Capítulo 3.

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-agarró mi brazo y me apuntó un número- No se lo des a nadie- me devolvió el boli y me guiñó un ojo- Adiós.

Miré el número y vi en el suelo una púa, me agache y la cogí delicadamente, sonreí, cerré el puño fuerte y me la metí en el bolsillo.

-¿Quien era ese que ha salido antes que tu?- me preguntó Cris.

-¿Quien? ¿Ese?- dije señalando- No le he visto en mi vida.

-¿Quieres ir luego a por un helado? Tenemos mucho de lo que hablar- dijo riendo.

-La verdad que si- contesté riendo.

-¿Que es eso?- me dijo mirando el número.

-¿Que? Oh si, esto... Esto es... El nuevo número de mi madre, por si se me olvida...- me lo tape sonrojada- Voy a ver si necesitan algo por ahi- dije alejandome de ella.

-Esta bien, yo cobraré a la gente! -me medio gritó.

-Valeeee- me giré y me choque con una chica.

-Uy, perdoname, no te vi, ¿estas bien?- dijo una voz dulce.

-Si si, fue mi culpa lo siento ¿y tú?

-Si, no te preocupes.

-¿Te puedo ayudar en algo?- sonreí.

-Bueno... Buscaba unos shorts azules claritos o algo por el estilo- dijo la chica mirando a todas partes.

-Claro, por aquella zona tienes shorts de todo tipo- dije señalando.

-Gracias, ____- dijo sonriendo mirando la chapita de mi camiseta.

-Para eso estoy...- dije esperando su nombre.

-Rebeca, me llamo Rebeca, encantada- se acercó a darme dos besos.

-Igualmente- la correspondi.

Fui a preguntar a más gente, y mi turno terminó. Cogí mis cosas y me cambié en el baño del centro comercial. Esperé a que saliera Cris e hiciera lo mismo y nos fuimos a la heladería.

-Uno de fresa por favor- le dije a la chica del mostrador.

-Yo uno de chocolate, gracias- dijo Cris por detrás.

-Pues tres euritos todo chicas- nos contestó amablemente la chica.

Rápidamente la di el dinero y eché las manos de Cris con el suyo para atrás, esta vez pagaría yo. Nos sentamos en una mesa y comenzamos a hablar.

-¿Como vas con tu bulling?- dijo girando mis muñecas.

-Bien, le prometí a alguien especial que no volvería a cortarme.

-Alguien especial ¿eh?- preguntó interesada subiendo las cejas continuamente.

-Si, y no te diré quien es- la saqué la lengua.

-Bueno... ¿Y que tal estos tres años? Cuando nos conocimos en España pensé que nunca te volvería a ver, jo, pero ya ves, ahora las dos en Londres y con el mismo trabajo- dijo riendo.

-Pues si... El destino- dije haciendo el mismo movimiento que ella anteriormente- Mierda- dije al ver como caía el helado a cámara lenta.

'I need you' (The Vamps y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora