And Now... What? - Brallon AU

10- Only the beginning

Hay ciertos momentos de nuestra vida donde llegamos a un cruce donde se nos presentan dos caminos distintos (a veces incluso más). Debemos elegir uno para poder continuar pero nos asaltan las dudas; "¿Estaré haciendo lo correcto?", "¿Podré retroceder?", "Tal vez debí escoger otro recurso", "Ojalá alguien me dijera si voy por el adecuado". Todas esas preguntas que rondan tu cabeza y no parecen querer irse, te atormentan por las noches cuando estás tratando de dormir hasta que, por fin, tomas esa decisión... aunque nunca sabrás cómo habría sido de escoger la opuesta y de nuevo.. surgen las preguntas.

Pero os diré algo; esto no es un examen. No existe respuesta correcta ni hay nadie que vaya a corregirlos, mucho menos os darán otra oportunidad.

Aquí y ahora, estás completamente solo en una decisión que puede determinar el resto de tu vida.

Buenas suerte.

***

El día estaba tormentoso por lo que, desde la mañana, no se había planteado ni una sola vez la posibilidad de salir al exterior. Esperaba que al menos parara para cuando tuviera que ir a trabajar por la noche porque, sino, sería un engorro y tendría que llamar a un taxi para que le recogiera, no está para ese tipo de gastos. Lo único bueno que veía si aquello llegaba a ocurrir es que apenas nadie entraría al club porque ¿quién quiere salir de fiesta sabiendo que se empapara a la vuelta? Es mucho mejor quedarse en casa mezclando bebidas con tus amigos, Brendon lo sabe mejor que nadie.

— La mancha del techo se ha vuelto más grande. —Murmuraba con su tercera cerveza en los labios y mirando al techo del dormitorio.

— Deberías llamar a tu casera, eso no es normal. —Spencer había decidido ir de visita unos minutos, porque pasaba cerca de su apartamento, pero con la lluvia la cosa se había alargada.— Mira este meme de Twitter. —Alargó el brazo para poner el el teléfono móvil prácticamente en la cara.

— Arg... Tío, te gusta un humor muy raro. —Agradece toda visita que sea de su mejor amigo, únicamente de él, porque no tiene los días más felices precisamente.

Su humor ha decaído con el paso de los días porque, para su desgracia, no es capaz de detener el tiempo ni controlar sus tremendos estados anímicos. Hace unos días estaba eufórico por pensar en lo que sería la soltería para él, seguro ligaría mucho ¡No pararía de entrar gente en su cama! Eso lo ponía. Pero al día siguiente estaba pensando en que nadie le querría porque es realmente estúpido, morirá solo rodeado de perros.. que no es una muerte tan mala, al menos ellos no se comen tu carne como los gatos aunque serían buenas formas de ocultar pruebas. Sí, también ha tenido pensamientos horribles sobre acabar con su vida, no le pasaba desde la adolescencia, creía que había conseguido inhibir esas cosas pero lo único que ha hecho estos años es hacer como que nunca han ocurrido; grave error.

— ¿Hablaste ya con Ryan?

No respondió, es más, usó esa táctica tan vieja de beber mirando hacía otro lado para evadir la pregunta.

— ¿No dijisteis que hablaríais?

Pero va a insistir, porque es su psicólogo personal. Deberá sacarse la carrera para poder tener derecho a cobrarle a este paso.

— Ya pero... no quiero. Me ha llamado un par de veces pero... el contestador ¿sabías que el móvil tenía contestador? Es tan de los 90...

— Brendon.

— ¿¡Qué!? ¿No puedo actuar como si no hubiera pasado nada hasta que mágicamente todo se solucione? Porque a mi me parece una táctica muy factible, esa y encerrarme en un bunker con raciones militares de comida hasta que los aliens vengan a invadirnos y yo este seguro, cuando salga comeré unas pollas espaciales y me haré su amo y señor.