Lee-ann
Ya habían pasado varios días desde que Keisi y Eimy habían tomado la decisión de salir del grupo, hemos estado buscando la dichosa base que había formado el gobierno para los pocos supervivientes que quedaron después del brote de el virus.
-Que es eso? Preguntó Caro señalando a una pequeña barricada que se mostraba a unos 50 metros de la auto pista, a la distancia se podían apreciar algunas siluetas humanoides.
-Seguro son unos cuantos zombies Merodeando el lugar, dijo Wanda con total pereza la cual estaba recostada en las piernas de Danny. Seguimos avanzando hasta que la barricada mostraba estar a diez metros de distancia, de pronto unas 6 personas salieron disparadas de los autos que estaban en llamas o destruidos por los disturbios, se posaron frente las cuatro puertas de la guagua y apuntaron a los integrantes del grupo.
-Algún herido, mordido o infectado por rasguño? Preguntó una chica al mismo tiempo que se quitaba el casco y dejaba ver un hermoso cabello rizado color azul con mechas negras.
-N...no, ninguna, dijo Kevin, se mostraba sumamente nervioso.
Nos pidieron que bajara mos del automóvil, lo hicimos, todos caminamos por un pasillo ancho donde las luces eran transmitidas por lámparas de pared, dimos vuelta a la izquierda y luego a la derecha dos veces hasta llegar a una pequeña sala, en esta había dos sillas y una mesa, en la parte frontal había una pared de cristal, de seguro para vernos mientras nos interrogaban. Nos preguntaron muchas cosas sin sentido al cual ninguno de nosotros teníamos respuesta.
-Vamos a proceder a hacerles un análisis para verificar de que ninguno está infectado, replicó la joven militar llamada Sasha, ella era muy bonita, no tanto como yo, pero se defendía, era alta con cabello color púrpura con pequeños flequillos color azul celeste, ojos color verdes, esos ojos mostraban sufrimiento, pero en estos momentos todos sufríamos, después de que empezó esta epidemia de muertos andantes, ya nada es ni volverá a ser igual.
Caminamos por un estrecho pasillo y descendimos por unas escaleras de metal, duramos varios minutos descendiendo hasta llegar a una puerta de metal con la leyenda "Z" entramos y una luz cegadora nos invitó a entrar hacia la habitación, cuando mis ojos se acostumbraron a la luz pude ver un cuarto color blanco con una silla y bacon en un costado de la habitación invitándonos a sentarnos como en una sala de espera, la primera en ir fui yo, me indicaron sentarme en la pequeña pero cómoda silla, insertaron una geringa en la vena de mi brazo izquierdo para sacar un poco de mi sangre y luego tomaron mi temperatura corporal la cual se encontraba estable.
Pasaron unos minutos en la que estuve sentada en esa silla hasta que uno de los tantos doctores o científicos, como quieran llamarlos, llegó y me ordeno levantarme dando así el paso para mis demás compañeros, Ariel fuel siguiente, luego Caro, Danny, Wanda, Ansel, Kevin y solo quedaba Bryan, el pequeño enano, aquel que había sido salvado en dos ocaciones por Caro, el pequeño se sentó en la silla y procedieron a sacarle sangre y al igual que a todos a medirle la temperatura.
-Señor? Preguntó Sasha al científico el cual estaba un poco nervioso.
-S...si? Preguntó el científico aún mostrando su nerviosismo.
-Pasa algo?
-Si!!! Pasa algo? Preguntó Bryan desesperado.
El científico levantó la mano y Sasha la cual estaba detrás de Bryan procedió en un rápido movimiento en presionar un botón que tenía la mesa haciendo que los brazos de Bryan quedarán atrapados en unas barras de metal que salieron de la ahora no tan cómoda silla.
-Que pasa? Preguntó alterado el pequeño sin dar crédito a lo que sucedía.
-U....us...usted está infectado!!! Grito sin más el científico, y hay que tomar medidas drásticas, dijo ya un poco calmado el científico.
-Esta dispuesto a ser un sujeto de prueba para una posible cura? Preguntó otro doctor el cual entraba por una de las tres puertas que habían en la sala.
-Que!!? Grito Bryan con un tono de desesperación profunda. Todos mirábamos la escena sin poder decir una palabra, la más afectada era Caro, salvarle la vida varias veces, para que muera por la mano de un humano y no de un zombie, eso debería de sentirse terrible, las lágrimas empezaron a salir y resbalaban las coloridas mejillas de Caro, me daba pena, todos perdemos personas, yo perdí a mi madre, padre y hermana frente a mis ojos y creo que se lo que se siente.
-N....no quiero convertirme en una de esas cosas, por favor, terminen con esto ahora, decía el pobre con los sudores en todo su cuerpo, su vestimenta desgastada se empezaba a ver empapada en sudor y las lágrimas cubriendo su rostro era muy triste, para el y para todos nosotros que somos amigos desde hace ya mucho tiempo y estábamos juntos desde que empezó todo esto.
De pronto las lágrimas empezaron a salir y resbalarse por mis mejillas, incline mi cabeza y lloré en silencio.
Bryan
-No podía creerlo, estaba infectado, no pensé que ese rasguñito me llevaría a convertir en uno de esas cosas, prefiero morir antes que ser uno de ellos, prefiero morir y no tener que bagar sin rumbo y comiendo a seres de mi propia especie, prefiero morir que despertar mi cuerpo este siento profanado y que se descomponga mientras circula todos los rincones de esta tierra en estado de descomposición esperando a que algún superviviente me disparé directo a la cabeza, si es que queda alguno.
Por qué a mí? Por que a mí?
-Por que a mí!!!!!! Grité perdiendo el control, veía en la sala como mis compañeros lloraban, en especial Caro, la cual estaba siendo consolada por Lee-ann.
Incline mi cabeza y toda mi vida paso frente a mis ojos buscando un recuerdo en específico, lo visualice y con pena y melancolía en mis palabras pedí que me mataran.
-No!!!!!!! Grito Caro perdiendo el control y luego con un ensordecedor ruido quedó en brazos de Lee-ann llorando mientras ocultaba su rostro en sus pechos.
-Saquen los de aquí, por favor pedí con la melancolía aún invadiendo mis palabras, no quería que ellos presenciarán mi ejecución. Todos salían uno a uno y al momento de que Caro salía me dio una última mirada con su rostro totalmente inexpresivo, sus labios se movieron lentamente proyectando palabras que no podía oír ni entender, mi corazón se destrozó al leer las últimas palabras que salieron de sus hermosos y carnosos labios "Te Amo" y justamente la puerta se cerró.
Lee-ann
Tras cerrar la puerta corrí hacia Caro a tratar de consolarla, ella no estaba llorando, se mantenía con un rostro inexpresivo y a la espera de que todo pasara, nos quedamos en silencio en el pasillo solitario.
PUMN oí el disparo al mismo tiempo que cerré los ojos por esa sensación que produce al escuchar un ruido fuerte, sentí el apretón de manos que Caro me propinó y con la misma y tratando de que fuera mayor la fuerza, agarre su cabeza y la hundí contra mi pecho.
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El Extermino Z
ActionSangre, supenso, terror, comedia pero sobre todo amistad en el aire... Bien!! En este libro conoceremos a un grupo de personas, las cuales vivían una vida normal, sin preocupaciones, con un estado social alto, pero no obstante un extraño virus se a...