Después de tanto pensar en cómo alejar a Marilia de mi, no se me ocurre nada, llego a casa y encuentro a Whitney y a Dan durmiendo, decido no molestarles y paso a mi cuarto, me doy un baño y luego me acuesto a dormir.
Mi despertador empieza a sonar me esta avisando que mi rutina diaria esta por comenzar, pero hago caso omiso a ello, ya dije que después de lo que paso ayer no iría. Me quedé casi toda la mañana durmiendo, luego bajo a la cocina allí estaba Whitney preparando para su desayuno y también el de Dan.
-¿Por qué no has ido a la preparatoria?-pregunta ella cuando se da cuenta de mi presencia.
-Estoy aburrido, muy cansado.-respondo sirviendome un poco de café.
Ella trae a Dan a la mesa, el se acerca a mí, ya estaba caminando bien, al llegar a mi dice -Papá - yo quedó mudo no sabia que responderle tan solo lo cargo en brazos y le doy un beso en la frente. Whitney me mira y me regala una sonrisa, luego ella se despide porque tenia cosas que hacer en su casa.
Decido llevar a Dan al parque para que se distraiga, la mayoría de las chicas me miran con admiración, les parece atractivo ver a alguien como yo cuidando a una criatura, ellas quizás se imaginan que es mi hijo, pero la verdad es como si lo fuera.
Tanto como su vida y la mía es tan asegurados, mi madre llegó a encargarse de eso, dejó mi futuro asegurado y por lo tanto también la de mi hermana, y ella antes de cometer aquella locura dejo sus bienes a él, mi pequeño, me dolía mucho las veces en que me preguntaba por su madre, a veces él cree que Whitney es su madre, es por eso que le encanta pasar el tiempo con ella, algún día él tendrá que saber la verdad, lo sé, pero mientras dejaré que él me llame Papá.
Cuando estábamos de vuelta a casa nos quedamos en una heladería, a él le encantan los helados de chocolate, pues a mi tambien, llevamos más de un kilo, llegamos a casa y el queda dormido por el cansancio, a penas era de siesta, mi mente tan solo quería que llegara la noche para que así pudiera ir a ver a Marilia, llevar a cenar a la chica ruda es todo un desafio, a mí me excita el desafio, las chicas rudas, las que se hacen las dificiles, creo que ya lo había dicho.
Eran las 7 pm entre a bañar, salí después de 20 minutos, me vestí y como Whitney no podía venir a quedar con Dan, porque tendría visita, tuve que llevarlo hasta la casa de ella para que durmiera allí.
Mire por el retrovisor a ver que tal se veía mi pelo, lo arreglo un poco, voy a dar unas vueltas y luego paso por Marilia, quede impresionado, llevaba puesto un vestido negro ajustado a su cuerpo, que dejaba en descubierto sus hermosas piernas, el pelo recogido, unos zapatos negros, en verdad estaba más que hermosa, bajé para abrirle la puerta del coche, pero ella ya había subido, volví a entrar y me dispuse a conducir, llegamos hasta un restaurante, estacione el coche, bajé rápidamente para abrirle la puerta, pero ella ya había bajado.
Me sentía un tonto, ingresamos al lugar y nos llevan a una mesa para dos, pedimos un whisky, al menos ella lo pidió primero, empezamos a tomar un trago, era muy fuerte para mí, pero al parecer ella ya estaba acostumbrada a beberlo.
-Estas hermosa.-susurre.
-Gracias.-responde ella muy cortante.
-¿Pedimos algo de cenar?-pregunté.
-No, gracias. No ceno.-responde ella frunciendo el ceño, que extraño ¿no?
-¿Por qué?-pregunté curioso.
-Haces Muchas preguntas.-respondió un poco disgustada.
-Me hubieras dicho, así te invitaba a otro..
Ella hace una abscisión y dice -Ya es tarde, debo regresar a casa.-
-¿Cómo dices? Si hace menos de 10 minutos hemos llegado.-respondo un
poco enojado.
-Sí no quieres llevarme, vuelvo caminando.-responde y se levanta dirigiéndose a la salida.
Esta chica esta loca, ¿Qué demonios es lo que le ocurre? No puedo entenderla, esto es una mierda. Voy a pagar la cuenta y salgo disparado tras ella, consigo alcanzarla.
-¿Por qué me haces esto?-no me doy cuenta que las lágrimas están apunto de brotar.
-Por favor solo aléjate de mí.-responde ella, logré ver que estaba destruida,a punto de romper en llanto. No entendía, todo esto me parece absurdo, no logro comprender lo que está pasando.
-Te llevo a tu casa.-dije para evitar que ambos lloremos.
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Un final inevitable.
RomanceEstoy preparado a lo que venga, al menos eso creía, pero no, en un momento entendí que no lo estaba, todo mi mundo cambio cuando la conocí a ella, tan perfecta, tan dura, fue estúpido, pero así fue, delante de ella me derrumbe, a sus pies caí, me hi...