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Tony entró a la torre, venía de una reunión de Shield. Fury quería hablar sobre quien iba a ser el nuevo líder en los Vengadores, antes él hubiera estado feliz de aceptar ese lugar, pero ahora no, eso significaba reemplazar a Steve y no quería eso.  

Se dirigió al salón donde sabía que iba a estar el rubio y ahí estaba. Acostado en el sillón leyendo un libro, prácticamente cada día leía un libro nuevo, no le extrañaría que se hubiera leído más libros que él en toda su vida.-Hola, anciano.

Steve bajó el libro y le dio una sonrisa algo cansada.-Hola. ¿Qué tal fue todo?

-Bueno, oficialmente los Vengadores tienen como líder a Romanoff. Eso asusta.

-Oh.-El rubio suspiró. Tony sabía que su chico se encontraba mal por eso, él había sido el líder todo ese tiempo y era bueno siéndolo, lo sabía.-Sé que ella hará las cosas muy bien.

-Lo sé.-Tony se sentó en el suelo al lado del sillón, tomó la mano del rubio. Sonrió viendo como su mano cubría casi toda la de Steve, esa diferencia de tamaño era tierna, sin duda.-Te extrañé en esa reunión, son divertidas cuando puedo molestarte con mi adorable personalidad.

El rubio se rió.-Tu personalidad no es adorable, no en esas reuniones, Tony.

-¿Lo dices porque hago que te enojes?

-Siempre decías algo para verme enojado.

Tony se rió y besó la mano del rubio.-Es divertido. Esa mirada que me das como diciéndote "vete al infierno", pero no lo decías porque eres demasiado bueno para maldecir ¿No es así?

-Si puedo maldecir, Tony.

-Mentira.-Tony acarició los nudillos del rubio con su pulgar.-Tu boca no puede ensuciarme con maldiciones, cariño.-El castaño suspiró.-¿Quieres cenar hoy conmigo? Sé que no podemos salir, eso sería arriesgado, lo sé, pero puedo pedir un poco de comida china y comeremos juntos, solos, yo...-Desvió su mirada hacia cualquier lugar para no ver a Steve.-le pedí a los demás si nos podían dar este día solos. Todos aceptaron, así que hoy somos tú y yo, nuestra cena. Ya sabes, una cita. ¿Quieres eso? Porque si no quieres puedo ir y pedi...-

-Me gustaría una cita contigo, Tony.-Una de las pocas que tendremos. Steve sonrió un poco mirando al castaño.-En verdad, me gustaría mucho.

-Bien.-Tony sonrió mirándolo.-Tendremos una cita entonces.

******

Loki miró a su alrededor, el lugar estaba lleno de arboles y gente. ¿Por qué había tanta gente?

-Estás mirando mal a todos. ¿Por qué?

-No me gusta la gente, bueno, me gustan cuando me están alabando o arrodillados declarándome su líder, pero no de esta manera.-Loki rodó los ojos.-¿Por qué tengo que pasar todo el día contigo, Thor? Yo sólo quiero estar lejos lo más posible de ti. Me das asco.

El rubio lo miró de reojo con una leve sonrisa.-¿Te doy asco? ¿Entonces porque me besas de esa manera, Loki? No parece que me odiaras en ese momento.

-Thor, puedo engañar a cualquiera, lo sabes.-Loki lo miró.-Podría ir a besar a cualquiera y esa persona creería que lo amo. Tal y como pasó contigo, idiota.

-Si, cualquiera podría creerte eso, pero yo no.-Thor tomó el brazo de Loki y lo acercó a él.-Deja de mentirme y deja de mentirte, Loki, sé que sientes algo por mí.

-Odio.

-Es algo igual de apasionado al odio, pero totalmente distinto.-El rubio acarició la mejilla del menor.-Loki, ¿Por qué no puedes darme una oportunidad?

