Capítulo IX

632 56 10
                                    

Capítulo IX: "Mar azul"

Dos días habían pasado desde la propuesta de matrimonio del rizado al rubio, al día siguiente John se había mudado con Freddie debido a que quería darle privacidad a su hermano con su pareja y vivía con su novio debido a que ninguno de los mayores dejarían que viviera solo y como buen novio acepto la propuesta de su pareja.

Brian y Roger estaban en el patio trasero de su casa esperando a sus respectivos hermanos.

— Muy bien es hora de planear una boda, queridos –dijo Freddie al llegar, estaba realmente ilusionado por la unión de su hermano y cuñado.

— Hola chicos ¿Qué tal? –saludo John.

— Con calor –respondió Roger moviendo una de sus manos como si fuera abanico.

— ¿Estás caliente rubia? –pregunto Freddie con picardía.

Brian y John soltaron una carcajada al ver lo sonrojado que se encontraba Roger.

— ¡Cállate Fred! –grito el rubio.

— ¡Muy bien a planear una boda! –exclamó Freddie.

— Cariño, tranquilo estas son decisiones de Roger y Brian –dijo John tocando el brazo de su novio.

— Es que... Yo solo quiero ayudar –dijo Freddie como niño regañado.

John miro a su novio con ternura y lo beso para transmitirle tranquilidad.

— ¡Se separan! –grito Roger mirando a su hermano.

— Ah Roger tú has hecho cosas peores con Brian frente a mí –le dijo el menor.

Roger se volvió a sonrojar hasta la base de su cabellera rubia.

— Muy bien... empecemos –ahora fue Brian el que habló.

— Sí, hay tanto que planear, la fecha, el vestuario, Rubia tendrás que cuidar tu figura para usar el vestido –dijo mirándolo– ¿Qué más falta? Así... la ubicación, los platillos, el pastel, la música, las invitaciones, el entretenimiento... –decía Freddie, mientras se alejaba de los chicos para entrar a la casa.

— Esto será muy largo –aviso John a su hermano y cuñado

Quiénes suspiraron con cansancio.

— Hasta parece su boda –dijo Brian.

+

— ¡Despierta! –Grito Freddie tratando de despertar a Roger– ¡hoy es el gran día! –dijo sacudiendo el cuerpo del rubio.

Un año había pasado, era la boda del rizado y el rubio y Freddie se había encargado minuciosamente de que todo estuviera perfecto.

Desde la semana anterior Freddie le había prohibido a Roger dormir con su prometido, casi nunca los dejaba solos y la noche anterior había enviado a Brian a la casa de Roger, bajo el cuidado de John, mientras Roger se había quedado con él en su casa, para prometidos estaba más que claro que Freddie era muy fiel a la tradición de su familia y ninguno podía oponerse a lo que esté decía.

El rubio se levantó con pereza y miro a su amigo, quién estaba sacando el traje de Roger, ya que no había convencido al rubio de que usará un bello vestido que él mismo había elegido.

— ¡A la ducha querido, vamos! –dijo moviendo sus manos en señal de apresuró.

El rubio fue arrastrado por Freddie al cuarto de baño y salió a buscar su propio vestuario.

Minutos después Roger estaba frente espejo simplemente con su pantalón blanco, mirándose y preguntándose: ¿él era suficiente para Brian? Se sentía inseguro y triste, nunca en su vida de había pasado algo así.

El Chico De Humo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora