Pintando un destino

Historia

—No debí venir.

Pensó Usagi con la mano cerrada, a unos milímetros de la puerta, a punto de tocar, atrás de esos diez centímetros de madera, se encontraba esa nueva Sailor, aun le costaba trabajo digerir su llegada, se debatió toda la noche en ir, pero la curiosidad y las palabras que le inyecto Luna, la animaron, por supuesto la gatita iba con ella.

—Si no estás segura— comento Luna desde el suelo— mejor da la vuelta, de todas formas querías comentarlo con las chicas primero.

Usagi bajo la mano, quedo colgando a su costado. La verdad era que Usagi no quería molestarlas: Rei, Ami y Lita estaban a punto de dar a luz.

" ¡Hasta pareció que se pusieron de acuerdo!", pensó,"Y Mina que recién termino su gira, ¡le dio sarampión! ",  Usagi levanto nuevamente la mano para tocar la puerta, pero la dejo flotando dudosa.

—Mejor ya vámonos— dijo Luna viendo su indecisión.

— ¡Yo puedo manejar esto!— exclamo golpeando la puerta con el pie, sin querer— ay no.

La puerta se abrió, Usagi respiro profundamente se encontraría con ¿ella o él?

—Viniste— dijo emocionado, ella tuvo que levantar el rostro para verlo a la cara, sus ojos grises y alegres enmarcaban su rostro, era el chico de la galería, pero vestido casual: playera negra sin mangas, que dejaba ver sus torneados brazos, piel blanca, jeans azules, pies descalzos, su mano juguetona se paseo por su cabellera quebrada y platinada— pasen— invitando también a Luna, quien se impacto con la guapura del chico.

Usagi se sonrojo al verle de espaldas de pies a cabeza, era más alto de lo que recordaba, de hecho todo había sucedido tan rápido que no recordaba del todo su forma masculina, salvo sus ojos.

—Tomen asiento por favor ¿Les ofrezco agua, leche?

—No gracias— contesto Luna, Usagi la reprendió con la mirada, por hablar enfrente del desconocido.

—Tranquila, Sailor Galaxia no me comento nada de tu linda gatita, pero es de suponer que estamos rodeados de mucha magia— tomo asiento enfrente de ellas— en otros mundos me encontré con muchos tipos de animales parlantes.

El chico rió nervioso, eso le extraño a Usagi.

—No entiendo, ayer me estaba coqueteando, y ahora se ve tan tímido, hasta parece otro, o tal vez como ya sabe que soy Sailor Moon, eso...ha formado una barrera— pensó decepcionada.

—Supongo que debo empezar por presentarme— se levanto e hizo una leve reverencia—, mi nombre es Kai y vengo del planeta Sora*.

—Es cierto, faltaba eso— dijo la rubia— mi nombre es Usagi.

— ¡Yo soy Luna!

Salto al regazo del chico.

—Si te viera Artemis— murmuro Usagi.

—Tengo alguien a quien presentarles, pero aún no regresa.

—Seguro es tu princesa— dijo Usagi cruzando los brazos.

— ¡Como lo sabes!— exclamo el chico— bueno casi le atinas, pero...

En ese instante la puerta se abrió, Luna y Usagi abrieron los ojos bastante.

Cabello rubio, ojos rojizos, estatura pequeña.

Kai se levanto y le hizo una reverencia.

—Majestad.

— ¿Qué he dicho de las formalidades?— pregunto molesto, el niño.

—Permítanme presentarles al príncipe de mi planeta, por cierto se llama: Sora.