The Same Heartbreaker (2) ✔️

10. Liam

→Capítulo editado.

10 | LIAM

—Finalmente en Portland —suspira Aggie exhausta. Como si no hubiera dormido durante la mayor parte del vuelo y no hubiéramos tenido camas como asientos.

Nick camina a su lado, cargando los bolsos de Aggie sin quejarse. Juro que ese chico iría hasta el fin del mundo por ella.

Tyler encuentra su equipaje y pronto estamos saliendo del aeropuerto. Son las dos de la tarde, pero el día está nublado.

De nuevo estoy enfrentándome al cambio de horario. En Inglaterra serían las ocho de la noche. Y después de haber pasado meses en el otro lado del globo, presiento que va a ser difícil acostumbrarnos. Lo único bueno de esta situación es que solo estaremos aquí dos días. Lo único.

Volteo a ver a Agustine Monroe de reojo. Luce como si estuviera yendo a la semana de la moda en Milán, no como si hubiese estado en un avión durante diez horas. Sin importar que fuese primera clase, terminé hecho un desastre, pero Aggie logra mantenerse perfecta.

El tío de Tyler, quién es prácticamente como su padre, después de la muerte de sus padres cuando era pequeño, mandó autos para buscarnos. Por alguna razón, termino entre Nick y Aggie. Mientras que Tyler usa la última fila.

Miro por la ventana cuando empezamos a entrar a la ciudad. He estado en Portland una sola vez en mi vida —no es precisamente una gran ciudad turística— y fue cuando tenía nueve años. Acompañé a papá a una reunión de trabajo. Nos llevó a mi y a Blair. Olive no había nacido aún. Malcolm nos hizo conocer a todos sus socios y nos presumió con todos. Eran esos momentos en los que éramos una gran familia feliz y todo estaba bien. La estabilidad emocional que necesita un niño de esa edad.

Y pensar que Quinn vivió aquí toda su vida.

Estoy oficialmente en la misma ciudad que ella.

Apenas puedo admitirlo a mi mismo, y es que tengo miedo. Estoy nervioso. Detesto que hayan pasado meses y esa chica siga teniendo el poder de ponerme así. Detesto haber sido un iluso y haberle dado ese poder en primer lugar. Detesto que haya hecho lo que hizo, que haya dañado a mi mejor amigo, que no haya podido ver más allá de su orgullo y sus planes.

Recuesto mi cabeza contra el respaldo e intento distraerme cuando Nick empieza a hablar de un nuevo juego de PlayStation que salió ayer.

Es inútil. Mis pensamientos no se despegan de ella.

¿De verdad nos invitó? ¿Por qué piensa que vamos a poder arreglar las cosas? ¿Está dispuesta a pedir perdón? ¿O esto sigue siendo parte de su plan?

Soy un tipo que tiene que tener todo bajo control y saberlo todo, pero Quinn Meyer da vuelta mi vida. Como siempre.

El chófer estaciona al frente de The Nines Hotel. Malcolm se encargó de nuestro alojamiento. Aggie tuvo que empujarme para que me suba al avión, no iba a colaborar en nuestra peor pesadilla al contratar un hotel y paseos turísticos.

Uno de los trabajadores del hotel abre la puerta del auto, me bajo y dejo escapar un largo resoplido. No estoy contento estando aquí y se nota a kilómetros de distancia.

Tyler palmea mi espalda y me da una mirada de apoyo, no me olvido que para él también es una mierda. Pero tiene la madurez suficiente para estar aquí sin protestar. Esa madurez yo no la tengo.

***

A eso de las cinco, me vi tentado a dormir pero si lo hago, no dormiré en toda la noche y necesito adaptarme a este horario aunque solo sea por dos días.