-¿Una oportunidad para qué, Thor?-El menor negó.-¿Para que luego llegue alguien más y decidas irte con esa persona? Tú y yo sabemos que las personas como yo no tienen buenos finales, Thor.-Loki suspiró.-La gente como Rogers merece una buena vida, pero obtiene lo contrario, las personas malas deben tener cosas malas, Thor, así que no estaré contigo.

Thor bufó.-Me dices que no, ¿Sólo para castigarte a ti o a mí?

-A mí. Tú mereces una jodida persona buena, yo no tengo nada de bueno. No estaré contigo, Thor.

-Te amo. ¿Eso no debería ser suficiente para ti, Loki? ¿Qué importa el pasado?

Loki negó. Se acercó al rubio, acarició la mejilla del mayor.-Lo que sucede es que ese no es mi pasado, Thor. Este soy yo y probablemente seguiré siendo yo durante mucho tiempo. No puedes cambiar eso.

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Tony sonrió.-¿Qué dices?-Apuntó la mesa decorada con algunas velas y con la comida china colocado en varios platos de diferentes tamaño.-Es la primera vez que preparo algo así, no te burles, anciano.

-No me burlaré, Tony.-Steve sonrió viendo todo.-Es muy lindo.

-¿Tú crees? Sinceramente, es la cosa más cursi que he hecho y es raro. Steve, yo no hago estas cosas, si hice algunas con Pepper, pero más la jodí con ella en vez de hacerla feliz.

El rubio negó.-Sé que la hiciste feliz.-Steve se acercó a él.-Gracias por esta cena, Tony, es un gran detalle.

-Todo para mi rubio favorito.-Le guiñó un ojo.-¿Cenamos?

La siguiente media hora se la pasaron hablando sobre algunas cosas de le empresa de Tony, sobre la vida de Steve antes de esta época, se conocieron aún más en ese tiempo.

Tony se rió.-¿En serio no sabes bailar?

-No.-¿Por qué Steve parecía nostálgico de pronto?-Yo... Iba a tener un baile con Peggy y luego pasó lo de...-

Tony borró su sonrisa.-No tuviste el baile.

-Exacto. No pude llegar a nuestra cita.-Steve suspiró.-Así que no hubo baile.

-Oh.-El castaño suspiró. Sabía cuan importante era su tía Peggy para Steve, sabía que nunca podría ocupar ese lugar en el corazón del rubio. Él sólo era la clase de persona que destruía lo que tocaba y su tía Peggy, bueno, ella era capaz de cualquier cosa.-Lamento eso.

Steve apoyó su cabeza en su mano y se quedó mirándolo.-Tony.

-¿Si?

-Sé que probablemente yo... quizá nunca sientas por mí lo que sentías por Pepper, ella es grandiosa y yo soy... esto.-Steve negó.-pero, yo...-El rubio lo miró.-¿Bailarías conmigo, Tony? Sé que puedo ser un desastre en ello, pero yo en verdad quie...-

-Claro que quiero bailar contigo, Steve.-Tony se paró de su silla y extiende una mano hacia el rubio.-Steve Rogers, ¿Me concederías este baile?

Steve sonrió mientras toma su mano.-Acepto es baile, Tony Stark aunque no hay música.

-Eso se puede arreglar.-Tony besa su mejilla.-Jarvis, pon un poco de música.

La canción "Lay Me Down" de Sam Smith comenzó a sonar.

Tony comenzó a balancearse lentamente tratando de fundirle seguridad al rubio. Dejó que su cabeza se apoyara sobre la de Steve, dejó un leve beso en su nuca.

-Steve, quisiera que te quedaras conmigo cada día de mi vida.-Cerró los ojos luchando para que su lágrimas no cayeran.-Quisiera tanto eso.

El rubio apoyó su cabeza en el hombro del menor.-Lamento no poder hacerlo, Tony. Lo lamento mucho.

"El Verdadero Tú"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora