El Chico De Humo.

Capítulo XI

Capítulo XI: "El Tiempo"

El castaño estaba recostado en su cama junto a Freddie, quién lo sujetaba fuertemente, impidiéndole separarse de él y la verdad es que no lo quería y tampoco lo haría.

Miró cada centímetro del rostro de su amado, se podía notarse el paso de los años en él, su cabello negro estaba siendo conquistado por canas, en su rostro había líneas de expresión, bajo sus ojos había bolsas causada por el cansancio, sus labios seguían igual de carnosos y llamaban su atención como el primer día, el bigote había sido retirado de su rostro. Podía sentir la respiración relajada de su amado contra su cuello, veía como su tórax subía y bajaba de manera lenta, el cuerpo del mayor seguía siendo igual, buena postura, complexión delgada y sumamente envidiable.

John amaba ver a Freddie dormir, pues lo hacia ver tan adorable e indefenso y él estaba dispuesto a defenderlo de cualquier cosa.

Aunque seguía sintiéndose culpable de haberse separado de Freddie por tanto tiempo.

Suspiro y se acurrucó contra él.

— Sigues siendo sumamente hermoso –susurro contra su cabello.

— Al igual que tú –respondió el mayor, haciendo que el castaño se asustara.

Freddie beso a John para calmarlo.

Freddie se colocó sobre John, mientras le seguía besando, ambos ya podían sentir el desesperó, el menor coloco las manos sobre la cintura del mayor y empezó a acariciar su espalda de arriba a abajo constantemente.

Freddie acariciaba el pecho del menor y le repartía besos en los labios, para después bajar a su cuello, lugar donde besó, lamió y mordió dejando marcas en éste, podía escuchar como el castaño suspiraba y sus caricias aumentaron de intensidad.

John jalo a Freddie de los cabellos sin lastimarlo, para obligarlo a que lo besará y con la otra mano le sujetaba fuertemente uno de sus glúteos.

Ambos estaban tan concentrados en su mundo que nunca notaron cuando la puerta se abrió y por esta entro Richard.

— ¡Ah! –grito el pelinegro menor al encontrarse a sus padres en una situación tan íntima.

La pareja se separó al escuchar el grito, el mayor se bajó del cuerpo de John y se cubrió con él, mientras este cubría su rostro con sus manos ocultando su sonrojo en tan bochornosa situación.

El menor miró como su padre John cubría su rostro, parecía un niño pequeño, por lo que podía averiguar es que sus padres estaban celebrando su reencuentro.

— ¡Richard! ¡Vete! –grito Freddie a su hijo, el cual trataba de no reírse de la reacción de sus padres.

— ¿Papá? –dijo Richard llamando la atención del castaño, quién seguía cubriendo su rostro.

Richard sacó su celular con la intención de grabarlos.

— ¡Que te vayas! –grito Freddie antes de lanzarle una almohada.

Richard evitó por poco el tiro de su padre y salió corriendo de la habitación, cerrando la puerta tras él y nada más salir soltar una estruendosa carcajada.

Freddie volvió su mirada a su esposo y pudo notar como trataba de ocultar lo sonrojado que se encontraba... una imagen sumamente tierna desde su punto de vista.

El castaño retiro las manos de su rostro y rápidamente abrazo a Freddie, escondiendo su rostro el pecho del mayor para ocultar lo avergonzado que estaba.

— John –susurro Freddie, acariciando cabeza del menor.

El nombrado no respondió, solo se acercó aun más a Freddie.