Una pieza

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Cómo siempre Jeno despertó con el sonido de la alarma de su celular, su rutina era la misma de siempre; se levantaba, se lavaba la cara, se cambiaba, desayunaba para después cepillar sus dientes y salir de su hogar.

Su escuela no estaba muy lejos pero tampoco muy cerca así que tenía que caminar por unos cuantos minutos.

Tranquilamente caminaba hacia su destino pero iba pensando sobre lo que había descubierto ayer, sin duda era cierto que el mundo suele ser un pañuelo.

Cuando te llega un mensaje de un extraño lo que piensas es que solo será una conversación con menos de cinco mensajes, pero ahora Jeno llevaba hablando más de un mes con Jaemin y en primer lugar, ¿Por qué siguió platicando con él?

A veces la rutina es tan aburrida qué tal vez una persona con su llegada puede cambiarla y ponerle un toque distinto.

Para Jeno era más que obvio todo. Jaemin le confirmo que el chico que vió ayer era DongHyuck, el novio de Taeil, eso quiere decir que él estuvo en su escuela y que entonces Renjun estudiaba ahí, no iba a ser muy difícil encontrarlo ya que era de su edad, lo buscaría y lo encontraría, pero... ¿Que ganaba con esto?, ¿Acaso Renjun solo era una pieza de su tablero de ajedrez para llegar hasta el rey?

Con tantos pensamientos en su cabeza llegó a la escuela y a su salón, al entrar fue recibido por su novia.

—Jeno —. La chica lo abrazo como si no lo hubiera visto hace más de un mes.

—Hola, linda —La rutina se repetía.

—Sabes, estuve pensando en que deberíamos comprar esos llaveros que hacen juego —. Algo que caracterizaba a Yang Mi era que hablaba mucho, pero su voz era relajante.

—Claro — Su novio solo le sonrió— Oye, ¿Sabes si llego algún chico nuevo?

—Mmm... Creo que sí, es un chico chino, ¿No sabías? De hecho es amigo de Jisung y Chenle.

—¿En serio? —Frunció el entrecejo.

—Sip, has estado algo distraído, ¿Todo está bien? —Su novia acortó la distancia que había entre ellos.

—Por supuesto, sabes cómo soy —Jeno aprovecho esa corta distancia y le dió un pequeño beso en sus labios, antes de que el maestro llegará y cada uno tuviera que ir a sus lugares.

En su lugar ya estaba Mark, lo miró y realmente no se veía bien.

—¿No has dormido mucho? —Le preguntó mientras el maestro anotaba cosas en el pizarrón.

—Mi hermana menor no me dejó dormir, es difícil cuidarla —Sus ojos demostraban cansancio.

—Puedo ayudarte cuando quieras, ¿Cómo le va a tu mamá en su nuevo trabajo?

—Muchas gracias. Supongo que bien, realmente llega muy cansada y lo menos que puedo hacer es ayudarle.

—Eres un buen hijo —Jeno le dedicó un sonrisa.

—¿De que lado estás?, A veces me fastidia que seas así —Al parecer el Mark grosero había regresado.

—No estoy de ningún lado, solo quiero que estés bien, ¿Crees que a tu mamá le gustaría saber cómo te estás comportando?

—Agh, sí quieres mi bien, simplemente no te metas y mantén tu distancia de mi vida —Se volteó hacia el pizarrón.

Mark no era un mal chico, el era  buena persona, de cierta manera Jeno entendía que el necesitaba algo más. La vida era así, no todo siempre iba a hacer color de rosa.

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—Nos vemos más tarde —. Jaemin se despidió de su madre al bajar del auto e iniciar un nuevo día en esa escuela llena de “idiotas”.

Wrong number || Nomin (Chats) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora