Vlog De Un Desgraciado

Entrada 15. Nubes

Que tema más raro para hablar ¿No? Las nubes ¿Qué tienen de especial las nubes para hablar de ellas? Yo os lo diré, mis pequeños lectores.

NADA.

—¿Entonces por qué hablas sobre ellas, Unknown-Sempai?.— Me interrogas con esos grandes y profundos ojos tiernos que haces llegar hasta lo más profundo de mi ser (¿El corazón? No el hígado si te parece, deja mi romanticismo en paz, payaso).

—Porque su fina consistencia esponjosa me recuerda a tu hermosa sonrisa.— Te dedico una amable sonrisa.

—Eso es lo más cursi que has dicho, gilipol—

Ejem, ejem, estamos teniendo unos pequeños fallos técnicos, les dejamos con unos segundos de publicidad engañosa que no paga a Unknown por jodidos hijos de puta y ahora volvemos.

"¿Cansado de que la sociedad sea una mierda? ¿Tienes que aguantar todos los días al gilipollas de turno haciendo el subnormal? ¿Te levantas cada mañana y te dan ganas de estrellar el móvil contra la pantalla del portatil para que los dos colisionen al ver gente estúpida con sus frases motivadoras que no sirven de nada? ¿Estás leyendo esto con voz de presentador de televisión? Jaja, que gilipollas eres.

Compra ya la nueva pistola tres mil para acabar con tu vida, le harás un favor al mundo."

¿Por qué estoy haciendo esto? ¿Qué estoy haciendo con mi vida? Esa puta pistola la tendría que comprar yo para acabar con mi triste existencia.

—No te rayes y continúa la puta entrada, puto.

...

¡Las nubes!

—Eso, muy bien, actúa como que nadie te está apuntando con un tirachinas para obligarte a escribir esta puta basura, y todo saldrá bien.

...Help me.

—¿Has dicho algo?

Nonono, ¿Yo? No he dicho nada...

—Mejor, ahora continúa antes de que me de algún nervio raro y ya no haya Unknown para escribir entradas.

....

—Rápido, ya estás tardando.

¡Las nubes! Las nubes son... son... son blancas.

—¿Enserio crees que eso es suficientemente bueno, chaval?

¡Y también puedes inventar que en ellas ves formas! Colores no, si vieras las nubes de color verde o rosa quizá deberías plantearte cuán lejos estás llegando con tu adicción a las galletas de animalitos.

—Te salvas esta vez, pero recuerda con quién estás tratando. Ándate con mucho, mucho cuidado.

...B-bueno, como iba diciendo voluntariamente sin que nadie atiente contra mi vida o amenace con matar a nadie querido de mi círculo social para ello, con las nubes puedes jugar a ver formas e incluso, puedes decirle algo romántico a tu persona más amada.

—Unknown, mira esa nube.— Me señalas una nube blanca que flota tranquila por el cielo.— Tiene forma de corazón.— Sonríes con ternura.— Te la dedico.

Claro, ahora mí me pones en un enorme compromiso ¿Cómo voy a decirte que en esa puta nube que me has señalado lo único que veo es una cabeza decapitada? Peor todavía, ¿Cómo te voy a dedicar eso de vuelta?

—Pues mira, amor, a mí me parece que tiene más forma de una cabeza recién cortada de por la mañana, si me dan a elegir, diría que es la cabeza de tu padre, que siempre me mira feo cuando voy a comer, y te la dedico con mis mejores deseos de que se muera el muy puto.

—...

¡No! ¡No puedes decir eso! ¿Cómo vas a decir eso? Pero es que es verdad, yo no sé cómo lo hago, pero todas las nubes se me figuran con formas sangrientas y sádicas. Aunque pensándolo bien, eso sirve para mandar a los pesados a la mierda.

—Con todos mis respetos.— Comienza a decir y nada más hacer ese movimiento con la boca tan molesto llamado habla, supe que lo que va a seguir no es nada bueno.— Me pareces un gilipollas, pasiva, cuerpo de uke violable y tus chistes no tienen ni puta gracia, sube lemon cabrón.— Continúa diciendo.— No te lo tomes como algo personal.

—Con todos mis respetos.— Imito su primera frase.— ¿Ves esa nube de allí?

—¿La blanca?

—Sí, esa. Pues tiene la forma de tu puta boca estallando en miles de pedazos deformando para el beneficio público esa cara de gilipollas que tienes.

—...

—Pero no te lo tomes como algo personal.

Sí, suena bien, no sé vosotros, pero yo probablemente empezaré a usarlo para deshacerme de las personas que no me apetezca tener cerca mía, parece un buen método.

Las nubes también pueden ser usadas como whatsapp. Bueno, para explicarlo mejor, para enviar mensajes en el aire, o eso dice al menos un libro que he leído cuyo nombre no voy a decir porque no me han pagado (en realidad voy a hablar de él junto con otros libros en otra entrada).
En dicho libro literalmente hay una parte en el que el protagonista comenta que él y su novia se habían inventado un código para enviarse mensajes con las nubes.

A ver, ¿Eso como va? ¿Si tiene una forma o es más grande dice una cosa y si es más pequeña, otra? No lo entiendo, de verdad, no lo entiendo. Y las nubes ya están formadas ¿Cómo eliges que nubes sí le envías o entran en el mensaje o cuáles, no? Bueno, elegirlas tú es la parte más sencilla, ¿Cómo sabe la otra persona qué nubes entran en el mensaje o cuáles has elegido tú? Porque a ver si tú le estás diciendo «Te amo mucho» y ella está leyendo «cuánto te odio, mataré a toda tu familia». Más allá de eso ¿Cuándo sabes si te está mandando un mensaje?

"Estabas muy feliz. Ese día estabas muy feliz, pues tenías una cita con tu novio y ver el rostro de alguien tan genial, sexy y sensual como Unknown siente te ponía del mejor humor.
Estabas sentado en el banco del parque, observando las nubes por si tu novio te mandaba algún mensaje, ¿Whatsapp? Eso está sobrevalorado, tú y tu amado os mandabais mensajes con nubes, cosa, por supuesto, mucho más práctica. En el cielo leías puros «Te quiero» y «Ya estoy llegando», era tan romántico y caballeroso.

Pero tu caballero no llegó aquel día.

Despechado fuiste a reclamar a la puerta de su casa, llamaste al timbre y esperaste de brazos cruzados a que abriera la puerta. Cuando lo hizo, no había ni rastro de culpabilidad en su rostro, eso te molestó más.

—¿Cómo me puedes hacer eso?.— Preguntaste enojado.

—¿Eh? ¿Qué cosa?.— Que se hiciera el tonto te puso de los nervios.

—No finjas que no sabes nada.— Lo fulminaste con una mirada matadora.

—¿Fingir qué?

—Lo sabes.

—Todavía no he adquirido mi título de mago profesional.

—Agh.— Te desesperó su forma de actuar.— Me citaste en el parque a las cinco y son las ocho y, por si no fuera poco que me dejaste plantado, me has estado enviando mensajes de amor en las nubes ¿Para regodearte, imbécil?

—Llevo sin escribir nada en las nubes desde hace una semana.

—...

—..."

Y ahora vendrá el imbécil de turno a decirme «Pues a ver, Unknown, nubes será una manera de decir marcas de humo». No, no, no, amigo, no sabes nada. Ya no sólo que no hablan de nada de humo en ninguna parte del libro, además de eso ¿Tú crees que unos adolescentes se van a someter a la vergüenza de ponerse a hacer gilipolleces con humo en mitad de Madrid? Porque la historia se sitúa en España, Madrid, y Madrid al ser capital está lleno de gente. «Pues Unknown, lo harán desde sus casas». Sí, seguro, qué gracia. Tú ponte en tu casa a encender una fogata o cualquier mierda para hacer señales de humo, a ver si tu madre está contenta.

—Bueno, ya cállate imbécil, que ya lleva esto más de mil palabras y es una puta entrada sobre las nubes, no te emociones, gilipollas.

...