22.- Y Dos Terrones De Azúcar

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Había pasado casi un año desde la partida del teñido, Tyler estaba cada vez más ensimismado, había días en que no comía bien y se encerraba en la habitación qué era del mayor, mantenia la esperanza de un día verlo cruzar aquella puerta, al finalizar cada día, marcaba al número del mayor y dejaba un mensaje de voz o enviaba un mensaje contándole todo lo que había hecho en el día.

-Vamos Ty, solo será un rato, van a ir todos, a demás la seguridad en el lugar es muy eficiente, hablaba la morena tratando de convencerlo.

-Sabes que no tengo ánimos de salir Cam, dijo y agachó la cabeza.

-No puedes solo quedarte en casa Ty, anda, ve a darte un baño, voy a buscarte un atuendo genial, lo tomo del brazo tirando de el para levantarlo.

-Si voy contigo esta noche, me dejarás quedarme encerrado en casa el resto del mes?, la miró haciendo una mueca.

-Si, lo prometo cariño, así que anda, ve a darte un baño, le sonrió.

Tantas veces en que la morena había insistido para que el menor saliera de aquel departamento y su rutina del trabajo a casa y viceversa habían rendido frutos, el teñido no había respondido a ningún mensaje o llamada, tampoco tenia noticias de él, solo le quedaba aquel espacioso departamento y el olor de su cama.

-Cam, creo que después de todo no tengo ánimos de salir, decia mientras entraba a la recamara.

-No vas a hacerme esto Tyler, ya escogí tu atuendo así que, voy a salir y tu vas a cambiarte, ya están todos en el bar, Lauren vendrá por nosotros así que date prisa, espetó saliendo de la habitación.

Después de un rato Tyler salió, haciendo un puchero, traía una camisa rosa de manga corta, unos jeans negros y vans del mismo color.

-Cariño quita esa cara, animate un poco, en todo este tiempo no has salido de este apartamento, lo tomo de las mejillas.

-Entiendo Cam, no tienes que preocuparte, estoy bien y seguro un rato fuera de casa puede animarme un poco, le sonrió ligero.

La ojiverde ya había llegado frente al edificio, esperando a ambos chicos encendió un cigarrillo, una vez los vio salir, encendió el auto y ambos subieron.

-Qué bueno que te animaste a salir Ty, mi chica ha estado preocupada, se que debe ser difícil todo este tiempo, lo miro desde el retrovisor.

-Yo no se que hubiese sido de mi, si ustedes no estuvieran aquí, dijo y suspiró.

-Ty, Ty.., esta noche no es para suspirar, vamos a beber un poco y a bailar, la morena se giró hacia los asientos traseros.

-Lou, crees que el va a regresar?, en una semana cumpliremos dos años de habernos conocido, dijo y agachó la cabeza.

-El puede ser un idiota, pero no te abandonaría, el no es así, se que va a volver, es solo... Que esta es la primera vez que siente miedo, dicho esto, detuvo el auto habiendo llegado al lugar.

Tyler solo asintió mientras sonreía, esa noche planeaba disfrutarla, quería por un momento sentirse bien, divertirse un poco, entro al lugar y por primera vez, comenzó a bailar al ritmo de aquella estruendosa música hasta llegar a la barra, ahí estaban Matty, Ruby y Mark, la chica como siempre se abalanzó sobre el en un gran abrazo, el rizado solo sonreía.

-Por fin te vuelvo a ver pequeño Ty, Como has estado?, pregunto Mark con una copa en la mano.

-Hoy estoy mucho mejor, aunque como siempre, lo extraño demasiado, sonrió falso.

-Querido, podrías dejar de hablar del tema?, el pequeño hoy vino a pasar un rato agradable.. No es así Ty?, dijo la azabache entregándole un vaso con vodka y jugo de arándanos.

Incubus [joshler] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora