Pasado el tiempo

12 0 0
                                    

Han pasado dos meses, dos meses super intensos en Londres pero a la vez unos de los mejores, por supuesto he extrañado a Lucas, a Javi,a mamá, a mis amigas, incluso a Alex que bueno me prometió estar ahí cuando volviese. Ahora mismo voy hacía el aeropuerto donde despegará mi avión para volver a casa, estos meses alejada me han hecho muy bien para olvidar ciertas cosas , y por suerte ahora estoy totalmente despejada soy una persona nueva.

Cuando llegué, Lucas y mamá me estaban esperando con una pancarta enorme que decía "Valeria te queremos" como una niña pequeña me puse a llorar de la emoción, como bien os he dicho antes, llevaba dos meses sin ver a las personas que más quería en el mundo, me hacían tanta falta.

Pasadas unas horas desde que llegué no conformes con la pancarta me prepararon una fiesta sorpresa en la playa, pero bueno es que son los mejores, habían reunido a media ciudad en serio, perdonad que sea pesada jamás me podré cansar de decir que son maravillosos. No paramos de abrazarnos, hasta regalos me dieron por volver a estar con ellos, y mi mayor sorpresa fue que Alex seguía allí, nos abrazamos y no se que pasó, para ser sincera su abrazo me hizo volver a estar en casa, sabía que Alex era especial para mí, bueno al igual que Lucas, pero es que eran dos sentimientos muy diferentes, o sea, ambos eran mis amigos pero Alex abrazaba con tanta ternura que hacía que todo se me olvidara, Alex digamos que tiene magia y sí, lo conozco de hace poco pero bueno muchas veces no tienes porque conocer a las personas desde hace mucho tiempo para saber como son, sino pararte mirar a los ojos y bueno dejarte llevar por sensaciones, yo por lo menos lo hago y siento que así llego a la gente de una manera especial, así como todo el mundo debería hacer, muchas veces nos dejamos llevar por simples comentarios, muchos de ellos malintencionados por parte de la gente, y quien nos dice a nosotros que son ciertos. Por eso hay que dejarse llevar por sensaciones, para no perder la oportunidad de hacer lo que tanto queremos y a lo que tanto tememos, mi consejo desde aquí sería que hagamos caso al corazón, porque de verdad que importa lo que diga la gente, que importa lo que diga el mundo si la felicidad es solo nuestra y somos nosotros la que tenemos que construirla, pero oye que si todo sale mal una vez que arriesgamos, pues ya tenemos una experiencia más y seguro que para la próxima no nos pasa de nuevo y así con todo, la cuestión es arriesgar.

Ese día fue maravilloso cuando llegué a casa estaba cansada y solo deseaba abrazar a mamá y dormir por fin en una cama cómoda, la de Londres no era muy cómoda que digamos y como siguiera ahí una semana más me iba a matar, bueno era hora de dormir y finalizar este día pero eso sí con mucha emoción y felicidad.

-----------------------------------------------------------------------------------------------------

BUENAS!!! Como he contestado antes a un comentario solo os pido paciencia, prometo subir pero es muy difícil compaginar esto con trabajo y demás, aparte se me rompió el ordenador y tengo que ir a la biblioteca si quiero escribir, perdonadme y espero que os guste.

La señal del destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora