Este es la historia de dos jóvenes enamorados, conocidos de prácticamente toda la vida... Estos chicos eran: Lucas, un chico alto, con sonrisa dulce, estudioso y, por encima de todo, mi inseparable mejor amigo; el otro chico, Alex, como podéis adivi...
~ONE PUNCH! (Three! Two! One! Kill shot!) Sanjou! Hisshou! Shijou saikyou!! Nan da tten da? Furasutoreeshon ore wa tomaranai! ONE PUNCH! Kanryou! Rensen renshou! Ore wa katsu!! Tsune ni katsu!! Asshou!! Power! Get power! Girigiri genkai made...~
Adormilado y a regañadientes, apago la alarma del móvil. A continuación me siento en el borde de la cama y con los ojos entrecerrados y sin energías me pongo las zapatillas de gatitos que tanto me gustan y bajo a la cocina a desayunar.
Termino de comer mis cereales y vuelvo a subir para prepararme para la escuela. A los diez minutos estoy listo, por lo que bajo con mi mochila puesta en un hombro, dejando recaer el peso sobre mi hombro derecho.
-Ya te puedes ir poniendo bien la mochila, Alexander -dijo mi madre con tono alto y claro. Esa mujer tiene ojos en todos lados..., sinceramente a veces la temo realmente.
Mi madre es una mujer de unos 160 cm, de pelo oscuro y corto, normalmente recogido en un moño. Según todos mis amigos ella es la madre perfecta, pero claro, ellos no la ven como la madre controladora que es. Está siempre al pendiente de todo lo que hago o no, con quien salgo, de lo que como, de cuanto duermo, e incluso tiene mi futuro planeado tanto respecto mi trabajo como mis relaciones; no acepta otra relación en mi vida que no sea Sara, ya que conoce a su familia desde hace ya un tiempo, y en excepciones a Lucas, por su historial de chico responsable.
Y sinceramente, aunque sea controladora tampoco la culpo, ya que primero está lo del divorcio, que básicamente fue porque mi padre se aburrió de mi madre, y también está lo de mi hermana, la cual se independizó en cuanto alcanzó la mayoría de edad. A mí lo de mi hermana no me afectó, ya que sé que ahora está mejor, y además de vez en cuando la voy a visitar a su piso.
Supongo que después de lo que ha pasado, es normal que me quiera tener al tanto, pues en cierto modo soy la única familia que le queda...
-Vale, vale -respondo tras un largo momento estando inmerso en mis pensamientos. Puse, como la Reina Suprema ordenó, la mochila en los dos hombros, disponiéndome a salir- ¡Hasta luego mamá!
-Hasta luego -respondió con un tono un tanto apenado.
Cuando por fin consigo salir, avisto a Lucas sentado en uno de los columpios del pequeño parque que hay frente a mi casa. Con una amplia sonrisa en mi rostro, voy hacia él a la par que él me ve y se levanta para venir también hacia mí, quedando frente a frente en un punto intermedio. En seguida me lanzo a sus brazos, a lo que el me recibe con una linda sonrisa, correspondiéndome además el abrazo. Nos separamos tras unos agradables segundos y empezamos a caminar hacia la escuela.
A los pocos minutos casi por inercia nos tomamos de la mano, a lo que al darme cuenta me ruboricé al instante, permaneciendo a partir de ahí cabizbajo todo el camino. Cuando ya podíamos ver de lejos la escuela y a varios grupos de estudiantes de camino a ella, decidí soltarle la mano, ya que podrían vernos. Lucas me miró un tanto extrañado, pero supongo que decidió no darle vueltas al asunto, ya que no dijo nada al respecto y tan solo puso su mano en mi cabeza y despeinó mi pelo, sonriendo en todo momento. Ahora era yo el que estaba desconcertado, además de ruborizado.
Cuando llegamos a la recepción del edificio, nos despedimos con un gesto y una sonrisa, como cualquier amigo haría, y fuimos cada uno a nuestras respectivas clases. Antes de llegar al inicio de las escaleras, me giré una última vez para poder ver a Lucas de nuevo, pero al darme cuenta de que el había pensado lo mismo que yo y nuestras miradas cruzaron, no pude evitar ponerme rojo y alterado, por lo que sin pensarlo dos veces subí a toda prisa en dirección a mi clase.
Llegué a mi clase respirando agitadamente y aún con las mejillas rojas. Sara, al verme se puso feliz, ya que estaría aburrida al haber llegado más temprano que yo, pero cuando vio que estaba ansioso su rostro se tornó algo preocupado.
-¿Que ocurre? -se acercó a mí y puso una mano sobre mi hombro.
-Tranquila Sara, solo estoy... algo cansado, anoche no dormí bien -aparté su mano de mi hombro cuidadosamente y me dirigí hacia mi asiento- ¿Vienes o qué?
-S-sí... -se quedó un poco ausente unos instantes, pero enseguida respondió y se sentó a mi lado.
Las tres primeras horas pasaron, y el recreo ya estaba por finalizar.
Estábamos Sara y yo sentados en una de las escaleras que dan al segundo piso, hablando de cosas un tanto estúpidas como por ejemplo...
-¿Por qué Tarzán no tiene pelo por todos lados, si no se ha afeitado en su vida? -preguntó Sara, un poco para hacer la gracia aunque la situación sea curiosa.
-Será porque habrá algo en su genética que provoque que no le crezca mucho el vello corporal -dije poniendo voz de sabelotodo, cuando en realidad me lo inventaba sobre la marcha y decía lo primero que se me pasaba por la mente- . Vale, responde tú esta: ¿Cómo se pone Phineas la camisa, con el cabezón que tiene?
-Oh, Alex, Alex... Muy fácil, simplemente la camiseta es extra elástica, obviamente -respondió Sara en tono divertido, acabando con un guiño-. Oye, ¿te parece que vayamos al departamento de matemáticas y le pidamos el justificante a Pilar?
Me quedé pasmado por unos momentos, pensativo. ¿Justificante de qué y para qué?... No entiendo nada.
-No me digas que te has olvidado -dijo con tono desesperado y el ceño fruncido. Al no responderle, suspiró y más calmada prosiguió hablando-. Eres un caso perdido, Alexander. La profesora nos dio permiso para faltar a clase ya que no nos hace falta hacer el examen, pero tendremos que pedirle un justificante para los que nos vean por ahí.
-Ahh, es cierto... Perdón, ni me acordaba de que ahora tocaba Matemáticas -rasqué mi nuca avergonzado.
-Pues vamos -se levantó y alzó su mano para ayudarme, a lo que yo la acepté y gracias a su impulso me levanté también.
Fuimos al departamento de Matemáticas, la profesora nos entregó un papel a cada uno y nos despedimos, con una gran sonrisa.
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Pues eso es todo :3! Siento la tardanza, pero bueno. Me he empeñado en publicar la siguiente parte hoy ya que es oficialmente mi último día de vacaciones de verano :'"3... Espero que os haya gustado, y gracias por leer♡
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Pd, las zapatillas de andar por casa de Alex UwU.
Pd2, la de los medios es la madre de Alex. Sí, es la madre de Deku (boku no hero academia) con el pelo negro, pero es que no encontraba ningún personaje que se ajustara con la visión que tengo de *insertar nombre de la madre de Alex*.
Disculpen las expresioneserróneasyloserroresortográficos.