CAPITULO 32

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NARRA MIRIAM
Cuando me relajé un poco me senté en el colchón que había en la celda, cerca de mí oí unos sollozos.
- Miriam: ¿Iria? ¿Eres tú?
- Iria: ¡Miriam!
La niña empezó a llorar mucho más fuerte desde la otra celda.
- Miriam: Iria tranquila por favor, deja de llorar y explicame que hago aquí, necesito saber como salir.
- Iria: Miriam yo... lo siento, te han secuestrado, como a mí, tuve que mentirte porque me tenían amenazada... ¡quiero irme a mi casa!
- Miriam: Joder joder joder que hago yo ahora.
Intenté calmarla para que dejara de llorar pero no había forma.
- Miriam: Iria tranquila, te prometo que vamos a salir de aquí sanas y salvas.
Entonces escuché el ruido de una puerta, creo que era la de la celda de Iria, que aún seguía llorando.
- Vigilante: ¡Niña callate! ¡Estoy harto de vosotras!
Y luego escuché un golpe y como Iria se callaba, solo escuchaba pequeños sollozos y su respiración agitada, por último escuché que se cerró la puerta y vi al vigilante pasar por delante de mi puerta asi que me acerqué a las rejas y le cogí del brazo.
- Miriam: ¡Oye tú! Como le hayas hecho algo a la niña te juro que no sales de esta, y si estás tan harto de nosotras, ¡suéltanos!
- Vigilante: Vamos a ver rubita, tu que entiendes de callate imbécil, cómo vuelvas a amenazarme o a gritar la que no sales de esta eres tú. - Miriam: No me llames rubita... al menos dime que cojones hago aquí.
- Vigilante: Eso te lo explicará mi jefe que está a punto de llegar, ahora portate bien si no quieres que te vuele la cabeza.
No tuve más remedio que hacerle caso asi que lo solté y me fui hacia la pared que creo que daba con la celda de Iria.
- Miriam: ¿Iria estás bien? ¿Qué te ha hecho?
Silencio absoluto, no contestaba.
- Miriam: Iria... ¿Estás ahí?
- Iria: S-si, Miriam t-ten-go s-sangre.
- Miriam: Joder... tranquila cariño, en cuanto llegue el tal jefe ese salgo de aquí y te curo.
- Iria: M-mu-chas gracias.
Entonces me acerqué a la reja y cogí al vigilante del brazo otra vez y tiré del él haciendo que chocara contra la reja quedando cara a cara muy cerca de mí.
- Miriam: ¡Que cojones le has hecho a Iria!
- Vigilante: Mira rubia me tienes hasta los huevos.
Entonces el tipo se soltó de mi agarre, entró en mi celda y me empujó haciendo que chocara contra una pared para entonces acercarse mucho a mi y colocarme la pistola en la frente. Creia que acababa de llegar mi fin asi que cerré los ojos y...
- X: ¡Suéltala imbecil! ¡Te dije que a ella no la quiero muerta!
-Vigilante: Jefe lo siento, esta gilipollas me tenía harto.
Entonces vi como el vigilante se iba y cerraba la puerta dejándonos solos al supuesto jefe y a mí.
- Jefe: Bueno leona... tenía muchas ganas de conocerte ¿sabes?
Se acerca a mi y me acaricia la mejilla pero rápidamente reacciono y le aparto la mano.
- Miriam: ¿Quién eres, qué quieres, qué hago aquí?
- Jefe: Shh calla leona, que aquí el que habla soy yo. Pues verás, quiero dinero y tu eres famosa asi que... ¡tachán! Eres todo lo que necesito.
- Miriam: Hijo de puta... e iria, ¿qué tiene que ver ella aquí?
- Jefe: Mmm no sé, por diversión, entretenimiento más que nada.
- Miriam: ¡Eres lo peor!
No pude contener las ganas de matarlo e intenté darle un puñetazo, pero el me paró el puño y me retorcio la mano para luego empujarme al colchón y pomerse encima de mí, por mucho que pataleara no me lo podía quitar de encima, me tenía muy bien sujeta. De pronto se acercó para besarme pero reaccione y le di un cabezazo que un poco más y no le dejo sin nariz.
- Jefe: ¡Ahhg! ¡Pedazo de puta me las vas a pagar!
Y se fue dejándome sola otra vez en la celda.
NARRA ROI
- Roi: Luis, ¿no crees que tu hermana está tardando demasiado?
- Cepeda: Un poco si que está tardando pero no sé, será una entrevista bastante larga.
- Roi: Tal vez deberiamos de ir a buscarla, ¿no crees?
- Cepeda: Pues sí la verdad, podríamos acercarnos a Fox, a ver si la vemos por allí.
- Amaia: ¿A quién tenéis que ver?
- Cepeda: A Miriam.
- Roi: Está tardando mucho y me estoy empezando a preocupar, porque además tampoco da señales por el móvil.
- Amaia: Buah yo también me estaba empezando a preocupar, voy con ustedes.
- Cepeda: Venga, id para el coche que yo voy a llamar a Aitana.
NARRADOR NORMAL
Pues al final también se les unieron Ricky y Aitana, ya iban llegando a su destino.
- Cepeda: Pues ya estamos aquí.
Entraron en un gran edificio y fueron directos a recepción.
- Roi: Hola, ¿me pueden decir donde está Miriam Rodríguez?
- Recepcionista: ¿Miriam Rodríguez? ¿La que canta? No, no está aq... un momento, ¿vosotros sois los de la tele? ¡Roi Méndez! ¿Me puedo echar una foto?
Tras echarse una foto siguieron con la conversación.
- Roi: Entonces me has dicho que Miriam ya se ha ido ¿no?
- Recepcionista: No no, es que Miriam no ha estado aquí, si lo hubiera estado le hubiera pedido una foto. Ah por cierto, esta mañana dejaron aquí un sobre que ponía Roi M. supongo que serás tú.
- Roi: ¿Cómo que no está aquí? Pero si tenía trabajo.
- Recepcionista: Pues no sé, yo llevo toda la mañana aquí y no la he visto.
- Cepeda: Roi coge el sobre, vamos a leerlo al coche, espero que no sea lo que pienso.

ODIO AMARTE TANTO / MIROIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora