Epílogo

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Mingyu sintió una enorme calma invadir su cuerpo cuando los brazos de su prometido rodearon su cintura, atrayendolo a su pecho impidiéndole levantarse de la cama. Volvió a acostarse por capricho de Wonwoo, pero tampoco hizo algo por apartarlo.

—¿En verdad te tienes que ir?, es demasiado temprano...— murmuró con la voz ronca, sin permitir aún que se moviera de la cómoda posición que habían adoptado, Mingyu ocultó su rostro en su pecho, inhalando su aroma, disfrutando silenciosamente.
—No quisiera irme, pero tengo que hacerlo...— Wonwoo renegó, apretandolo más para que no se fuera.— Wonnie, volveré pronto, te lo prometo..
—¿No puedes aplazarlo?
—Mi hermana está en el hospital esperando dar a luz, ¿Crees que voy a querer aplazarlo?, mi sobrino está apunto de nacer...
—Así la voy a querer ver cuándo tengamos los nuestros, ve con cuidado.

Las mejillas de Mingyu se sonrojaron, separándose del agarre del mayor, agachándose un poco para besar su mejilla e irse a duchar. Aquello le había dejado algo pasmado, quizás había sido una incoherencia que se le había salido por ser tan temprano y no estar en sus cinco sentidos.

¿Tener hijos en un futuro?, la idea no sonaba tan mal, aunque fuera imposible que un hombre se embarazara siempre existía la posibilidad de adoptar.

Sonaba bien para él.

[...]

Tal y como lo había prometido, había vuelto lo más pronto posible, pero el parto de su hermana se había complicado un poco, en especial porque su pareja se había desmayado en cuanto vio como la cabeza del bebé se asomaba y tuvo que reanimarla fuera de la sala de parto, pero todo lo demás había ido bien, el bebé había nacido sano gracias a que su hermana había prometido alimentarse bien y había estado ayudando a Tzuyu a alimentarla bien –aquello incluía recibir llamadas a las 3 de la mañana porque se le había antojado algo y no sabía que hacer– estaba feliz por su hermana.

Pero cuando salió del hospital rumbo a su casa se había puesto a pensar, ¿Y si Wonwoo y el tuvieran un hijo?, ¿Wonwoo quería tener hijos?, sabía bien lo reservado que era su prometido para esos temas, cualquier cosa que involucrara niños era evitada por él, no era que le molestara, pero quizás al ver la cara de felicidad de Jihyo al ver a su primer hijo le había removido un poco el corazón.

Un poco, quizás.

Suspiró, sacando de su bolsillo las llaves del departamento que compartía junto con Wonwoo, pero antes de que pudiera abrir la puerta esta se abrió por el azabache, no dudó en lanzarse a sus brazos, siendo recibido con mucho cariño. Un abrazo que decía “te extrañé” en toda regla. Apoyó su cabeza en su hombro, sonriendo cuando los besos en su cabeza empezaron a llegar. Wonwoo podía ser bastante cariñoso si se lo proponía.

—Te tardaste demasiado, ¿Pasó algo?— Mingyu supuso que había estado durmiendo casi todo el tiempo en el que había estado fuera.
—Perdón, pero tuve que tratar con una desmayada y una madre emotiva.— Soltó una breve risa, mientras el azabache dirigía sus cuerpos al sofá, sentándose para luego atraer el cuerpo del más alto hacia el suyo, abrazándolo con fuerza.
—Te ves como si hubiera pasado algo más, dime, Mingyu—

Mingyu lo pensó por tanto tiempo que Wonwoo empezó a asustarse, posó su mano en su mejilla, haciendo que Mingyu le mirara a los ojos

—En la mañana— empezó, bajando su mirada apenado— dijiste que ya quisieras ver a mi hermana cuando nosotros tuvieramos hijos... quizás sea una tontería, pero me puso a pensar durante todo el día...— La sonrisa avergonzada de Mingyu provocó que el corazón de Wonwoo diera una vuelta completa.

¿En serio había pasado todo el día pensando en eso?, el lo había dicho esperando que no le prestara tanta importancia.

Sus mejillas se colorearon de un tono rojizo.

—A ti... ¿Te gustaría que tuviéramos hijos?— El azabache finalmente se atrevió a preguntar. Mingyu alzó su cabeza, mirándole con los ojos brillantes. Wonwoo esbozó una sonrisa ante la vista, apoyando su frente contra la contraria.— Eso me dice todo, cariño.

Besó su frente, continuando un camino de besos por sus mejillas hasta llegar a sus labios, atrapó sus manos, entrelazando sus dedos cariñosamente.

— No me molestaría tener hijos contigo, si seguimos intentando hacer uno a la fuerza puede que consigamos tenerlo...
—¡Wonwoo!— Las mejillas del moreno se tiñeron de un precioso tono rojizo, causando una risa por parte del contrario, besó sus mejillas, deleitándose con la preciosa vista que le brindaba.

Acercó un poco más sus rostros, acortando la distancia entre sus labios, uniendolos con dulzura y calma, se acomodó en el sofá, teniéndolo de frente para continuar con su tarea, plantando inocentes besos en sus labios, a pesar de que llevaran 3 años de relación, Mingyu seguía a avergonzandose cada vez que lo besaba.

—Sabes que eres lo mejor qué me ha pasado en la vida, ¿Verdad?— Habló, rozando sus narices. El moreno, como siempre, le miró apenado antes de unir sus labios al no poder responder algo más por la vergüenza.

Pero a pesar de eso, acababa dando a notar sus sentimientos a través de sus besos.

“También eres lo mejor que me ha pasado, Wonwoo, lo eres y siempre lo serás”.

Y no necesitaba saber nada más.

—bien, cariño. Hablaba enserio con eso de hacer nuestro propio hijo a la fuerza, así qué...
—Calla y bésame de una vez antes de que me de más vergüenza.

¡He aquí el horrible epílogo!
Sé que las tuve esperando por mucho tiempo, y lo lamento mucho por eso, pero pasaron muchas cosas, muchos bloqueos creativos, avanzaba el epílogo pero nunca me convencía nada, hasta que finalmente conseguí hacer una cosa tan feita cómo está.

Y SÉ QUE ESTÁN ESPERANDO EL LEMON. pERO, las que se fijen poquito en mi perfil, sabrán que tengo un libro que se basa solo en eso, así que tengo planeado publicarlo ahí para no manchar(? La “pureza” de este libro.

Gracias por leer y ser pacientes, las ama:

pues yo, quién más. ;)

pd: el libro se llama Only Seventeen y es solo +18, los pedidos están abiertos para que vayan a dejar sus peticiones, las reglas están ahí mismo. ♡♡

Wʜᴀᴛ ɪs Lᴏᴠᴇ? [Mᴇᴀɴɪᴇ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora