«· Mi Mejor Amigo ·» || Lee Felix🐱

23. Seungmin Day

[👼]

   Aproximadamente el viaje de Seúl hasta Jeju tiene una duración de una hora y diez minutos.

   Diez minutos.

   Solo eso pudo dormir Soo, ya que los perdidos pensaron que era buena idea cantar a todo pulmón mientras van en una avión.

   En fin...

   Era totalmente inevitable no seguirles la canción, así que después de decirles que bajen el tono de voz, la pelinegro se unió a su canto. Hasta la chica que inicialmente quería dormir todo el viaje no evitó cantar junto a ellos.

   Su pequeña fiesta no duró mucho debido a las quejas de los demás pasajeros, el grupo de escandalosos simplemente guardaron silencio e hicieron como si nada pasó.

   Después de eso, los minutos que faltaban para llegar a su destino pasaron entre pequeñas charlas y carcajadas contenidas.

   Soo, que miraba por la ventana, soltó un gritito de emoción al ver como el avión se acercaba a la pista de aterrizaje.

   Al estar firmes en tierra y escuchar la voz del piloto decir que ya podían bajar del avión dándoles la bienvenida a Jeju, cada uno se dispuso a tomar las mochilas que depositaron en los compartimientos superiores de sus asientos, para luego ir saliendo del avión unos más emocionados que otros.

Soo.

   Resoplé inconforme al tomar mi maleta. Sí, una sola, tuve que dejar las otras dos porque alguien dijo que estaba exagerando.

   Me gusta estar abrigada y más en estos tiempos, donde las lluvias son más frecuentes en Jeju y, estoy totalmente segura, de que el frío es el que reinará a todos los lugares que vayamos, bueno, tal vez haya una excepción en la playa. Oh, ya quiero ir a la playa.

   Lo que más me duele de solo traer una maleta es que en una de las que dejé tenía todo mi equipo de dibujo, si así se le puede llamar a los pocos pinceles, colores, pinturas y blocks llenos de bocetos que tengo. Quería hacer algo para Seungmin, sin embargo, ya no es posible.

   A menos que compré materiales aquí, de hecho, no es mala idea.

   Miré a mi alrededor, los chicos aún estaban retirando su equipaje, así que me senté en uno de esos lugares donde esperas a que llegue o te despides de alguien.

   No es buen momento para recordar mi situación, aunque estando en el aeropuerto es más que difícil no pensar en ello.

   El profesor cara de limón me dio la oportunidad de estudiar en el extranjero, aún no sé exactamente dónde, pero sí tengo fecha.

   —Al terminar las vacaciones.

   —Al terminar las vacaciones, ¿qué? —Oh oh, me abofeteé internamente por haberlo dicho en voz alta. Miré hacia mi costado temerosa, aunque me relajé un poco al ver quién era. Su mirada estaba puesta en mí, sus ojos estaban entrecerrados, expectantes a mi respuesta.

   —Yo... Este... —Justo ahora no podía pensar en una buena excusa. Suspirando rendida me acerqué un poco más a él, mirando hacia los lados para asegurarme de que solo él escuchara—. Verás, Minho... —inicié rogando para que alguien interrumpiera o algo, pero nada pasó—. Hay algo que... No les he dicho.