierdas ese proceso.
Miraré distante desde otra ventana tu vida y tus alegrías, me contentaré por tus éxitos aunque no pueda abrazarte en las derrotas.
Al chico que me amó, le deseo todo lo bueno en este mundo, más amor real para que seas feliz, te deseo tantas cosas buenas, nunca dejes de ser así.
Si tuviera que describirte no me alcanzarían las hojas ni las letras, pero te describo como perfecto, el hombre que todas queremos.
Mi respiración es corta, no siento que respiro, tengo un clavo dentro de mi estómago y ni siquiera tengo apetito.
Toda la noche te soñé, entre cortado todos los sueños, pesadillas, te ibas, me decías que no querías que fuera tu amiga, que te lastime, que soy inservible, no pude descansar... sabiendo que intente dormirme cuando te deje atrás.
Cargo una cruz que pesa más con cada año que voy adquiriendo, y lo seguiré haciendo, aunque me cueste la vida y sigas sin entenderlo.
Anhelo el día en que estemos sentados los dos en nuestro sofá, mirándonos sonrientes, y que me digas: "Tardó, pero se dio".
Al chico que me amó, al que tanto amo, a mi mejor amigo, a mi persona especial, a ese que daría mi vida por salvarlo, a ti, que me hiciste sentir tantas cosas sin fin.
Siento que te desvaneces entre la pintura gris, un lienzo qué pintamos a mano. Siempre pensé que tenía colores radiantes como la vida, pero creo que era un problema de visión mia.
Al fin y al cabo la que más te lastimo fui yo, y perdon, no es algo que hago a propósito. Espero que me entiendas, y si quieres, quédate, sino; lo entenderé perfectamente.
Todavía recuerdo tu sonrisa cuando estabas debajo mío, me dijiste que eras feliz, y te emocionabas como siempre haces. Nunca me sentí tan alegre como esa vez, ¡por fin había hecho algo bien!
Que lastima, lo arruine, como cada vez que toco algo y lo dejo caer.
Al chico que me amó, gracias, y perdon.