Faltaba menos de un mes para mi cumpleaños que ironía quería que todo acabara lo más rápido posible y en menos de un mes sucedería, aún así y pese a las lecciones y ya tener controladas todas la técnicas me sentía incapaz y necesitaba más tiempo. Mi hermana ya nunca estaba en casa casi al igual que mamá y por si las dudas Dominique seguía protegiéndome y enseñándome, haciéndome repasar todo lo aprendido siempre, con respecto a Sebastian todo era más fácil a partir de haber aclarado todo con Dominique nuestra relación se volvió más fuerte, él me apoyaba en todo lo que podía hasta el tema de las brujas que ni ellos estaban enterados. A partir de este poco tiempo por el hecho de tener controlado las técnicas de lucha y o que implicaba solo quedaba aprender a controlar mi magia que al parecer según Dominique se presenta en mi más fuerte que en cualquier otra generación.
Compensaba las tareas, la escuela, lecciones de hechicería y ya no tenía tiempo para nada más; Sebastian lo entendía sin embargo para mí era difícil la lejanía solo me hacía pensar cosas que en su totalidad podrían cambiar mi vida, mi decisión sobre irme en cuanto terminara era real pero solo Dominique lo sabía, pensaba desaparecer sin que siquiera mi madre o supiera, respecto a las clases faltaba poco después de acabar con Zahid, aún no estaba segura si seguiría allí o me cambiaria según el lugar a donde fuera, mi padre había dejado una cuenta a mi nombre, tenía bastante dinero y días antes retiraría la mitad, con lo que intentaría sobrevivir y acabar el colegio mientras buscaba trabajo.
-Aún estás segura de irte?- dijo Dominique una tarde mientras me observaba hacer tarea después de terminar la lección de magia
-si lo estoy, no voy a cambiar de opinión necesito alejarme de todo- dije
-y no crees que eso lastimará a Sebastian él te ama de verdad y si te va no tardara en encontrarte o pasara buscándote- dijo con una expresión de dolor en su rostro, es que ella lo apreciaba como un hermano y no quería verlo sufrir
.me pregunto lo mismo cada día pero no puedo quedarme siento que de no buscar algo diferente para mi vida, no quiero estancarme de esta manera pero tampoco quiero lastimarlo, también lo amo pero siento todo tan irreal, así que no puedo- dije al borde de las lagrimas
-se que tomaras la mejor decisión y contaras con mi apoyo- dijo abrazándome –ahora sabes podemos detener el tiempo con la próxima lección, te lo iba a enseñar al final pero creo que necesitas un tiempo muerto-
-enserio, genial déjame termino esto y me lo enseñas- dije emocionada
-no te lo enseñare mañana, necesitas descansar y tener toda tu fuerza pero te advierto que es lo más difícil que te enseñare deberás estar completamente concentrada en cada uno de tus sentidos pero afortunadamente a medida que lo tengas controlado será sencillo de conseguirlo, nadie se da cuenta de cuando usas esto así que es como discreto- dijo explicándome en qué consiste.
Estaba muy ansiosa pero tenía que dormir me encontraba demasiado cansada y él siguiente día sería totalmente emocionante para mí, poder manejar el tiempo será de locos.
-April, arriba nena es hora de detener el tiempo- dijo Dominique sacándome de mis sueños
-sí, enseguida voy solo me ducho- dije levantándome medio dormida, cuando estaba totalmente lista, baje por el desayuno que Dominique ya me había preparado, como de costumbre en los últimos meses, mamá pasaba viajando y Giselle parecía que no vivía en casa, la había visto solo un par de veces. Al terminar de comer nos dirigimos al patio y comenzó toda la magia, tras enseñarme a controlar todos mis sentidos, pude sentir toda la magia fluyendo en mí y fui capaz de detener el tiempo, al principio solo por cinco minutos pues perdí la concentración, pero después fue totalmente sencillo que lo conseguí por una hora, me deje quedar y solo me puse a pensar decidiendo que me iría, pero debería pasar algo antes con Sebastian para yo poder alejarme, el poder controlar el tiempo ahora era tan sencillo que de seguro lo usaría con Zahid, tendría ventaja y acabaría más rápido con él.
Lo malo era que como pedía todo de mi fuerza me dejaba exhausta que por poco me desmayo, según Dominique si lo practicaba todos los días sería totalmente sencillo para entonces y no desgastaría todas mis fuerzas.
-Mi pequeña yo te seguiré donde vayas y te protegeré, también te ayudare y siempre que quieras te hare saber de Sebastian y a él de ti- dijo cuando le afirme mi decisión de irme.
El tiempo pasaba muy rápido, pero yo me sentía preparada para lo que tocaba, el año escolar para mí ya estaba a punto de terminar solo me faltaba una semana de exámenes, me había adelantado todas las clases así que estaba prácticamente pasada, lo había hecho por mi objetivo de irme después de esa semana de exámenes, me quedaba solo una más y me enfrentaría a Zahid.
