Esa noche no quería pasarla solo. Sentía su pecho ahogado en la soledad y no pudo hacer otra cosa que ponerse nostálgico.
Su estómago seguía demandando comida, no por nada llevaba casi doce horas sin ingerir alimento pero ahí estaba, tirado en el sofá viendo al techo mientras extrañaba su celular y su música, sobre todo su música.
Estaba aburrido y él mejor que nadie sabía que si encendía el televisor lo único que vería serían programas basura o esos típicos programas de concurso que sólo a las ancianas les gustaban.Optó por distraerse lavando su ropa y se desvistió al instante. Sólo que quedó en un llamativo boxer rojo que dejaba poco a la imaginación y se dirigió a su habitación por el resto de la ropa sucia.
Mala idea andar por ahí semidesnudo en un día de invierno pero no le tenía a ninguna enfermedad, Katsuki Bakugou era un chico sano y en forma.Se vistió con un pijama bastante básico y siguió con su labor.
La pequeña lavadora con capacidad de 15 kg de ropa comenzó a hacer el típico sonido de estarse llenando de agua, pero incluso ese ruído no llenaba el vacío.
Volvió a pensar en Uraraka Ochako, vestida con ese vestido escolar de los años en los que la conoció.
"¿Qué estará haciendo ahora?"- Reflexionaba.-"seguramente debe estar en su habitación calentita, en su casa de un millón de dólares esperando a que su cena de niña rica esté lista". Chasqueó la lengua, pues ahora el hambre había vuelto pero por lo menos eso lo distraería del vacío, el frío y de Uraraka Ochako.Tomó la desición de bajar a comprar algo para cocinar, y así no tendría que estar más en ese departamento tan enorme.
La tienda estaba cruzando el parque, a una cuadra de ahí.Finalizada su compra, y cargando dos bolsas repletas de comida, siguió pensando en qué podría cenar.
El curry no era mala idea, pero era demasiado trabajo y no quería fastidiarse a si mismo y a pesar de todos los contras que este alimento tenía, fue el ganador.Llegando de nuevo a su piso, a fuera de su departamento estaba su vecino del piso de arriba, Sero Hanta quien también era de su edad y amigo de la facultad de Eijiro Kirishima.
-¡Usurero!-Le exclamó, ya que Bakugou solía prestarle dinero a él y a otros amigos de Kirishima (y al propio Kirishima) con demasiada frecuencia.
-Ya te dije que no te prestaré más dinero hasta que me hayas pagado los cinco mil que me debes, cara flaca.
-¿Enserio son cinco mil dólares lo que te debo?-Preguntó el joven con cierto nerviosismo.
-¿Te enseño mi libreta?-La libreta era el objeto más temido entre los deudores de Bakugou.
-¡No! Te creo, Usurero... pero no estoy aquí por eso mira, mis padres me enviaron esto: es un pequeño calentador que, aunque no es la gran cosa, te ayudará a no morir de frío.
-No te lo voy a comprar.-Respondió tajante.
-¡No te lo iba a vender! Te iba a preguntar si querías que te lo prestara.
-¿No era regalo de tus padres?
-Sí, pero yo compré uno hace días. Te prestaría ese pero es más grande y difícil de mover.- Bakugou lo pensó por un momento pero cuando estuvo a punto de rechazarlo Sero le habló.- es un poco ruidoso pero calienta bien, ya lo probé.
-Me lo quedo.-Respondió mientras bajaba una de sus bolsas y lo tomaba a la fuerza.
-¡Tranquilo, Usurero! Oye, cambiando de tema, ¿quién de todos te debe más dinero? Sólo por curiosidad.
-Si quieres saber que tan jodido estás, eres el segundo que más me debe. Sólo te gana el idiota del pelo de mierda que está endeudado conmigo desde que estudiábamos la secundaria.- enmudeció un momento.- gracias por prestarme esta baratija.- agradeció ocultando su amabilidad y entró a su departamento, sin esperar respuesta de Sero.
No estaba acostumbrado a tener ese tipo de amabilidades con nadie ni menos que fueran amables con él y de un momento a otro, volvió a abrir la puesta con la esperanza de decirle algo a Sero.
-¡Oye, Cara flaca! Voy a hacer curry, ¿quieres cenar conmigo?-le costó decir aquellas palabras, otra vez, ser amable sin fingir no era lo suyo.
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Las Diferencias Entre Tú & Yo.
FanfictionUna estudiante de medicina. Un ex-estudiante de arte. Ella es tranquila y sonríe mucho; él es un pesimista y nihilista que odia todo lo que se mueve, está cansado de vivir, de su monotonía. A causa de un incidente en el tren, volverán a encontrarse...